MITOS SEXUALES: MENTIRAS QUE PERJUDICAN
Publicado en
septiembre 21, 2014
Los mitos pueden perjudicar a la pareja y ser un impedimento para el disfrute sexual.
Exageraciones y medias verdades en torno al sexo, producto de la ignorancia, pueden afectar seriamente la vida íntima de una persona.
Si hay algo dañino para una persona, son los rumores sin razón y "lo que todo el mundo dice". Asimismo lo son los mitos que rodean al sexo. Este, lamentablemente, está plagado de ellos, en su mayoría basados en la ignorancia.
"Los mitos pueden perjudicar a la pareja y ser un impedimento para el disfrute sexual", asegura la doctora Consuelo Camacho de Zambrano, psiquiatra y terapista familiar. Muchas personas se ven seriamente afectadas y con grandes temores frente a la sexualidad por lo que escuchan y les dicen, experimentando ansiedad, inseguridad y miedo, los cuales solo se superan con la práctica sexual y una correcta información.
La mejor manera de enfrentarlos es erradicándolos e "informándonos de buenas fuentes", dice la doctora Camacho, quien advierte que muchas personas se dejan impresionar por cierta información publicada, especialmente en Internet, que carece de toda base científica.
Mito: La sexualidad es instintiva.
Realidad: Una persona va aprendiendo poco a poco sobre su sexualidad, al igual que de sus otras partes del cuerpo. "El buen amante no nace, se hace", señala la doctora Camacho.
Mito: Sin una buena figura no se puede disfrutar del sexo.
Realidad: El físico no determina la calidad de una relación, pero es necesario cuidarse y mantenerse para sentirse bien y proyectarlo.
Mito: El deber de la mujer es satisfacer siempre al hombre.
Realidad: Debe haber una armonía entre ambos, la mujer debe preocuparse de su propio placer para no sentirse frustrada e insatisfecha. Debe descubrir su propia capacidad erógena para acoplarse mejor a su pareja.
Mito: La pareja debe tener el orgasmo al mismo tiempo.
Realidad: La sincronía sexual es difícil de alcanzar porque el hombre se excita y alcanza el orgasmo más rápido y la mujer necesita de más tiempo. Además, por ser multiorgásmica, su aspiración no es "culminar" al mismo tiempo que su pareja, sino tener varios orgasmos en la misma relación.
Mito: El sexo oral es sucio y propio de ninfómanas y prostitutas.
Realidad: El sexo oral es una práctica que puede ser satisfactoria si ambos están de acuerdo. Produce gran placer y si hay aseo normal de los genitales, esta zona es incluso más limpia que la boca donde hay cientos de bacterias.
Mito: Tragar semen es malo.
Realidad: No es ni perjudicial ni beneficioso, pero la mujer debe quererlo así y no ser obligada.
Mito: Los problemas conyugales se solucionan en la cama.
Realidad: Lo único que hace es postergar su solución y produce resentimientos que se quedan guardados. Como consecuencia, esto hace que luego se eviten las relaciones íntimas como señal de protesta.
Mito: Las mujeres histerectomizadas (sin útero) pierden su capacidad erótica.
Realidad: La función del útero es solo reproductiva. Si son los ovarios, podrían haber problemas hormonales y de respuesta sexual, pero se soluciona con terapias de restitución hormonal.
Mito: Las mujeres no experimentan orgasmo nocturno.
Realidad: Mientras la mujer esté lo suficientemente excitada, el orgasmo puede ser a cualquier hora.
Mito: Aquellos que se abstienen del sexo gozan de mejor salud.
Realidad: La actividad física que implica una relación sexual quema calorías, mejora el tono muscular y mantiene de mejor ánimo a las personas.
Mito: El tamaño del pene puede calcularse por el tamaño de manos y pies. Los hombres musculosos tienen el pene más grande y son mejores amantes.
Realidad: No hay razón alguna para esas afirmaciones, es algo independiente.
Mito: El coito debe evitarse durante el embarazo.
Realidad: A no ser que el médico sugiera lo contrario, durante la gestación el sexo no es malo ni afecta la salud del bebé.
Mito: El alcohol es estimulante sexual. La marihuana es afrodisíaca.
Realidad: Está demostrado que ambos producen impotencia y otros daños.
Mito: El sexo anal indica inclinaciones homosexuales.
Realidad: Es una práctica que puede resultar satisfactoria para la pareja si ambos están de acuerdo. Es mejor usar un lubricante y un preservativo.
Mito: La masturbación frecuente conduce a la locura.
Realidad: Pertenece a una etapa de descubrimiento del individuo de sus partes eróticas. No es peligroso mientras no se quede estancado en ello y la vida no gire en torno a esto.
Mito: El coito durante los días de menstruación es prohibido.
Realidad: No existe ningún problema y es cuestión de que la pareja se sienta cómoda. La mujer podría utilizar un tampón para absorber la sangre, momentos antes de la relación.
Fuente:
Revista HOGAR, Septiembre 2001