Publicado en
diciembre 06, 2016
Una terraza que reciba entre cuatro y ocho horas luz, y bien organizada, permite cultivos muy diversos.
Las hortalizas y plantas medicinales llenan el balcón de sabor, aroma y color.
Un un balcón o terraza, por pequeños que sean, puede aprovecharse de forma racional e inteligente hasta el más mínimo rincón. En función de las dimensiones y de la orientación solar, podemos plantearnos desde el cultivo de verduras y hortalizas, como lechugas, acelgas, cebollas o tomates –en las zonas mejor expuestas y soleadas–, hasta el de plantas aromáticas o para condimentar como el perejil, la albahaca, el apio o la hierbabuena. Incluso es posible combinar plantas medicinales con otras ornamentales que den vistosidad al balcón.
Una de las mayores complicaciones a las que nos enfrentamos a la hora de cultivar hortalizas en el balcón o en la terraza es la instalación de macetas, maceteros o mesas de cultivo, con su consiguiente sustrato y sistema de riego. Sin embargo, hoy en día, en el mercado podemos hallar la mayoría de los elementos necesarios para llevar a cabo esta tarea. Tampoco debemos sentirnos limitados por la falta de experiencia, ya que como reza el refrán popular, "haciendo y deshaciendo, se va aprendiendo". En cualquier caso, en internet encontraremos numerosos libros y blogs que nos orientarán paso a paso y con todo detalle sobre lo que debemos hacer. Con un mínimo de interés y dedicación, obtendremos un gran número de verduras que deleiten el paladar y nutran saludablemente el cuerpo, plantas medicinales que ayuden a aliviar ligeros trastornos de salud y plantas ornamentales que alegren nuestra lista y espíritu.
ELEMENTOS NECESARIOS
En primer lugar, debemos asegurarnos que nuestro balcón o nuestra terraza tiene una buena dosis de exposición solar.
ORIENTACIÓN. La mejor es mirando al sur o que permita recibir un mínimo de cuatro a ocho horas de luz directa al día. De esa manera las plantas podrán realizar la fotosíntesis y tener un buen desarrollo.
RECIPIENTES. Se puede escoger entre jardineras, macetas o mesas especiales de cultivo, teniendo en cuenta que las de cerámica retienen mejor la humedad que las de plástico. Es suficiente con una profundidad de 20 a 30 centímetros.
TIERRA Y SUSTRATOS. Los sustratos de cultivo preparados con compost (40%), turba de coco (40%) y perlita (20%) son más recomendables que la tierra, ya que pesan menos y retienen bien la humedad y los nutrientes.
PLANTAS. Podemos adquirir las plantitas en viveros o sembrarlas y trasplantarlas cuando tengan un buen porte. También se pueden conseguir sobres de semillas con certificación de cultivo ecológico.
RIEGO. Las macetas evaporan mucha agua y conviene regarlas a diario. Aparte de las regaderas, resulta muy práctico instalar un sistema de riego localizado con goteros y programador. Esto nos permitirá ausentarnos de casa durante largos periodos sin que nuestras plantas sufran por la falta de agua.
MANOS A LA OBRA
Los materiales para la realización del huerto en el balcón son sencillos de conseguir maderas, macetas, sustrato para cultivo o sistemas de riego por goteo son artículos muy comunes en cualquier tienda de jardinería. Además, si nos gusta el bricolaje, podemos disfrutar no sólo con su diseño y realización, sino también con el mantenimiento cotidiano.
Fuente: REVISTA INTEGRAL - MAYO 2008