Publicado en
octubre 02, 2009
Cuando un neozelandés no trabaja o estudia, es común que practique algún deporte organizado o asista a alguna reunión. En Palmerston North, ciudad de 65.000 habitantes, existen 80 sociedades deportivas y 550 clubes diversos, entre ellos la Sociedad Vegetariana, el Club de Gemelos y Supergemelos, la Asociación Racionalista; la Sociedad de Órganos Caseros, el Club de Cambiadores de Cucharas y Estrategas Miniaturistas (antes Sociedad de Juegos de Guerra).
El escritor Gordon McLauchlan comenta: "Las reuniones organizadas forman parte de nuestras costumbres y asistir a ellas es cuestión de honor".
―B.N.
Si se ha anunciado peligro de tornados, la estación de televisión KARD de Wichita (en el estado norteamericano de Kansas) no se retira del aire. Al cerrar sus trasmisiones aconseja a los televidentes dejar sus aparatos a todo volumen antes de acostarse, y cierra la trasmisión de sonido. Durante la noche, los meteorólogos de la KARD consultan los boletines del Servicio Nacional de Meteorología, y cuando se detecta un tornado, lanzan fuertes voces de alarma a través de los televisores, hasta entonces callados. Aunque el sistema "Centinela antitornados" de la KARD constituye un despertador violento, es recibido con agradecimiento en una zona donde las tormentas llegan con tanta seguridad como la muerte o los impuestos.
—E.L.
¿Sawerkraut o choucroute con palillos chinos? Indudablemente, algo insólito. Sin embargo, por una de esas rarezas de la historia gastronómica, parece que la col fermentada se originó durante la construcción de la Gran Muralla china. En el verano los obreros se alimentaban de arroz y coles, y en el invierno agregaban vino de arroz para conservar la legumbre, que al fermentarse se convertía en col agria; sawerkraut para los alemanes o choucroute para los franceses.
Esta comida, que hemos considerado siempre como una especialidad germana, fue llevada de China a Europa por los alemanes, quienes modificaron el repollo encurtido fermentándolo con sal en lugar de vino de arroz.
—P.W.
El programa de la televisión norteamericana Laverne y Shirley fue un éxito en Tailandia, informa el productor ejecutivo Garry Marshall, pero fue preciso que los programadores de la televisión usaran toda su imaginación para vencer un obstáculo que parecía insalvable. "A los tailandeses no les gustan las mujeres de vocabulario fuerte", dice Marshall; "así que antes de salir en pantalla Laverne y Shirley, proyectaron una advertencia que decía: Estas dos muchachas son de un asilo de locas".
—People
Taxi se escribe exactamente igual en inglés, francés, español, danés, noruego, holandés, alemán, sueco y portugués.
—Créalo o no, por Ripley
Andy Smulian solía vestirse como un vago y oler a pescado podrido. Sin embargo, los hombres de negocios londinenses se disputaban sus servicios. Smulian, de 20 años, trabajaba para una agencia de cobros de Londres. Por la cantidad de 65 dólares se vestía con andrajos, se rociaba un hediondo compuesto químico y rondaba en torno de la oficina del designado cliente moroso. "En realidad", comenta Andy, "las recepcionistas eran quienes hacían la mayor parte de mi trabajo".
A menudo las oía amenazar al jefe: "Si no firma ese cheque pronto, puede ir buscando otra secretaria". En febrero de 1980 un juzgado londinense decidió que las actividades del maloliente Smulian eran delictuosas y quebrantaban la paz. El no estuvo de acuerdo. Pero no se le puede calificar de especialista; tiene sinusitis crónica y no percibe los olores.
—Newsweek
En Jamaica los topes en el pavimento para evitar el exceso de velocidad se llaman policías dormidos.
—P.L.
En Baden-Baden (Alemania Occidental) vive un hombre que odia a los automovilistas... y estos le corresponden. Asomado a la ventana y usando un telescopio, el individuo se dedica a descubrir autos que infraccionan. Gracias a esto la policía ha cobrado en ocho años varios miles de dólares en multas.
—M.G.