FENG SHUI PARA CREAR HOGAR
Publicado en
diciembre 23, 2015
Por Manuel Núñez y Claudina Navarro.
El entorno en que vivimos no puede dejarse al azar. Intuimos que deben existir unas leyes naturales para crear espacios habitables. El milenario arte del feng shui es el resultado de la búsqueda de esas leyes. A través de la observación meticulosa de los paisajes naturales, los antiguos chinos hicieron descubrimientos cada vez más sutiles de tipo filosófico y práctico. Llegaron a identificar cómo se comportaban las energías que les rodeaban y cómo influían sobre las personas. Descubrieron que todos los seres vivos, la Tierra y el universo se relacionan por medio de una energía cósmica vital, el chi. Dedujeron que la dinámica del chi es similar a la de una corriente de agua o una corriente de viento. Este chi es la misma energía que recorre el cuerpo y cuyos bloqueos están relacionados con los estados de salud y enfermedad. Cuando el chi circula correctamente, los principios yin y yang se equilibran. Por eso, a veces se definen los consejos de feng shui como la acupuntura de los edificios. Por otra parre, el feng shui tiene en cuenta la necesidad humana de sentirse protegido.
Existen diferentes tendencias dentro del feng shui. La más antigua, la escuela de la forma, se corresponde con los sencillos principios que hemos explicado y está vinculada sobre todo al estudio del terreno geográfico para elegir el emplazamiento más idóneo. La escuela de la brújula ofrece soluciones para cada espacio de la casa, teniendo en cuenta su orientación respecto a los puntos cardinales y datos astrológicos. Una tercera escuela, la del bonete negro, que se ha implantado en las últimas décadas desde California, brinda multitud de remedios (abanicos, espejos, móviles de viento, fórmulas numerológicas...) para reforzar diferentes aspectos de la vida, desde las emociones a los negocios.
Los consejos de este taller están esencialmente basados en las escuelas de la forma y de la brújula. No obstante, las recomendaciones bonete negro son interesantes para los complementos decorativos y también se han incluido.
ENTRADA Y RECIBIDOR
Conviene que sea un espacio alegre, amplio y bien iluminado, que resulte acogedor tanto para uno mismo como para los invitados. La luz más adecuada es la de tipo matizado y cálido.
La costumbre de colocar un espejo sintoniza a la perfección con el feng shui, porque abre e ilumina la entrada. Sin embargo, no es conveniente que quede enfrentado a la puerta, pues reflejaría hacia fuera el chi.
LA SALA DE ESTAR
El lugar más público de la casa debe contar con abundante luz, por eso es conveniente que las ventanas estén orientadas hacia el sur.
Están más indicadas las lámparas de pie o de mesa que la iluminación superior.
En esta habitación, es muy importante la adecuada disposición de los asientos. No debemos sentarnos de espaldas a las puertas o las ventanas. Es preferible apoyar los respaldos en una pared.
Además es conveniente crear un ambiente agradable con detalles mínimos, como cojines en los asientos, plantas y fuentes de luz matizada.
Un buen color para las paredes de la sala de estar es el verde claro.
EL COMEDOR
Es fundamental que no haya demasiados muebles, ya que estos pueden distraer de lo que ocurre en la mesa.
La mejor forma para la mesa es la redonda u octogonal. Aparte de ella, con las sillas, una o varias plantas y un aparador será suficiente para completar la decoración.
Se pueden adornar las paredes con ilustraciones y pinturas de tema paisajístico.También tiene cabida un espejo que contribuya a ampliar el espacio.
ESTUDIO
La habitación que quede lo más alejada de la entrada será la mejor para convertirse en despacho, ya que el lugar favorecerá la concentración.
Hay que situar el escritorio en una posición dominante, por ejemplo, cerrando una esquina desde la que se pueda ver la puerta de entrada. El asiento nunca debe estar en medio de una corriente entre la puerta y la ventana.
Las plantas y las flores ayudan armonizar la habitación de trabajo. Con preferencia elegiremos los colores amarillo y rojo para las paredes.
LA COCINA
Sería conveniente que el fogón estuviera dispuesto de tal forma que quien cocine no quede de espaldas a la puerta. Los fuegos no deben estar bajo la ventana ni cerca de los grifos de agua.
El predominio del metal en la cocina debe compensarse con la presencia de objetos de madera.
Los colores más indicados son el amarillo, el blanco y los terrosos.
EL CUARTO DE BAÑO
Debe ser un espacio que goce de una buena ventilación, con las paredes de color claro y sin demasiados objetos para que el chi circule con fluidez.
Conviene aportar elementos que mejoren el feng shui, con algunos adornos de color intenso o velas, que aportan el elemento fuego.
Es preciso que la tapa del WC y los desagües estén cerrados.
A poder ser, el espejo no debe reflejar la puerta de entrada, ni la ventana, para que no rechace la energía que entra.
LOS DORMITORIOS
El lugar más conveniente para descansar es una habitación alejada de la entrada de la casa.
La ubicación de la cama es fundamental: los pies nunca deben estar en línea con la puerta. Lo ideal es que la cama esté en diagonal con respecto a la entrada. El cabecero debe estar apoyado contra una pared sólida. No conviene ubicarlo bajo una ventana. Mientras que en Europa se cree que la cabeza debe estar orientada hacia el norte, el feng shui también recomienda la dirección este.
El techo debe ofrecer una superficie lisa, sin objetos colgantes ni vigas.
En cuanto al color de las paredes, resultan idóneos los tonos suaves como el beige, el melocotón claro y el rosa púrpura pálidos.
LOS PRINCIPIOS BASICOS
BA GUA. Es una figura octogonal donde cada lado representa una dirección geográfica que rige un aspecto fundamental de la vida. Para utilizarla hay que hacer un plano de la casa y, con la ayuda de una brújula, marcar el norte. Sobre el plano se superpone el ba gua, haciendo coincidir los puntos cardinales. Entonces se puede ver qué conceptos, colores y materiales potencian cada aspecto y cuál es el lugar más indicado en la casa para cada uno.
MOVIMIENTO DEL CHI. El chi se mueve en espiral o sinuosamente, como un río. Hay que evitar que circule en linea recta desde una entrada a una salida. La solución es colocar biombos y muebles de manera que pueda rodearlos, con lo cual llega a todos los rincones de la casa en su forma beneficiosa. También hay que evitar la acumulación de objetos innecesarios que "enredan" el chi.
LOS CINCO ELEMENTOS. Para crear un buen feng shui o corregir el malo, hay que equilibrar los elementos (agua, tierra, fuego, metal y madera). Para favorecer que en nuestra casa o en la oficina los elementos interactúen de forma positiva, se puede tener en cuenta que cada uno se asocia preferentemente con determinadas posiciones espaciales y ciertas actividades, tal como se aprecia en el ba gua.
SEPARACION DE ESPACIOS. Las habitaciones con diferentes funciones deben poseer atmósferas distintas. Las personas que trabajan en casa deben separar claramente los espacios de trabajo, ocio y vida familiar.
Fuente:
REVISTA INTEGRAL - ABRIL 2009