Publicado en
septiembre 26, 2010
El periódico frances "Le magazine des voyages de pêche" en su 56ava edición, publicó un asombroso reportaje: Una maravillosa historia de amor.
Arnold Pointer un pescador profesional del sur de Australia cuenta cómo salvó de la muerte segura a un gran tiburón blanco hembra cuando quedó prácticamente enredado en sus redes de pesca. Ahora el pescador tiene un problema: Él dice: “Desde hace dos años, no ando solo. Ella me sigue a todos lados cuando estoy en el mar, y su presencia ahuyenta a los demás peces. Yo no sé ya qué hacer para que no me siga más". Es difícil deshacerse de un tibirón de 17 pies de largo, cuando los tiburones blancos son una especie protegida para su conservación, pero un afecto mutuo se ha establecido entre Arnold y “Cindy”. Arnold dice: “Cuando paro el bote ella viene a mí, da vuelta sobre su costado y me permite acariciarla, ella emite gruñidos, entorna los ojos, y mueve sus aletas de felicidad...”INCREIBLE!!!
Un tiburón, un hombre, y un agradecimiento de corazón por !SALVAR UNA VIDA!Los seres humanos tenemos aún mucho qué aprender de los animales y de la naturaleza.