NOTICIAS DEL MUNDO DE LA MEDICINA
Publicado en
julio 14, 2015
PARA ALIVIAR EL DOLOR INEVITABLE
PARA MITIGAR el dolor crónico que padece el gobernador George Wallace, que quedó inválido en un intento homicida, en mayo de 1972, un médico del Hospital de la Administración de Ex Combatientes de Miami le ha proporcionado un TNS (estimulador nervioso trascutáneo) fabricado por la compañía Medtronic, Inc.
Es el invento más reciente para el tratamiento electrónico del dolor —recurso muy prometedor para aliviar a muchas personas que padecen constantes dolores por trastornos en la columna vertebral y otras enfermedades. Es un aparato que está a prueba, con electrodos de tamaño variable. En el caso de Wallace, se adhiere un electrodo a la piel que cubre la columna vertebral por debajo de la cintura. El electrodo está conectado por alambres a un estimulador de pilas. Cuando el paciente tiene una punzada, hace girar un botón que envía, a la columna vertebral, una corriente eléctrica de muy bajo voltaje y bloquea así las vías de transmisión del dolor al cerebro.
La teoría en que se basa este aparato es la siguiente: los estímulos dolorosos viajan a lo largo de unasfibras sensoriales pequeñas; los impulsos como los del TNS van por otras mayores, llamadas fibras beta, y cierran una puerta hipotética hacia la columna vertebral. Con esto impiden que el mensaje del dolor llegue al cerebro. Aunque el aparato del TNS no se consigue aún en el comercio, desde 1971 casi 1600 norteamericanos empezaron a utilizar un aparato semejante llamado estimulador de la columna vertebral. El principio es el mismo, pero los electrodos se implantan con cirugía directamente en la columna vertebral.
—Newsweek
RECETA: AFECTO Y SOLICITUD
EN SU diaria relación con los pacientes, los médicos escuchan súplicas de afecto y cuidado solícito, apenas disfrazadas como síntomas de malestar físico. Pero pocos disponen del tiempo suficiente para prodigar al enfermo la atención que anhela. "La mayoría de los médicos están demasiado ocupados, con enfermos graves y salas de espera repletas", comenta el Dr. Robert Baumler en Physician's Management.
En vez del tiempo que no pueden dar, recetan píldoras que se convierten en símbolos de interés y afecto. "Si le decimos que no necesita medicamentos, el enfermo cree que no nos preocupamos por él", afirma el Dr. Baumler.
El médico puede diagnosticar esta necesidad de cariño del paciente como angustia y depresión, y recetar tranquilizantes o estimulantes. Algunos pacientes, sin embargo, consideran insultante este tratamiento. Exigen exámenes costosos y complicados. A menudo, para asegurarse una mayor atención, procuran que los hospitalicen. Una vez en la clínica, llaman con frecuencia a la enfermera —aunque sea para que les arregle la cama o las cortinas—como forma de que alguien les exprese afecto.
—Arthur Snider, en el Sun-Times Service del Daily News de Chicago
LA CAFEÍNA Y LA FIEBRE
A Los enfermos con fiebre producida por el catarro o la gripe se les suele recomendar que tomen aspirina y té caliente. ¿Es en realidad bueno este remedio tradicional ? Dos farmacólogos británicos, el Dr. Anthony Milton y Michael Dascombe, de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Londres, opinan lo contrario. La aspirina hace bajar la fiebre, pero la cafeína —estimulante contenido en el té, en el café y en algunas bebidas de cola parece que tiende a conservar alta la temperatura del cuerpo. Por tanto, las dos sustancias tienen efectos que se contrarrestan.
Los investigadores hicieron sus observaciones iniciales en animales de laboratorio, inyectando a algunos una endotoxina (sustancia producida por bacterias que provoca fiebre) y a otros una combinación de endotoxina y cafeína. A los que recibieron esta última les subió la fiebre más que a los primeros. Después, los investigadores probaron en los animales una combinación de aspirina y cafeína, y la temperatura no bajó. Un estudio posterior que se llevó a cabo con voluntarios confirmó el resultado del experimento realizado en animales. Cuando se administró a 35 estudiantes una vacuna antitifoidea que produce una infección leve y fiebre, los que tomaron cafeína tuvieron temperaturas más altas que los otros.
Los médicos todavía no saben por qué la cafeína eleva la fiebre o bloquea las propiedades antipiréticas de la aspirina. Sin embargo, aunque se necesitan más estudios complementarios, por ahora dan un sencillo consejo: los enfermos con fiebre deben evitar el té, el café y los medicamentos que contengan cafeína. Para tomar la aspirina, bébase agua simple.
—Time