Publicado en
octubre 02, 2009
Enemigos no son tanto quienes nos odian, sino mas bien aquellos a quienes odiamos.
—D.R.
Anhelo realizar una tarea grande y noble, pero es mi principal deber hacer lo pequeño como si fuera extraordinario. Green, el historiador inglés, dice que la humanidad avanza gracias no solo a los potentes empujones de sus heroes, sino también a los modestos impulsos de cada hombre responsable.
—Helen Keller
Los habitantes de un planeta sin flores nos supondrían eternamente locos de alegría por estar rodeados de ellas.
—Iris Murdoch, en A Fairly Honourable Defeat
Ed Ricketts, a quien el escritor norteamericano John Steinbeck inmortalizó en una de sus novelas, vivió algún tiempo en medio de la pobreza. Tomando asiento con sus hijos, trató de exponerles la situación con la mayor sencillez:Debemos tener presentes tres cosas; las mencionaré por orden de importancia. La primera: divertirnos cuanto podamos con lo que tenemos. La segunda: comer tan bien como nos sea posible, pues de no hacerlo asi nos faltarán fuerzas suficientes para gozar. Y tercera: mantener la casa en orden, lavar los platos, y cosas por el estilo. Pero no dejemos que esta última interfiera en las otras dos.
—J.S.
Por diversos que sean los temperamentos y aptitudes de los grandes hombres, todos tienen una caracteristica común: no se comparan con los demás, prefieren seguir su propia carrera bajo sus propias con—diciones.
—Sydney Harris
Existe la tendencia a atribuir a la suerte el éxito ajeno. Es más fácil ver la buena estrella de alguno que sus meritos.
—A.B.
El objeto más distante que podemos ver a la luz del dia es el Sol. Durante la noche, sin embargo, divisamos estrellas millones de veces más lejanas. Recuerde esto el lector la próxima vez que su mundo personal se OSCUreZCa.
—Good Reading
Desde los seis años de edad tuve la manía de dibujar. Al llegar a los 50 ya había publicado una infinidad de diseños; pero todo lo que he producido antes de los 70 apenas si vale la pena. A los 73 aprendí a conocer un poco la verdadera estructura de la naturaleza de los animales, las plantas, las aves y los peces. Por consiguiente, cuando tenga 80 años habré hecho todavía más progresos; a los 90 penetraré en el misterio de las cosas; a los lOO habré llegado, ciertamente, a un piano maravilloso; y cuando tenga 110, todo lo que haga, aunque solo sea un punto, tendrá vida. Ruego a todos los que vivan tanto como yo, que observen si no cumplo mi palabra.Escrito a los 75 años por mi, un viejo chiflado por el dibujo.
—Hokusai, artista japonés del siglo XIX, en el epílogo a Cien vistas del Fuji.
Existe algo purificador en toda buena caricatura. Puede desinflar la pomposidad, sin faltar al respeto. Si de Gaulle pudo sobrevivir a los asaltos que mil plumas lanzaron contra su nariz, y si Churchill triunfó sobre los dibujos en que aparecía como querubín arrugado, no tenemos por que exceptuar a los demás.Martin Lutero era caricaturista aficionado, y quizás este arte refleje una actitud protestante, una insistencia en la igualdad de todos los humanos, al margen de rangos o posiciones sociales. La misma exageracion de una caricatura produce un concepto definitivo de proporción, de cordura. Por eso, dejemos a los caricaturistas hacer de las suyas. En el fondo, la cara que nos produce risa no es de algún personaje célebre, sino la nuestra.
—Melvin Maddocks, en The Christian Science Monitor
Cualquiera que haya visto a los vencejos y a las golondrinas reunirse por septiembre en los alambres del teléfono y luego alzar el vuelo para emprender la gran migración hacia el sur, a la que muchos de ellos no sobrevivirán; cualquiera que haya visto ese espectáculo habrá presenciado la corriente que los une y los impele a la acción, sin pensamiento ni albedrío conscientes: habrá visto al ángel que condujo a la primera cruzada hasta Antioquía.
— R.A.
Nada encona tanto al corazón humano como la injusticia. Podemos tolerar la enfermedad; pero la injusticia despierta en nosotros el deseo de demoler las cosas.
—R.H.S.
Todo es cuestión de perspectiva: a veces, la desdicha no es más que un indicio de haber interpretado mal la vida.
—Henry de Monthetlant
Esperar hasta saber lo suficiente para poder obrar con cabal conocimiento significa condenarse a la inacción.
—Jean Rostand
Es mas dificil acostumbrarse a vivir solo que a envejecer. En uno y otro caso, sin embargo, sólo hay una manera de hacerlo: un día a la vez.
—B.J.W.