MIGRAÑA: MÁS QUE UN DOLOR DE CABEZA
Publicado en
julio 27, 2015
Una jaqueca mal tratada puede durar días, inhabilitando totalmente a su víctima. Este mal no tiene cura, pero puede controlarse incluso antes de que ataque.
Por Lola Alvear.
No soporta ni siquiera la luz natural del día. No tolera el ruido de la televisión o que le hablen; en suma, ningún sonido. Ha perdido el apetito, pues se siente demasiado mareada para comer o para pararse. Otro día más pasará acostada en su habitación con las cortinas cerradas hasta que se le vaya ese horrible dolor de cabeza, que la medicina de uso común no puede aplacar. Estamos ante un episodio de migraña, enfermedad que ataca más al sexo femenino que al masculino. Se calcula que por cada hombre víctima de esta dolencia, hay alrededor de 4 mujeres que la padecen. María Fernanda Muñoz, una sicóloga de 57 años, es una de ellas: "Hace más de 30 años que sufro de migraña... En ocasiones una vez instalado el dolor no es posible moverse. Latidos o punzadas dolorosas hacen que hasta el hecho de mantener la cabeza en la almohada represente un martirio...".
La jaqueca, como también se denomina a este agudo dolor de cabeza, viene acompañada de fobia a la luz, irritación ocular, fobia al ruido, náuseas, vómitos, tensión muscular en el cuello, entre otros malestares. De ahí que inhabilita completamente a quien la padece. En el mundo, la migraña es una de las primeras causas de ausentismo laboral; por ejemplo: en los Estados Unidos ocasiona pérdidas productivas por 20 millones de dólares al año.
LA PESADILLA DEL DOLOR
Aún no se determina la causa exacta de esta enfermedad. Las investigaciones sugieren que afecta a más mujeres que hombres debido a sus cambios hormonales. "Una de las jaquecas más difíciles de tratar es la migraña menstrual, que se da entre 2 días antes y 3 días después del periodo. Mucho de eso tiene que ver con los niveles estrogénicos...", explica el neurólogo Carlos Noboa. Así también se señala a las píldoras anticonceptivas como unas de las culpables de los ataques de migraña por su alto contenido en estrógenos. Otros factores desencadenantes en personas propensas son: el estrés, el cigarrillo, el alcohol, la cafeína y saltarse las comidas.
No se sabe a ciencia cierta qué pasa al interior de la cabeza, cuando empieza un episodio de jaqueca. "El cerebro no duele. Lo que duele es el cuero cabelludo con su rica inervación y sus vasos sanguíneos. Duele la dura madre (membrana que rodea el cerebro y la médula espinal), las arterias y las venas cerebrales...", aclara el doctor Noboa.
La migraña, cuyo dolor no siempre toma un punto específico, tiene dos formas comunes. Aquella con aura o aviso visual, pues empieza con un periodo de 10 a 20 minutos en el que se pueden ver luces a manera de círculos y es seguido por la cefalea, que por lo general ataca una mitad de la cabeza (hemicraneal). La otra clase de jaqueca no tiene aviso y puede presentarse en el área del ojo y la frente, en la parte de atrás, ser hemicraneal o tomar toda la cabeza.
"OTRO DIA MAS SIN JAQUECA"
María Fernanda Muñoz, en búsqueda de un tratamiento que le calme esta dolencia, ha probado de todo: medicina tradicional, homeopatía, digitopuntura, en fin. "Hace dos años seguí una terapia de acupuntura con agujas y láser que me mantiene bien durante 4 ó 6 meses...", dice. La medicina tradicional contempla dos clases de tratamiento. Uno es el abortivo; es decir, aquel para aliviar el dolor cuando ya comenzó: "Lo más nuevo en esto son los triptanos", señala el neurólogo Carlos Noboa. Son los mejores, pero también son los más caros. Por eso, los pacientes suelen pedir una segunda alternativa para quitar la jaqueca y así llegan al rescate los antiinflamatorios.
"La medicación no siempre controla el dolor. Y como uno solo piensa en aliviarse, se abusa de los remedios", cuenta María Fernanda Muñoz. La sobremedicación es el mayor pecado de quienes padecen de migraña: "Los analgésicos mal utilizados pueden clonificar el dolor y convertirlo en cefalea crónica diaria", advierte este neurólogo. Pero por qué sufrir el dolor cuando se lo puede prevenir. Aquí entra en escena el tratamiento preventivo, en el que se usan los betabloqueadores. "El rey de estos es el propanoloide porque es un producto barato. No lo puede utilizar el asmático bronquial, el que tiene insuficiencia cardiaca congestiva o un bloqueo en la conducción del corazón, pero normalmente las mujeres jóvenes no tienen estos problemas...", indica el doctor Noboa.
La migraña no puede curarse del todo, pero sí, controlarse. Lo mejor es hacerlo con medicamentos preventivos y la adopción de ciertos hábitos de vida. Después de todo, no importa el sacrificio cuando la recompensa será irse a dormir diciendo: "¡Qué bien! Otro día más sin jaqueca".
PREVENGA LA JAQUECA
A más del consumo de medicinas, se puede prevenir la migraña modificando los siguientes hábitos de vida. El médico clínico Carlos Nácer indica cuáles son:
● Evitar cigarrillos, cafeína y alcohol.
● Hacer ejercicios con regularidad.
● Practicar relajación muscular progresiva y meditación.
● Dormir adecuadamente todas las noches.
Si ya empezó el dolor:
● Colocar un paño frío sobre la cabeza.
● Descansar en una habitación silenciosa y oscura.
● Tomar mucho líquido para evitar deshidratación, sobre todo cuando se ha vomitado.
ASESORIA:
Dr Carlos Noboa Bejarano, neurólogo, TELF: 2293554.
Dr. Carlos Nácer Chavarría, clínico, TELF: 2295490; Guayaquil.
Fuente:
Revista HOGAR, Julio 2004