LA SEXUALIDAD DESPUÉS DE LOS 50: MEJOR QUE NUNCA
Publicado en
octubre 11, 2009
Por sorprendente que parezca, lo mejor viene con la edad.
Por Georgia Witkin.
¿Le parece increíble el hecho de que unas tres cuartas partes de la gente de edad avanzada sigue activa en el aspecto sexual? ¿O que una de cada seis personas se va interesando más y más en las relaciones eróticas al pasar los años? Siendo esto cierto, ¿por qué tanta gente se preocupa por su sexualidad en la vejez? La razón es que mucho de lo que creemos al respecto es totalmente falso.
El secreto para evitar que el tiempo menoscabe nuestra sexualidad consiste en conocer las siguientes verdades:
1. La mayoría de las parejas que llevan mucho tiempo de casadas no caen en el aburrimiento. Durante los años en que el trabajo y los hijos son prioritarios, las parejas a menudo se hastían de su relación íntima. Pero según ciertos estudios, la frecuencia de los coitos y la satisfacción que se obtiene en ellos vuelven a aumentar cuando hay más tiempo para la intimidad, una vez que los hijos han dejado el hogar. En el Informe Janus sobre la conducta sexual, los doctores Samuel y Cynthia Janus afirman que la frecuencia con que los hombres tienen relaciones sexuales alcanza su máximo entre los 51 y los 64 años de edad, y que las mujeres son más activas después de cumplir 65 años que entre los 40 y los 60. Tratándose de sexualidad, la familiaridad favorece el placer.
2. La capacidad sexual de los hombres no disminuye en todos los aspectos después de alcanzar su punto máximo en la adolescencia. Si el objetivo es la satisfacción, y no eyaculaciones rápidas, puede decirse que la vida amorosa se va intensificando con el tiempo. La necesidad innata de eyacular que tienen los hombres no disminuye notablemente sino hasta cerca de los 50 años. Y cuando esto sucede, la satisfacción se vuelve más accesible, pues al varón se le facilita prolongar el coito y concentrarse en obtener placer, procurárselo a su pareja y darle más tiempo para alcanzar el orgasmo. Además, como con los años él requiere una mayor estimulación táctil y tarda más en excitarse, la mujer se siente más necesaria.
3. La mayoría de las mujeres no pierden interés en las relaciones sexuales después de la menopausia. Algunas que no tienen pareja reprimen su libido. De ahí el mito, según el doctor Raúl Schiavi, de que a las de más edad no les atrae lo erótico. En ciertos estudios sobre conducta sexual se ha observado que las mujeres que tienen pareja copulan con más frecuencia después de los 65 años, edad en que se sienten más confiadas para expresar sus deseos y para tomar la iniciativa, lo cual resulta liberador también para los hombres. Un cambio físico que sí puede mermar la espontaneidad sexual después de la menopausia es la disminución de la lubricación vaginal, pero un lubricante soluble en agua es suficiente para remediarlo.
4. La mayoría de las mujeres de edad no pierden la capacidad de alcanzar el orgasmo. El paso del tiempo no tiene efecto alguno en dicha capacidad, ni siquiera en la de experimentar orgasmos múltiples. Algunas mujeres descubren que, al reducirse su concentración de estrógenos, aumenta la facilidad con que llegan al climax.
Sin embargo, las enfermedades, el dolor, algunos medicamentos, la pérdida de la pareja y el estrés pueden interferir. Por tanto, si una mujer nota que su capacidad de respuesta a la estimulación sexual se debilita, debe consultar con su médico.
5. La actividad sexual en la tercera edad es saludable. Una cópula equivale a una sesión de ejercicio ligero. Además, el acto sexual reporta beneficios psicológicos: ayuda a prevenir la depresión, aumenta la autoestima, contrarresta el estrés y refuerza la decisión de controlar el peso.
6. Es poco probable que el coito provoque un infarto. Menos de uno por ciento de las muertes por ataque cardiaco sobrevienen durante la cópula, y 70 por ciento de esa fracción ocurren en relaciones extramaritales. Eso afirman el doctor Robert Butler, ex director del Instituto Nacional de la Tercera Edad, de Estados Unidos, y Myrna Lewis, ambos autores del libro Sex After Sixty ("La actividad sexual después de los sesenta"). Un estudio en el que participaron más de 1600 personas reveló que el riesgo de sufrir un infarto como consecuencia de las relaciones sexuales es parecido al de sufrirlo por levantarse de la cama en la mañana.
Así pues, si usted se encuentra en el grupo constituido por más de 30 por ciento de los hombres que han sobrevivido a un ataque cardiaco y evitan la actividad sexual por temor, consulte con su médico para que le dé luz verde... ¡y adelante!
7. Los problemas de erección no son inevitables, y cuando se presentan hay maneras de enfrentarlos. Entre 15 y 25 por ciento de los varones mayores de 65 años sufren una impotencia tan severa que el coito les resulta imposible. Se cree que en la mayoría de esos casos el problema tiene causas fisiológicas, como por ejemplo los efectos secundarios de algunos medicamentos (entre otros, los antihipertensores), y enfermedades como la diabetes, las cardiopatías, la hipertensión, la esclerosis múltiple, las alteraciones vasculares y ciertos cambios neurológicos. Por consiguiente, si tiene usted esas dificultades, visite a su médico. Y recuerde que no es necesaria una erección completa. Con estimulación mental y física, un hombre puede experimentar un orgasmo sin erección.
8. Su futuro en el aspecto sexual está en sus manos... sea cual sea la edad que tenga. Los investigadores han descubierto que, si una persona se mantiene sexualmente activa, ayuda a retardar el proceso de envejecimiento.
ASÍ PUES, vea los efectos del tiempo como excelentes oportunidades, y no como pérdidas. Cuando el finado juez de la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos Oliver Wendell Holmes pasaba de los 90 años, suspiraba: "¡Si tuviera otra vez 70 años!"
© 1994 POR GEORGIA WITKIN. CONDENSADO DE "PARADE" (20-III-1994), DE NUEVA YORK.