• 10
  • COPIAR-MOVER-ELIMINAR POR SELECCIÓN

  • Copiar Mover Eliminar


    Elegir Bloque de Imágenes

    Desde Hasta
  • GUARDAR IMAGEN


  • Guardar por Imagen

    Guardar todas las Imágenes

    Guardar por Selección

    Fijar "Guardar Imágenes"


  • Banco 1
    Banco 2
    Banco 3
    Banco 4
    Banco 5
    Banco 6
    Banco 7
    Banco 8
    Banco 9
    Banco 10
    Banco 11
    Banco 12
    Banco 13
    Banco 14
    Banco 15
    Banco 16
    Banco 17
    Banco 18
    Banco 19
    Banco 20
    Banco 21
    Banco 22
    Banco 23
    Banco 24
    Banco 25
    Banco 26
    Banco 27
    Banco 28
    Banco 29
    Banco 30
    Banco 31
    Banco 32
    Banco 33
    Banco 34
    Banco 35

  • COPIAR-MOVER IMAGEN

  • Copiar Mover

  • Transición (aprox.)

  • T 1 (1 seg)


    T 2 (3 seg)


    T 3 (5 seg)


    T 4 (s) (8 seg)


    T 5 (10 seg)


    T 6 (15 seg)


    T 7 (20 seg)


    T 8 (30 seg)


    T 9 (40 seg)


    T 10 (50 seg)

    ---------------------

    T 11 (1 min)


    T 12 (5 min)


    T 13 (10 min)


    T 14 (15 min)


    T 15 (20 min)


    T 16 (30 min)


    T 17 (45 min)

    ---------------------

    T 18 (1 hor)


  • Efecto de Cambio

  • SELECCIONADOS


    OPCIONES

    Todos los efectos


    Elegir Efectos


    Desactivar Elegir Efectos


    Borrar Selección


    EFECTOS

    Bounce


    Bounce In


    Bounce In Left


    Bounce In Right


    Fade In (estándar)


    Fade In Down


    Fade In Up


    Fade In Left


    Fade In Right


    Flash


    Flip


    Flip In X


    Flip In Y


    Heart Beat


    Jack In The box


    Jello


    Light Speed In


    Pulse


    Roll In


    Rotate In


    Rotate In Down Left


    Rotate In Down Right


    Rotate In Up Left


    Rotate In Up Right


    Rubber Band


    Shake


    Slide In Up


    Slide In Down


    Slide In Left


    Slide In Right


    Swing


    Tada


    Wobble


    Zoom In


    Zoom In Down


    Zoom In Up


    Zoom In Left


    Zoom In Right


  • OTRAS OPCIONES
  • ▪ Eliminar Lecturas
  • ▪ Ventana de Música
  • ▪ Zoom del Blog:
  • ▪ Última Lectura
  • ▪ Manual del Blog
  • ▪ Resolución:
  • ▪ Listas, actualizado en
  • ▪ Limpiar Variables
  • ▪ Imágenes por Categoría
  • PUNTO A GUARDAR



  • Tipea en el recuadro blanco alguna referencia, o, déjalo en blanco y da click en "Referencia"
  • CATEGORÍAS
  • ▪ Libros
  • ▪ Relatos
  • ▪ Arte-Gráficos
  • ▪ Bellezas del Cine y Televisión
  • ▪ Biografías
  • ▪ Chistes que Llegan a mi Email
  • ▪ Consejos Sanos Para el Alma
  • ▪ Cuidando y Encaminando a los Hijos
  • ▪ Datos Interesante. Vale la pena Saber
  • ▪ Fotos: Paisajes y Temas Varios
  • ▪ Historias de Miedo
  • ▪ La Relación de Pareja
  • ▪ La Tía Eulogia
  • ▪ La Vida se ha Convertido en un Lucro
  • ▪ Leyendas Urbanas
  • ▪ Mensajes Para Reflexionar
  • ▪ Personajes de Disney
  • ▪ Salud y Prevención
  • ▪ Sucesos y Proezas que Conmueven
  • ▪ Temas Varios
  • ▪ Tu Relación Contigo Mismo y el Mundo
  • ▪ Un Mundo Inseguro
  • REVISTAS DINERS
  • ▪ Diners-Agosto 1989
  • ▪ Diners-Mayo 1993
  • ▪ Diners-Septiembre 1993
  • ▪ Diners-Noviembre 1993
  • ▪ Diners-Diciembre 1993
  • ▪ Diners-Abril 1994
  • ▪ Diners-Mayo 1994
  • ▪ Diners-Junio 1994
  • ▪ Diners-Julio 1994
  • ▪ Diners-Octubre 1994
  • ▪ Diners-Enero 1995
  • ▪ Diners-Marzo 1995
  • ▪ Diners-Junio 1995
  • ▪ Diners-Septiembre 1995
  • ▪ Diners-Febrero 1996
  • ▪ Diners-Julio 1996
  • ▪ Diners-Septiembre 1996
  • ▪ Diners-Febrero 1998
  • ▪ Diners-Abril 1998
  • ▪ Diners-Mayo 1998
  • ▪ Diners-Octubre 1998
  • ▪ Diners-Temas Rescatados
  • REVISTAS SELECCIONES
  • ▪ Selecciones-Enero 1965
  • ▪ Selecciones-Agosto 1965
  • ▪ Selecciones-Julio 1968
  • ▪ Selecciones-Abril 1969
  • ▪ Selecciones-Febrero 1970
  • ▪ Selecciones-Marzo 1970
  • ▪ Selecciones-Mayo 1970
  • ▪ Selecciones-Marzo 1972
  • ▪ Selecciones-Mayo 1973
  • ▪ Selecciones-Junio 1973
  • ▪ Selecciones-Julio 1973
  • ▪ Selecciones-Diciembre 1973
  • ▪ Selecciones-Enero 1974
  • ▪ Selecciones-Marzo 1974
  • ▪ Selecciones-Mayo 1974
  • ▪ Selecciones-Julio 1974
  • ▪ Selecciones-Septiembre 1974
  • ▪ Selecciones-Marzo 1975
  • ▪ Selecciones-Junio 1975
  • ▪ Selecciones-Noviembre 1975
  • ▪ Selecciones-Marzo 1976
  • ▪ Selecciones-Mayo 1976
  • ▪ Selecciones-Noviembre 1976
  • ▪ Selecciones-Enero 1977
  • ▪ Selecciones-Febrero 1977
  • ▪ Selecciones-Mayo 1977
  • ▪ Selecciones-Septiembre 1977
  • ▪ Selecciones-Octubre 1977
  • ▪ Selecciones-Enero 1978
  • ▪ Selecciones-Octubre 1978
  • ▪ Selecciones-Diciembre 1978
  • ▪ Selecciones-Enero 1979
  • ▪ Selecciones-Marzo 1979
  • ▪ Selecciones-Julio 1979
  • ▪ Selecciones-Agosto 1979
  • ▪ Selecciones-Octubre 1979
  • ▪ Selecciones-Abril 1980
  • ▪ Selecciones-Agosto 1980
  • ▪ Selecciones-Septiembre 1980
  • ▪ Selecciones-Diciembre 1980
  • ▪ Selecciones-Febrero 1981
  • ▪ Selecciones-Septiembre 1981
  • ▪ Selecciones-Abril 1982
  • ▪ Selecciones-Mayo 1983
  • ▪ Selecciones-Julio 1984
  • ▪ Selecciones-Junio 1985
  • ▪ Selecciones-Septiembre 1987
  • ▪ Selecciones-Abril 1988
  • ▪ Selecciones-Febrero 1989
  • ▪ Selecciones-Abril 1989
  • ▪ Selecciones-Marzo 1990
  • ▪ Selecciones-Abril 1991
  • ▪ Selecciones-Mayo 1991
  • ▪ Selecciones-Octubre 1991
  • ▪ Selecciones-Diciembre 1991
  • ▪ Selecciones-Febrero 1992
  • ▪ Selecciones-Junio 1992
  • ▪ Selecciones-Septiembre 1992
  • ▪ Selecciones-Febrero 1994
  • ▪ Selecciones-Mayo 1994
  • ▪ Selecciones-Abril 1995
  • ▪ Selecciones-Mayo 1995
  • ▪ Selecciones-Septiembre 1995
  • ▪ Selecciones-Diciembre 1995
  • ▪ Selecciones-Junio 1996
  • ▪ Selecciones-Mayo 1997
  • ▪ Selecciones-Enero 1998
  • ▪ Selecciones-Febrero 1998
  • ▪ Selecciones-Julio 1999
  • ▪ Selecciones-Diciembre 1999
  • ▪ Selecciones-Febrero 2000
  • ▪ Selecciones-Diciembre 2001
  • ▪ Selecciones-Febrero 2002
  • ▪ Selecciones-Mayo 2005
  • CATEGORIAS
  • Arte-Gráficos
  • Bellezas
  • Biografías
  • Chistes que llegan a mi Email
  • Consejos Sanos para el Alma
  • Cuidando y Encaminando a los Hijos
  • Datos Interesantes
  • Fotos: Paisajes y Temas varios
  • Historias de Miedo
  • La Relación de Pareja
  • La Tía Eulogia
  • La Vida se ha convertido en un Lucro
  • Leyendas Urbanas
  • Mensajes para Reflexionar
  • Personajes Disney
  • Salud y Prevención
  • Sucesos y Proezas que conmueven
  • Temas Varios
  • Tu Relación Contigo mismo y el Mundo
  • Un Mundo Inseguro
  • TODAS LAS REVISTAS
  • Selecciones
  • Diners
  • REVISTAS DINERS
  • Diners-Agosto 1989
  • Diners-Mayo 1993
  • Diners-Septiembre 1993
  • Diners-Noviembre 1993
  • Diners-Diciembre 1993
  • Diners-Abril 1994
  • Diners-Mayo 1994
  • Diners-Junio 1994
  • Diners-Julio 1994
  • Diners-Octubre 1994
  • Diners-Enero 1995
  • Diners-Marzo 1995
  • Diners-Junio 1995
  • Diners-Septiembre 1995
  • Diners-Febrero 1996
  • Diners-Julio 1996
  • Diners-Septiembre 1996
  • Diners-Febrero 1998
  • Diners-Abril 1998
  • Diners-Mayo 1998
  • Diners-Octubre 1998
  • Diners-Temas Rescatados
  • REVISTAS SELECCIONES
  • Selecciones-Enero 1965
  • Selecciones-Agosto 1965
  • Selecciones-Julio 1968
  • Selecciones-Abril 1969
  • Selecciones-Febrero 1970
  • Selecciones-Marzo 1970
  • Selecciones-Mayo 1970
  • Selecciones-Marzo 1972
  • Selecciones-Mayo 1973
  • Selecciones-Junio 1973
  • Selecciones-Julio 1973
  • Selecciones-Diciembre 1973
  • Selecciones-Enero 1974
  • Selecciones-Marzo 1974
  • Selecciones-Mayo 1974
  • Selecciones-Julio 1974
  • Selecciones-Septiembre 1974
  • Selecciones-Marzo 1975
  • Selecciones-Junio 1975
  • Selecciones-Noviembre 1975
  • Selecciones-Marzo 1976
  • Selecciones-Mayo 1976
  • Selecciones-Noviembre 1976
  • Selecciones-Enero 1977
  • Selecciones-Febrero 1977
  • Selecciones-Mayo 1977
  • Selecciones-Octubre 1977
  • Selecciones-Septiembre 1977
  • Selecciones-Enero 1978
  • Selecciones-Octubre 1978
  • Selecciones-Diciembre 1978
  • Selecciones-Enero 1979
  • Selecciones-Marzo 1979
  • Selecciones-Julio 1979
  • Selecciones-Agosto 1979
  • Selecciones-Octubre 1979
  • Selecciones-Abril 1980
  • Selecciones-Agosto 1980
  • Selecciones-Septiembre 1980
  • Selecciones-Diciembre 1980
  • Selecciones-Febrero 1981
  • Selecciones-Septiembre 1981
  • Selecciones-Abril 1982
  • Selecciones-Mayo 1983
  • Selecciones-Julio 1984
  • Selecciones-Junio 1985
  • Selecciones-Septiembre 1987
  • Selecciones-Abril 1988
  • Selecciones-Febrero 1989
  • Selecciones-Abril 1989
  • Selecciones-Marzo 1990
  • Selecciones-Abril 1991
  • Selecciones-Mayo 1991
  • Selecciones-Octubre 1991
  • Selecciones-Diciembre 1991
  • Selecciones-Febrero 1992
  • Selecciones-Junio 1992
  • Selecciones-Septiembre 1992
  • Selecciones-Febrero 1994
  • Selecciones-Mayo 1994
  • Selecciones-Abril 1995
  • Selecciones-Mayo 1995
  • Selecciones-Septiembre 1995
  • Selecciones-Diciembre 1995
  • Selecciones-Junio 1996
  • Selecciones-Mayo 1997
  • Selecciones-Enero 1998
  • Selecciones-Febrero 1998
  • Selecciones-Julio 1999
  • Selecciones-Diciembre 1999
  • Selecciones-Febrero 2000
  • Selecciones-Diciembre 2001
  • Selecciones-Febrero 2002
  • Selecciones-Mayo 2005

  • SOMBRA DEL TEMA
  • ▪ Quitar
  • ▪ Normal
  • Publicaciones con Notas

    Notas de esta Página

    Todas las Notas

    Banco 1
    Banco 2
    Banco 3
    Banco 4
    Banco 5
    Banco 6
    Banco 7
    Banco 8
    Banco 9
    Banco 10
    Banco 11
    Banco 12
    Banco 13
    Banco 14
    Banco 15
    Banco 16
    Banco 17
    Banco 18
    Banco 19
    Banco 20
    Banco 21
    Banco 22
    Banco 23
    Banco 24
    Banco 25
    Banco 26
    Banco 27
    Banco 28
    Banco 29
    Banco 30
    Banco 31
    Banco 32
    Banco 33
    Banco 34
    Banco 35
    Ingresar Clave



    Aceptar

    ÍNDICE
  • MÚSICA SELECCIONADA
  • Instrumental
  • 1. 12 Mornings - Audionautix - 2:33
  • 2. Allegro (Autumn. Concerto F Major Rv 293) - Antonio Vivaldi - 3:35
  • 3. Allegro (Winter. Concerto F Minor Rv 297) - Antonio Vivaldi - 3:52
  • 4. Americana Suite - Mantovani - 7:58
  • 5. An Der Schonen Blauen Donau, Walzer, Op. 314 (The Blue Danube) (Csr Symphony Orchestra) - Johann Strauss - 9:26
  • 6. Annen. Polka, Op. 117 (Polish State Po) - Johann Strauss Jr - 4:30
  • 7. Autumn Day - Kevin Macleod - 3:05
  • 8. Bolereando - Quincas Moreira - 3:21
  • 9. Ersatz Bossa - John Deley And The 41 Players - 2:53
  • 10. España - Mantovani - 3:22
  • 11. Fireflies And Stardust - Kevin Macleod - 4:15
  • 12. Floaters - Jimmy Fontanez & Media Right Productions - 1:50
  • 13. Fresh Fallen Snow - Chris Haugen - 3:33
  • 14. Gentle Sex (Dulce Sexo) - Esoteric - 9:46
  • 15. Green Leaves - Audionautix - 3:40
  • 16. Hills Behind - Silent Partner - 2:01
  • 17. Island Dream - Chris Haugen - 2:30
  • 18. Love Or Lust - Quincas Moreira - 3:39
  • 19. Nostalgia - Del - 3:26
  • 20. One Fine Day - Audionautix - 1:43
  • 21. Osaka Rain - Albis - 1:48
  • 22. Read All Over - Nathan Moore - 2:54
  • 23. Si Señorita - Chris Haugen.mp3 - 2:18
  • 24. Snowy Peaks II - Chris Haugen - 1:52
  • 25. Sunset Dream - Cheel - 2:41
  • 26. Swedish Rhapsody - Mantovani - 2:10
  • 27. Travel The World - Del - 3:56
  • 28. Tucson Tease - John Deley And The 41 Players - 2:30
  • 29. Walk In The Park - Audionautix - 2:44
  • Naturaleza
  • 30. Afternoon Stream - 30:12
  • 31. Big Surf (Ocean Waves) - 8:03
  • 32. Bobwhite, Doves & Cardinals (Morning Songbirds) - 8:58
  • 33. Brookside Birds (Morning Songbirds) - 6:54
  • 34. Cicadas (American Wilds) - 5:27
  • 35. Crickets & Wolves (American Wilds) - 8:56
  • 36. Deep Woods (American Wilds) - 4:08
  • 37. Duet (Frog Chorus) - 2:24
  • 38. Echoes Of Nature (Beluga Whales) - 1h00:23
  • 39. Evening Thunder - 30:01
  • 40. Exotische Reise - 30:30
  • 41. Frog Chorus (American Wilds) - 7:36
  • 42. Frog Chorus (Frog Chorus) - 44:28
  • 43. Jamboree (Thundestorm) - 16:44
  • 44. Low Tide (Ocean Waves) - 10:11
  • 45. Magicmoods - Ocean Surf - 26:09
  • 46. Marsh (Morning Songbirds) - 3:03
  • 47. Midnight Serenade (American Wilds) - 2:57
  • 48. Morning Rain - 30:11
  • 49. Noche En El Bosque (Brainwave Lab) - 2h20:31
  • 50. Pacific Surf & Songbirds (Morning Songbirds) - 4:55
  • 51. Pebble Beach (Ocean Waves) - 12:49
  • 52. Pleasant Beach (Ocean Waves) - 19:32
  • 53. Predawn (Morning Songbirds) - 16:35
  • 54. Rain With Pygmy Owl (Morning Songbirds) - 3:21
  • 55. Showers (Thundestorm) - 3:00
  • 56. Songbirds (American Wilds) - 3:36
  • 57. Sparkling Water (Morning Songbirds) - 3:02
  • 58. Thunder & Rain (Thundestorm) - 25:52
  • 59. Verano En El Campo (Brainwave Lab) - 2h43:44
  • 60. Vertraumter Bach - 30:29
  • 61. Water Frogs (Frog Chorus) - 3:36
  • 62. Wilderness Rainshower (American Wilds) - 14:54
  • 63. Wind Song - 30:03
  • Relajación
  • 64. Concerning Hobbits - 2:55
  • 65. Constant Billy My Love To My - Kobialka - 5:45
  • 66. Dance Of The Blackfoot - Big Sky - 4:32
  • 67. Emerald Pools - Kobialka - 3:56
  • 68. Gypsy Bride - Big Sky - 4:39
  • 69. Interlude No.2 - Natural Dr - 2:27
  • 70. Interlude No.3 - Natural Dr - 3:33
  • 71. Kapha Evening - Bec Var - Bruce Brian - 18:50
  • 72. Kapha Morning - Bec Var - Bruce Brian - 18:38
  • 73. Misterio - Alan Paluch - 19:06
  • 74. Natural Dreams - Cades Cove - 7:10
  • 75. Oh, Why Left I My Hame - Kobialka - 4:09
  • 76. Sunday In Bozeman - Big Sky - 5:40
  • 77. The Road To Durbam Longford - Kobialka - 3:15
  • 78. Timberline Two Step - Natural Dr - 5:19
  • 79. Waltz Of The Winter Solace - 5:33
  • 80. You Smile On Me - Hufeisen - 2:50
  • 81. You Throw Your Head Back In Laughter When I Think Of Getting Angry - Hufeisen - 3:43
  • Halloween-Suspenso
  • 82. A Night In A Haunted Cemetery - Immersive Halloween Ambience - Rainrider Ambience - 13:13
  • 83. A Sinister Power Rising Epic Dark Gothic Soundtrack - 1:13
  • 84. Acecho - 4:34
  • 85. Alone With The Darkness - 5:06
  • 86. Atmosfera De Suspenso - 3:08
  • 87. Awoke - 0:54
  • 88. Best Halloween Playlist 2023 - Cozy Cottage - 1h17:43
  • 89. Black Sunrise Dark Ambient Soundscape - 4:00
  • 90. Cinematic Horror Climax - 0:59
  • 91. Creepy Halloween Night - 1:56
  • 92. Creepy Music Box Halloween Scary Spooky Dark Ambient - 1:05
  • 93. Dark Ambient Horror Cinematic Halloween Atmosphere Scary - 1:58
  • 94. Dark Mountain Haze - 1:44
  • 95. Dark Mysterious Halloween Night Scary Creepy Spooky Horror Music - 1:35
  • 96. Darkest Hour - 4:00
  • 97. Dead Home - 0:36
  • 98. Deep Relaxing Horror Music - Aleksandar Zavisin - 1h01:52
  • 99. Everything You Know Is Wrong - 0:49
  • 100. Geisterstimmen - 1:39
  • 101. Halloween Background Music - 1:01
  • 102. Halloween Spooky Horror Scary Creepy Funny Monsters And Zombies - 1:21
  • 103. Halloween Spooky Trap - 1:05
  • 104. Halloween Time - 0:57
  • 105. Horrible - 1:36
  • 106. Horror Background Atmosphere - Pixabay-Universfield - 1:05
  • 107. Horror Background Music Ig Version 60s - 1:04
  • 108. Horror Music Scary Creepy Dark Ambient Cinematic Lullaby - 1:52
  • 109. Horror Sound Mk Sound Fx - 13:39
  • 110. Inside Serial Killer 39s Cove Dark Thriller Horror Soundtrack Loopable - 0:29
  • 111. Intense Horror Music - Pixabay - 1:41
  • 112. Long Thriller Theme - 8:00
  • 113. Melancholia Music Box Sad-Creepy Song - 3:46
  • 114. Mix Halloween-1 - 33:58
  • 115. Mix Halloween-2 - 33:34
  • 116. Mix Halloween-3 - 58:53
  • 117. Mix-Halloween - Spooky-2022 - 1h19:23
  • 118. Movie Theme - A Nightmare On Elm Street - 1984 - 4:06
  • 119. Movie Theme - Children Of The Corn - 3:03
  • 120. Movie Theme - Dead Silence - 2:56
  • 121. Movie Theme - Friday The 13th - 11:11
  • 122. Movie Theme - Halloween - John Carpenter - 2:25
  • 123. Movie Theme - Halloween II - John Carpenter - 4:30
  • 124. Movie Theme - Halloween III - 6:16
  • 125. Movie Theme - Insidious - 3:31
  • 126. Movie Theme - Prometheus - 1:34
  • 127. Movie Theme - Psycho - 1960 - 1:06
  • 128. Movie Theme - Sinister - 6:56
  • 129. Movie Theme - The Omen - 2:35
  • 130. Movie Theme - The Omen II - 5:05
  • 131. Música De Suspenso - Bosque Siniestro - Tony Adixx - 3:21
  • 132. Música De Suspenso - El Cementerio - Tony Adixx - 3:33
  • 133. Música De Suspenso - El Pantano - Tony Adixx - 4:21
  • 134. Música De Suspenso - Fantasmas De Halloween - Tony Adixx - 4:01
  • 135. Música De Suspenso - Muñeca Macabra - Tony Adixx - 3:03
  • 136. Música De Suspenso - Payasos Asesinos - Tony Adixx - 3:38
  • 137. Música De Suspenso - Trampa Oscura - Tony Adixx - 2:42
  • 138. Música Instrumental De Suspenso - 1h31:32
  • 139. Mysterios Horror Intro - 0:39
  • 140. Mysterious Celesta - 1:04
  • 141. Nightmare - 2:32
  • 142. Old Cosmic Entity - 2:15
  • 143. One-Two Freddys Coming For You - 0:29
  • 144. Out Of The Dark Creepy And Scary Voices - 0:59
  • 145. Pandoras Music Box - 3:07
  • 146. Peques - 5 Calaveras Saltando En La Cama - Educa Baby TV - 2:18
  • 147. Peques - A Mi Zombie Le Duele La Cabeza - Educa Baby TV - 2:49
  • 148. Peques - El Extraño Mundo De Jack - Esto Es Halloween - 3:08
  • 149. Peques - Halloween Scary Horror And Creepy Spooky Funny Children Music - 2:53
  • 150. Peques - Join Us - Horror Music With Children Singing - 1:59
  • 151. Peques - La Familia Dedo De Monstruo - Educa Baby TV - 3:31
  • 152. Peques - Las Calaveras Salen De Su Tumba Chumbala Cachumbala - 3:19
  • 153. Peques - Monstruos Por La Ciudad - Educa Baby TV - 3:17
  • 154. Peques - Tumbas Por Aquí, Tumbas Por Allá - Luli Pampin - 3:17
  • 155. Scary Forest - 2:41
  • 156. Scary Spooky Creepy Horror Ambient Dark Piano Cinematic - 2:06
  • 157. Slut - 0:48
  • 158. Sonidos - A Growing Hit For Spooky Moments - Pixabay-Universfield - 0:05
  • 159. Sonidos - A Short Horror With A Build Up - Pixabay-Universfield - 0:13
  • 160. Sonidos - Castillo Embrujado - Creando Emociones - 1:05
  • 161. Sonidos - Cinematic Impact Climax Intro - Pixabay - 0:28
  • 162. Sonidos - Creepy Horror Sound Possessed Laughter - Pixabay-Alesiadavina - 0:04
  • 163. Sonidos - Creepy Soundscape - Pixabay - 0:50
  • 164. Sonidos - Creepy Whispering - Pixabay - 0:03
  • 165. Sonidos - Cueva De Los Espiritus - The Girl Of The Super Sounds - 3:47
  • 166. Sonidos - Disturbing Horror Sound Creepy Laughter - Pixabay-Alesiadavina - 0:05
  • 167. Sonidos - Ghost Sigh - Pixabay - 0:05
  • 168. Sonidos - Ghost Whispers - Pixabay - 0:23
  • 169. Sonidos - Ghosts-Whispering-Screaming - Lara's Horror Sounds - 2h03:40
  • 170. Sonidos - Horror - Pixabay - 1:36
  • 171. Sonidos - Horror Demonic Sound - Pixabay-Alesiadavina - 0:18
  • 172. Sonidos - Horror Sfx - Pixabay - 0:04
  • 173. Sonidos - Horror Voice Flashback - Pixabay - 0:10
  • 174. Sonidos - Maniac In The Dark - Pixabay-Universfield - 0:15
  • 175. Sonidos - Miedo-Suspenso - Live Better Media - 8:05
  • 176. Sonidos - Para Recorrido De Casa Del Terror - Dangerous Tape Avi - 1:16
  • 177. Sonidos - Posesiones - Horror Movie Dj's - 1:35
  • 178. Sonidos - Scary Creaking Knocking Wood - Pixabay - 0:26
  • 179. Sonidos - Scream With Echo - Pixabay - 0:05
  • 180. Sonidos - Terror - Ronwizlee - 6:33
  • 181. Suspense Dark Ambient - 2:34
  • 182. Tense Cinematic - 3:14
  • 183. Terror Ambience - Pixabay - 2:01
  • 184. The Spell Dark Magic Background Music Ob Lix - 3:26
  • 185. This Is Halloween - Marilyn Manson - 3:20
  • 186. Trailer Agresivo - 0:49
  • 187. Welcome To The Dark On Halloween - 2:25
  • 188. 20 Villancicos Tradicionales - Los Niños Cantores De Navidad Vol.1 (1999) - 53:21
  • 189. 30 Mejores Villancicos De Navidad - Mundo Canticuentos - 1h11:57
  • 190. Blanca Navidad - Coros de Amor - 3:00
  • 191. Christmas Ambience - Rainrider Ambience - 3h00:00
  • 192. Christmas Time - Alma Cogan - 2:48
  • 193. Christmas Village - Aaron Kenny - 1:32
  • 194. Clásicos De Navidad - Orquesta Sinfónica De Londres - 51:44
  • 195. Deck The Hall With Boughs Of Holly - Anre Rieu - 1:33
  • 196. Deck The Halls - Jingle Punks - 2:12
  • 197. Deck The Halls - Nat King Cole - 1:08
  • 198. Frosty The Snowman - Nat King Cole-1950 - 2:18
  • 199. Frosty The Snowman - The Ventures - 2:01
  • 200. I Wish You A Merry Christmas - Bing Crosby - 1:53
  • 201. It's A Small World - Disney Children's - 2:04
  • 202. It's The Most Wonderful Time Of The Year - Andy Williams - 2:32
  • 203. Jingle Bells - 1957 - Bobby Helms - 2:11
  • 204. Jingle Bells - Am Classical - 1:36
  • 205. Jingle Bells - Frank Sinatra - 2:05
  • 206. Jingle Bells - Jim Reeves - 1:47
  • 207. Jingle Bells - Les Paul - 1:36
  • 208. Jingle Bells - Original Lyrics - 2:30
  • 209. La Pandilla Navideña - A Belen Pastores - 2:24
  • 210. La Pandilla Navideña - Ángeles Y Querubines - 2:33
  • 211. La Pandilla Navideña - Anton - 2:54
  • 212. La Pandilla Navideña - Campanitas Navideñas - 2:50
  • 213. La Pandilla Navideña - Cantad Cantad - 2:39
  • 214. La Pandilla Navideña - Donde Será Pastores - 2:35
  • 215. La Pandilla Navideña - El Amor De Los Amores - 2:56
  • 216. La Pandilla Navideña - Ha Nacido Dios - 2:29
  • 217. La Pandilla Navideña - La Nanita Nana - 2:30
  • 218. La Pandilla Navideña - La Pandilla - 2:29
  • 219. La Pandilla Navideña - Pastores Venid - 2:20
  • 220. La Pandilla Navideña - Pedacito De Luna - 2:13
  • 221. La Pandilla Navideña - Salve Reina Y Madre - 2:05
  • 222. La Pandilla Navideña - Tutaina - 2:09
  • 223. La Pandilla Navideña - Vamos, Vamos Pastorcitos - 2:29
  • 224. La Pandilla Navideña - Venid, Venid, Venid - 2:15
  • 225. La Pandilla Navideña - Zagalillo - 2:16
  • 226. Let It Snow! Let It Snow! - Dean Martin - 1:55
  • 227. Let It Snow! Let It Snow! - Frank Sinatra - 2:35
  • 228. Los Peces En El Río - Los Niños Cantores de Navidad - 2:15
  • 229. Navidad - Himnos Adventistas - 35:35
  • 230. Navidad - Instrumental Relajante - Villancicos - 1 - 58:29
  • 231. Navidad - Instrumental Relajante - Villancicos - 2 - 2h00:43
  • 232. Navidad - Jazz Instrumental - Canciones Y Villancicos - 1h08:52
  • 233. Navidad - Piano Relajante Para Descansar - 1h00:00
  • 234. Noche De Paz - 3:40
  • 235. Rocking Around The Chirstmas - Mel & Kim - 3:32
  • 236. Rodolfo El Reno - Grupo Nueva América - Orquesta y Coros - 2:40
  • 237. Rudolph The Red-Nosed Reindeer - The Cadillacs - 2:18
  • 238. Santa Claus Is Comin To Town - Frank Sinatra Y Seal - 2:18
  • 239. Santa Claus Is Coming To Town - Coros De Niños - 1:19
  • 240. Santa Claus Is Coming To Town - Frank Sinatra - 2:36
  • 241. Sleigh Ride - Ferrante And Teicher - 2:16
  • 242. The First Noel - Am Classical - 2:18
  • 243. Walking In A Winter Wonderland - Dean Martin - 1:52
  • 244. We Wish You A Merry Christmas - Rajshri Kids - 2:07
  • Código Hexadecimal


    Seleccionar Efectos (
    0
    )
    Normal
    Aleatorio
    Activar Desactivar Borrar
    Seleccionar Tipos de Letra (
    0
    )
    Normal
    Aleatorio
    Activar Desactivar Borrar
    Seleccionar Colores (
    0
    )
    Elegir Sección

    Bordes
    Fondo

    Fondo Hora
    Reloj-Fecha
    Normal
    Aleatorio
    Activar Desactivar Borrar
    LETRA - TIPO

    Desactivado SM
  • ▪ Abrir para Selección Múltiple

  • ▪ Cerrar Selección Múltiple

  • Actual
    (
    )

  • ▪ ADLaM Display: H33-V69

  • ▪ Akaya Kanadaka: H37-V71

  • ▪ Audiowide: H23-V53

  • ▪ Chewy: H35-V69

  • ▪ Croissant One: H35-V70

  • ▪ Delicious Handrawn: H55-V69

  • ▪ Germania One: H43-V70

  • ▪ Kavoon: H33-V69

  • ▪ Limelight: H31-V70

  • ▪ Marhey: H31-V71

  • ▪ Orbitron: H25-V58

  • ▪ Revalia: H23-V57

  • ▪ Ribeye: H33-V68

  • ▪ Saira Stencil One(s): H31-V68

  • ▪ Source Code Pro: H31-V69

  • ▪ Uncial Antiqua: H27-V60

  • CON RELLENO

  • ▪ Cabin Sketch: H31-V71

  • ▪ Fredericka the Great: H37-V68

  • ▪ Rubik Dirt: H29-V68

  • ▪ Rubik Distressed: H29-V68

  • ▪ Rubik Glitch Pop: H29-V68

  • ▪ Rubik Maps: H29-V68

  • ▪ Rubik Maze: H29-V68

  • ▪ Rubik Moonrocks: H29-V68

  • DE PUNTOS

  • ▪ Codystar: H37-V62

  • ▪ Handjet: H53-V70

  • ▪ Raleway Dots: H35-V69

  • DIFERENTE

  • ▪ Barrio: H41-V69

  • ▪ Caesar Dressing: H39-V66

  • ▪ Diplomata SC: H19-V44

  • ▪ Emilys Candy: H35-V68

  • ▪ Faster One: H27-V63

  • ▪ Henny Penny: H29-V64

  • ▪ Jolly Lodger: H57-V68

  • ▪ Kablammo: H33-V66

  • ▪ Monofett: H33-V66

  • ▪ Monoton: H25-V57

  • ▪ Mystery Quest: H37-V69

  • ▪ Nabla: H39-V64

  • ▪ Reggae One: H29-V64

  • ▪ Rye: H29-V67

  • ▪ Silkscreen: H27-V65

  • ▪ Sixtyfour: H19-V48

  • ▪ Smokum: H53-V68

  • ▪ UnifrakturCook: H41-V67

  • ▪ Vast Shadow: H25-V58

  • ▪ Wallpoet: H25-V57

  • ▪ Workbench: H37-V65

  • GRUESA

  • ▪ Bagel Fat One: H32-V66

  • ▪ Bungee Inline: H29-V66

  • ▪ Chango: H23-V55

  • ▪ Coiny: H31-V72

  • ▪ Luckiest Guy : H33-V67

  • ▪ Modak: H35-V72

  • ▪ Oi: H21-V46

  • ▪ Rubik Spray Paint: H29-V67

  • ▪ Ultra: H27-V62

  • HALLOWEEN

  • ▪ Butcherman: H37-V67

  • ▪ Creepster: H47-V67

  • ▪ Eater: H35-V67

  • ▪ Freckle Face: H39-V67

  • ▪ Frijole: H29-V63

  • ▪ Irish Grover: H37-V70

  • ▪ Nosifer: H23-V53

  • ▪ Piedra: H39-V68

  • ▪ Rubik Beastly: H29-V62

  • ▪ Rubik Glitch: H29-V65

  • ▪ Rubik Marker Hatch: H29-V67

  • ▪ Rubik Wet Paint: H29-V65

  • LÍNEA FINA

  • ▪ Almendra Display: H45-V70

  • ▪ Cute Font: H49-V75

  • ▪ Cutive Mono: H31-V70

  • ▪ Hachi Maru Pop: H25-V60

  • ▪ Life Savers: H37-V64

  • ▪ Megrim: H37-V68

  • ▪ Snowburst One: H33-V63

  • MANUSCRITA

  • ▪ Beau Rivage: H27-V55

  • ▪ Butterfly Kids: H59-V71

  • ▪ Explora: H47-V72

  • ▪ Love Light: H35-V61

  • ▪ Mea Culpa: H45-V67

  • ▪ Neonderthaw: H37-V66

  • ▪ Sonsie one: H21-V53

  • ▪ Swanky and Moo Moo: H53-V73

  • ▪ Waterfall: H43-V68

  • SIN RELLENO

  • ▪ Akronim: H51-V70

  • ▪ Bungee Shade: H25-V59

  • ▪ Londrina Outline: H41-V67

  • ▪ Moirai One: H34-V64

  • ▪ Rampart One: H33-V63

  • ▪ Rubik Burned: H29-V64

  • ▪ Rubik Doodle Shadow: H29-V65

  • ▪ Rubik Iso: H29-V64

  • ▪ Rubik Puddles: H29-V62

  • ▪ Tourney: H37-V67

  • ▪ Train One: H29-V64

  • ▪ Ewert: H27-V64

  • ▪ Londrina Shadow: H41-V67

  • ▪ Londrina Sketch: H41-V68

  • ▪ Miltonian: H31-V69

  • ▪ Rubik Scribble: H29-V67

  • ▪ Rubik Vinyl: H29-V64

  • ▪ Tilt Prism: H33-V67

  • OPCIONES

  • Salir a Opciones de Imágenes
    Dispo. Posic.
    H
    H
    V

    Estilos Predefinidos
    Bordes - Curvatura
    Bordes - Sombra
    Borde-Sombra Actual (
    1
    )

  • ▪ B1 (s)

  • ▪ B2

  • ▪ B3

  • ▪ B4

  • ▪ B5

  • Sombra Iquierda Superior

  • ▪ SIS1

  • ▪ SIS2

  • ▪ SIS3

  • Sombra Derecha Superior

  • ▪ SDS1

  • ▪ SDS2

  • ▪ SDS3

  • Sombra Iquierda Inferior

  • ▪ SII1

  • ▪ SII2

  • ▪ SII3

  • Sombra Derecha Inferior

  • ▪ SDI1

  • ▪ SDI2

  • ▪ SDI3

  • Sombra Superior

  • ▪ SS1

  • ▪ SS2

  • ▪ SS3

  • Sombra Inferior

  • ▪ SI1

  • ▪ SI2

  • ▪ SI3

  • Colores - Posición Paleta
    Elegir Color o Colores
    Fecha - Formato Horizontal
    Fecha - Formato Vertical
    Fecha - Opacidad
    Fecha - Posición
    Fecha - Quitar
    Fecha - Tamaño
    Fondo - Opacidad
    Imágenes para efectos
    Letra - Negrilla
    Ocultar Reloj - Fecha
    No Ocultar

    Dejar Activado
    No Dejar Activado
  • ▪ Ocultar Reloj y Fecha

  • ▪ Ocultar Reloj

  • ▪ Ocultar Fecha

  • ▪ No Ocultar

  • Ocultar Reloj - 2
    No Ocultar

    Dejar Activado
    No Dejar Activado
  • ▪ Ocultar Reloj y Fecha

  • ▪ Ocultar Reloj

  • ▪ Ocultar Fecha

  • ▪ Ocultar Dos Puntos 1

  • ▪ Ocultar Dos Puntos 1-2

  • ▪ No Ocultar

  • Aumento máximo R:
    19

    Aumentar Reloj

  • Más - Menos
  • Aumento máximo F:
    7

    Aumentar Fecha

  • Más - Menos
  • Pausar Reloj
    Reloj - Opacidad
    Reloj - Posición
    Reloj - Presentación
    Reloj - Tamaño
    Reloj - Vertical
    Segundos - Dos Puntos
    Segundos

  • ▪ Quitar

  • ▪ Mostrar (s)


  • Dos Puntos Ocultar

  • ▪ Ocultar

  • ▪ Mostrar (s)


  • Dos Puntos Quitar

  • ▪ Quitar

  • ▪ Mostrar (s)

  • Segundos - Opacidad
    Segundos - Posición
    Segundos - Tamaño
    Seleccionar Efecto para Animar
    Tiempo entre efectos
    SEGUNDOS ACTUALES

    Animación
    (
    seg)

    Color Borde
    (
    seg)

    Color Fondo
    (
    seg)

    Color Fondo cada uno
    (
    seg)

    Color Reloj
    (
    seg)

    Ocultar R-F
    (
    seg)

    Ocultar R-2
    (
    seg)

    Tipos de Letra
    (
    seg)

    SEGUNDOS A ELEGIR

  • ▪ 0.3

  • ▪ 0.7

  • ▪ 1

  • ▪ 1.3

  • ▪ 1.5

  • ▪ 1.7

  • ▪ 2

  • ▪ 3 (s)

  • ▪ 5

  • ▪ 7

  • ▪ 10

  • ▪ 15

  • ▪ 20

  • ▪ 25

  • ▪ 30

  • ▪ 35

  • ▪ 40

  • ▪ 45

  • ▪ 50

  • ▪ 55

  • SECCIÓN A ELEGIR

  • ▪ Animación

  • ▪ Color Borde

  • ▪ Color Fondo

  • ▪ Color Fondo cada uno

  • ▪ Color Reloj

  • ▪ Ocultar R-F

  • ▪ Ocultar R-2

  • ▪ Tipos de Letra

  • ▪ Todo

  • Animar Reloj
    Cambio automático Color - Bordes
    Cambio automático Color - Fondo
    Cambio automático Color - Fondo H-M-S-F
    Cambio automático Color - Reloj
    Cambio automático Tipo de Letra
    Restablecer Reloj
    PROGRAMACIÓN

    Programar Reloj
    DESACTIVADO
    ▪ Activar

    ▪ Desactivar

    ▪ Eliminar

    ▪ Guardar
    H= M= R=
    -------
    H= M= R=
    -------
    H= M= R=
    -------
    H= M= R=
    -------
    Prog.R.1

    H M

    Reloj #

    L
    M
    M
    J
    V
    S
    D


    Borrar Días
    Prog.R.2

    H M

    Reloj #

    L
    M
    M
    J
    V
    S
    D


    Borrar Días
    Prog.R.3

    H M

    Reloj #

    L
    M
    M
    J
    V
    S
    D


    Borrar Días
    Prog.R.4

    H M

    Reloj #

    L
    M
    M
    J
    V
    S
    D


    Borrar Días


    Programar Estilo
    DESACTIVADO
    ▪ Activar

    ▪ Desctivar

    ▪ Eliminar

    ▪ Guardar
    H= M= E=
    -------
    H= M= E=
    -------
    H= M= E=
    -------
    H= M= E=
    -------
    Prog.E.1

    H M

    Estilo #

    L
    M
    M
    J
    V
    S
    D


    Borrar Días
    Prog.E.2

    H M

    Estilo #

    L
    M
    M
    J
    V
    S
    D


    Borrar Días
    Prog.E.3

    H M

    Estilo #

    L
    M
    M
    J
    V
    S
    D


    Borrar Días
    Prog.E.4

    H M

    Estilo #

    L
    M
    M
    J
    V
    S
    D


    Borrar Días

    Programar RELOJES

    DESACTIVADO
    ▪ Activar

    ▪ Desactivar

    ▪ Guardar
    Almacenar


    Cargar


    Borrar
    ▪ 1 ▪ 2 ▪ 3

    ▪ 4 ▪ 5 ▪ 6
    HORAS
    Cambiar cada
    1 2 3 4 5

    6 7 8 9 0

    X
    MINUTOS
    Cambiar cada
    1 2 3 4 5

    6 7 8 9 0

    X
    RELOJES #
    Relojes a cambiar
    1 2 3 4 5

    6 7 8 9 10

    T X


    Programar ESTILOS

    DESACTIVADO
    ▪ Activar

    ▪ Desactivar

    ▪ Guardar
    Almacenar


    Cargar


    Borrar
    ▪ 1 ▪ 2 ▪ 3

    ▪ 4 ▪ 5 ▪ 6
    HORAS
    Cambiar cada
    1 2 3 4 5

    6 7 8 9 0

    X
    MINUTOS
    Cambiar cada
    1 2 3 4 5

    6 7 8 9 0

    X
    ESTILOS #
    A B C D

    E F G H

    I J K L

    M N O P

    Q R T S

    TODO X


    Programar lo Programado
    DESACTIVADO
    ▪ Activar

    ▪ Desactivar
    Programación 1

    Reloj:
    h m
    (s)
    (s2)

    Estilo:
    h m
    (s)
    (s2)

    RELOJES:
    h m
    (s)
    (s2)

    ESTILOS:
    h m
    (s)
    (s2)
    Programación 2

    Reloj:
    h m
    (s)
    (s2)

    Estilo:
    h m
    (s)(s2)

    RELOJES:
    h m
    (s)
    (s2)

    ESTILOS:
    h m
    (s)
    (s2)
    Programación 3

    Reloj:
    h m
    (s)
    (s2)

    Estilo:
    h m
    (s)
    (s2)

    RELOJES:
    h m
    (s)
    (s2)

    ESTILOS:
    h m
    (s)
    (s2)
    Ocultar Reloj - Fecha

    ( RF ) ( R ) ( F )
    No Ocultar
    Ocultar Reloj - 2

    ( RF ) ( R ) ( F )
    ( D1 ) ( D1-2 )
    No Ocultar
    Almacenado en RELOJES y ESTILOS
    1
    2
    3


    4
    5
    6
    Borrar Programación
    HORAS
    1 2 3 4 5

    6 7 8 9 0

    X
    MINUTOS
    1 2 3 4 5

    6 7 8 9 0

    X


    IMÁGENES PERSONALES

    Esta opción permite colocar de fondo, en cualquier sección de la página, imágenes de internet, empleando el link o url de la misma. Su manejo es sencillo y práctico.

    Ahora se puede elegir un fondo diferente para cada ventana del slide, del sidebar y del downbar, en la página de INICIO; y el sidebar y la publicación en el Salón de Lectura. A más de eso, el Body, Main e Info, incluido las secciones +Categoría y Listas.

    Cada vez que eliges dónde se coloca la imagen de fondo, la misma se guarda y se mantiene cuando regreses al blog. Así como el resto de las opciones que te ofrece el mismo, es independiente por estilo, y a su vez, por usuario.

    FUNCIONAMIENTO

  • Recuadro en blanco: Es donde se colocará la url o link de la imagen.

  • Aceptar Url: Permite aceptar la dirección de la imagen que colocas en el recuadro.

  • Borrar Url: Deja vacío el recuadro en blanco para que coloques otra url.

  • Quitar imagen: Permite eliminar la imagen colocada. Cuando eliminas una imagen y deseas colocarla en otra parte, simplemente la eliminas, y para que puedas usarla en otra sección, presionas nuevamente "Aceptar Url"; siempre y cuando el link siga en el recuadro blanco.

  • Guardar Imagen: Permite guardar la imagen, para emplearla posteriormente. La misma se almacena en el banco de imágenes para el Header.

  • Imágenes Guardadas: Abre la ventana que permite ver las imágenes que has guardado.

  • Forma 1 a 5: Esta opción permite colocar de cinco formas diferente las imágenes.

  • Bottom, Top, Left, Right, Center: Esta opción, en conjunto con la anterior, permite mover la imagen para que se vea desde la parte de abajo, de arriba, desde la izquierda, desde la derecha o centrarla. Si al activar alguna de estas opciones, la imagen desaparece, debes aceptar nuevamente la Url y elegir una de las 5 formas, para que vuelva a aparecer.


  • Una vez que has empleado una de las opciones arriba mencionadas, en la parte inferior aparecerán las secciones que puedes agregar de fondo la imagen.

    Cada vez que quieras cambiar de Forma, o emplear Bottom, Top, etc., debes seleccionar la opción y seleccionar nuevamente la sección que colocaste la imagen.

    Habiendo empleado el botón "Aceptar Url", das click en cualquier sección que desees, y a cuantas quieras, sin necesidad de volver a ingresar la misma url, y el cambio es instantáneo.

    Las ventanas (widget) del sidebar, desde la quinta a la décima, pueden ser vistas cambiando la sección de "Últimas Publicaciones" con la opción "De 5 en 5 con texto" (la encuentras en el PANEL/MINIATURAS/ESTILOS), reduciendo el slide y eliminando los títulos de las ventanas del sidebar.

    La sección INFO, es la ventana que se abre cuando das click en .

    La sección DOWNBAR, son los tres widgets que se encuentran en la parte última en la página de Inicio.

    La sección POST, es donde está situada la publicación.

    Si deseas eliminar la imagen del fondo de esa sección, da click en el botón "Quitar imagen", y sigues el mismo procedimiento. Con un solo click a ese botón, puedes ir eliminando la imagen de cada seccion que hayas colocado.

    Para guardar una imagen, simplemente das click en "Guardar Imagen", siempre y cuando hayas empleado el botón "Aceptar Url".

    Para colocar una imagen de las guardadas, presionas el botón "Imágenes Guardadas", das click en la imagen deseada, y por último, click en la sección o secciones a colocar la misma.

    Para eliminar una o las imágenes que quieras de las guardadas, te vas a "Mi Librería".
    MÁS COLORES

    Esta opción permite obtener más tonalidades de los colores, para cambiar los mismos a determinadas bloques de las secciones que conforman el blog.

    Con esta opción puedes cambiar, también, los colores en la sección "Mi Librería" y "Navega Directo 1", cada uno con sus colores propios. No es necesario activar el PANEL para estas dos secciones.

    Así como el resto de las opciones que te permite el blog, es independiente por "Estilo" y a su vez por "Usuario". A excepción de "Mi Librería" y "Navega Directo 1".

    FUNCIONAMIENTO

    En la parte izquierda de la ventana de "Más Colores" se encuentra el cuadro que muestra las tonalidades del color y la barra con los colores disponibles. En la parte superior del mismo, se encuentra "Código Hex", que es donde se verá el código del color que estás seleccionando. A mano derecha del mismo hay un cuadro, el cual te permite ingresar o copiar un código de color. Seguido está la "C", que permite aceptar ese código. Luego la "G", que permite guardar un color. Y por último, el caracter "►", el cual permite ver la ventana de las opciones para los "Colores Guardados".

    En la parte derecha se encuentran los bloques y qué partes de ese bloque permite cambiar el color; así como borrar el mismo.

    Cambiemos, por ejemplo, el color del body de esta página. Damos click en "Body", una opción aparece en la parte de abajo indicando qué puedes cambiar de ese bloque. En este caso da la opción de solo el "Fondo". Damos click en la misma, seguido elegimos, en la barra vertical de colores, el color deseado, y, en la ventana grande, desplazamos la ruedita a la intensidad o tonalidad de ese color. Haciendo esto, el body empieza a cambiar de color. Donde dice "Código Hex", se cambia por el código del color que seleccionas al desplazar la ruedita. El mismo procedimiento harás para el resto de los bloques y sus complementos.

    ELIMINAR EL COLOR CAMBIADO

    Para eliminar el nuevo color elegido y poder restablecer el original o el que tenía anteriormente, en la parte derecha de esta ventana te desplazas hacia abajo donde dice "Borrar Color" y das click en "Restablecer o Borrar Color". Eliges el bloque y el complemento a eliminar el color dado y mueves la ruedita, de la ventana izquierda, a cualquier posición. Mientras tengas elegida la opción de "Restablecer o Borrar Color", puedes eliminar el color dado de cualquier bloque.
    Cuando eliges "Restablecer o Borrar Color", aparece la opción "Dar Color". Cuando ya no quieras eliminar el color dado, eliges esta opción y puedes seguir dando color normalmente.

    ELIMINAR TODOS LOS CAMBIOS

    Para eliminar todos los cambios hechos, abres el PANEL, ESTILOS, Borrar Cambios, y buscas la opción "Borrar Más Colores". Se hace un refresco de pantalla y todo tendrá los colores anteriores o los originales.

    COPIAR UN COLOR

    Cuando eliges un color, por ejemplo para "Body", a mano derecha de la opción "Fondo" aparece el código de ese color. Para copiarlo, por ejemplo al "Post" en "Texto General Fondo", das click en ese código y el mismo aparece en el recuadro blanco que está en la parte superior izquierda de esta ventana. Para que el color sea aceptado, das click en la "C" y el recuadro blanco y la "C" se cambian por "No Copiar". Ahora sí, eliges "Post", luego das click en "Texto General Fondo" y desplazas la ruedita a cualquier posición. Puedes hacer el mismo procedimiento para copiarlo a cualquier bloque y complemento del mismo. Cuando ya no quieras copiar el color, das click en "No Copiar", y puedes seguir dando color normalmente.

    COLOR MANUAL

    Para dar un color que no sea de la barra de colores de esta opción, escribe el código del color, anteponiendo el "#", en el recuadro blanco que está sobre la barra de colores y presiona "C". Por ejemplo: #000000. Ahora sí, puedes elegir el bloque y su respectivo complemento a dar el color deseado. Para emplear el mismo color en otro bloque, simplemente elige el bloque y su complemento.

    GUARDAR COLORES

    Permite guardar hasta 21 colores. Pueden ser utilizados para activar la carga de los mismos de forma Ordenada o Aleatoria.

    El proceso es similiar al de copiar un color, solo que, en lugar de presionar la "C", presionas la "G".

    Para ver los colores que están guardados, da click en "►". Al hacerlo, la ventana de los "Bloques a cambiar color" se cambia por la ventana de "Banco de Colores", donde podrás ver los colores guardados y otras opciones. El signo "►" se cambia por "◄", el cual permite regresar a la ventana anterior.

    Si quieres seguir guardando más colores, o agregar a los que tienes guardado, debes desactivar, primero, todo lo que hayas activado previamente, en esta ventana, como es: Carga Aleatoria u Ordenada, Cargar Estilo Slide y Aplicar a todo el blog; y procedes a guardar otros colores.

    A manera de sugerencia, para ver los colores que desees guardar, puedes ir probando en la sección MAIN con la opción FONDO. Una vez que has guardado los colores necesarios, puedes borrar el color del MAIN. No afecta a los colores guardados.

    ACTIVAR LOS COLORES GUARDADOS

    Para activar los colores que has guardado, debes primero seleccionar el bloque y su complemento. Si no se sigue ese proceso, no funcionará. Una vez hecho esto, das click en "►", y eliges si quieres que cargue "Ordenado, Aleatorio, Ordenado Incluido Cabecera y Aleatorio Incluido Cabecera".

    Funciona solo para un complemento de cada bloque. A excepción del Slide, Sidebar y Downbar, que cada uno tiene la opción de que cambie el color en todos los widgets, o que cada uno tenga un color diferente.

    Cargar Estilo Slide. Permite hacer un slide de los colores guardados con la selección hecha. Cuando lo activas, automáticamente cambia de color cada cierto tiempo. No es necesario reiniciar la página. Esta opción se graba.
    Si has seleccionado "Aplicar a todo el Blog", puedes activar y desactivar esta opción en cualquier momento y en cualquier sección del blog.
    Si quieres cambiar el bloque con su respectivo complemento, sin desactivar "Estilo Slide", haces la selección y vuelves a marcar si es aleatorio u ordenado (con o sin cabecera). Por cada cambio de bloque, es el mismo proceso.
    Cuando desactivas esta opción, el bloque mantiene el color con que se quedó.

    No Cargar Estilo Slide. Desactiva la opción anterior.

    Cuando eliges "Carga Ordenada", cada vez que entres a esa página, el bloque y el complemento que elegiste tomará el color según el orden que se muestra en "Colores Guardados". Si eliges "Carga Ordenada Incluido Cabecera", es igual que "Carga Ordenada", solo que se agrega el Header o Cabecera, con el mismo color, con un grado bajo de transparencia. Si eliges "Carga Aleatoria", el color que toma será cualquiera, y habrá veces que se repita el mismo. Si eliges "Carga Aleatoria Incluido Cabecera", es igual que "Aleatorio", solo que se agrega el Header o Cabecera, con el mismo color, con un grado bajo de transparencia.

    Puedes desactivar la Carga Ordenada o Aleatoria dando click en "Desactivar Carga Ordenada o Aleatoria".

    Si quieres un nuevo grupo de colores, das click primero en "Desactivar Carga Ordenada o Aleatoria", luego eliminas los actuales dando click en "Eliminar Colores Guardados" y por último seleccionas el nuevo set de colores.

    Aplicar a todo el Blog. Tienes la opción de aplicar lo anterior para que se cargue en todo el blog. Esta opción funciona solo con los bloques "Body, Main, Header, Menú" y "Panel y Otros".
    Para activar esta opción, debes primero seleccionar el bloque y su complemento deseado, luego seleccionas si la carga es aleatoria, ordenada, con o sin cabecera, y procedes a dar click en esta opción.
    Cuando se activa esta opción, los colores guardados aparecerán en las otras secciones del blog, y puede ser desactivado desde cualquiera de ellas. Cuando desactivas esta opción en otra sección, los colores guardados desaparecen cuando reinicias la página, y la página desde donde activaste la opción, mantiene el efecto.
    Si has seleccionado, previamente, colores en alguna sección del blog, por ejemplo en INICIO, y activas esta opción en otra sección, por ejemplo NAVEGA DIRECTO 1, INICIO tomará los colores de NAVEGA DIRECTO 1, que se verán también en todo el blog, y cuando la desactivas, en cualquier sección del blog, INICIO retomará los colores que tenía previamente.
    Cuando seleccionas la sección del "Menú", al aplicar para todo el blog, cada sección del submenú tomará un color diferente, según la cantidad de colores elegidos.

    No plicar a todo el Blog. Desactiva la opción anterior.

    Tiempo a cambiar el color. Permite cambiar los segundos que transcurren entre cada color, si has aplicado "Cargar Estilo Slide". El tiempo estándar es el T3. A la derecha de esta opción indica el tiempo a transcurrir. Esta opción se graba.

    SETS PREDEFINIDOS DE COLORES

    Se encuentra en la sección "Banco de Colores", casi en la parte última, y permite elegir entre cuatro sets de colores predefinidos. Sirven para ser empleados en "Cargar Estilo Slide".
    Para emplear cualquiera de ellos, debes primero, tener vacío "Colores Guardados"; luego das click en el Set deseado, y sigues el proceso explicado anteriormente para activar los "Colores Guardados".
    Cuando seleccionas alguno de los "Sets predefinidos", los colores que contienen se mostrarán en la sección "Colores Guardados".

    SETS PERSONAL DE COLORES

    Se encuentra seguido de "Sets predefinidos de Colores", y permite guardar cuatro sets de colores personales.
    Para guardar en estos sets, los colores deben estar en "Colores Guardados". De esa forma, puedes armar tus colores, o copiar cualquiera de los "Sets predefinidos de Colores", o si te gusta algún set de otra sección del blog y tienes aplicado "Aplicar a todo el Blog".
    Para usar uno de los "Sets Personales", debes primero, tener vacío "Colores Guardados"; y luego das click en "Usar". Cuando aplicas "Usar", el set de colores aparece en "Colores Guardados", y se almacenan en el mismo. Cuando entras nuevamente al blog, a esa sección, el set de colores permanece.
    Cada sección del blog tiene sus propios cuatro "Sets personal de colores", cada uno independiente del restoi.

    Tip

    Si vas a emplear esta método y quieres que se vea en toda la página, debes primero dar transparencia a todos los bloques de la sección del blog, y de ahí aplicas la opción al bloque BODY y su complemento FONDO.

    Nota

    - No puedes seguir guardando más colores o eliminarlos mientras esté activo la "Carga Ordenada o Aleatoria".
    - Cuando activas la "Carga Aleatoria" habiendo elegido primero una de las siguientes opciones: Sidebar (Fondo los 10 Widgets), Downbar (Fondo los 3 Widgets), Slide (Fondo de las 4 imágenes) o Sidebar en el Salón de Lectura (Fondo los 7 Widgets), los colores serán diferentes para cada widget.

    OBSERVACIONES

    - En "Navega Directo + Panel", lo que es la publicación, sólo funciona el fondo y el texto de la publicación.

    - En "Navega Directo + Panel", el sidebar vendría a ser el Widget 7.

    - Estos colores están por encima de los colores normales que encuentras en el "Panel', pero no de los "Predefinidos".

    - Cada sección del blog es independiente. Lo que se guarda en Inicio, es solo para Inicio. Y así con las otras secciones.

    - No permite copiar de un estilo o usuario a otro.

    - El color de la ventana donde escribes las NOTAS, no se cambia con este método.

    - Cuando borras el color dado a la sección "Menú" las opciones "Texto indicador Sección" y "Fondo indicador Sección", el código que está a la derecha no se elimina, sino que se cambia por el original de cada uno.
    3 2 1 E 1 2 3
    X
    Guardar - Eliminar
    Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    :     Guardar - Eliminar
    Para guardar, elige dónde, y seguido da click en la o las imágenes deseadas.
    Para dar Zoom o Fijar,
    selecciona la opción y luego la imagen.
    ---------------------------------------------------
    Slide 1     Slide 2     Slide 3




















    Header

    -------------------------------------------------
    Guardar todas las imágenes
    Fijar "Guardar Imágenes"
    Desactivar "Guardar Imágenes"
    Dar Zoom a la Imagen
    Fijar Imagen de Fondo
    No fijar Imagen de Fondo
    -------------------------------------------------
    Colocar imagen en Header
    No colocar imagen en Header
    Mover imagen del Header
    Ocultar Mover imagen del Header
    Ver Imágenes del Header


    Imágenes Guardadas y Personales
    Desactivar Slide Ocultar Todo
    P
    S1
    S2
    S3
    B1
    B2
    B3
    B4
    B5
    B6
    B7
    B8
    B9
    B10
    B11
    B12
    B13
    B14
    B15
    B16
    B17
    B18
    B19
    B20
    H

    OPCIONES GENERALES
    ● Activar Slide 1
    ● Activar Slide 2
    ● Activar Slide 3
    ● Desactivar Slide
    ● Desplazamiento Automático
    ● Ampliar o Reducir el Blog
  • Ancho igual a 1088
  • Ancho igual a 1152
  • Ancho igual a 1176
  • Ancho igual a 1280
  • Ancho igual a 1360
  • Ancho igual a 1366
  • Ancho igual a 1440
  • Ancho igual a 1600
  • Ancho igual a 1680
  • Normal 1024
  • ------------MANUAL-----------
  • + -

  • Transición (aprox.)

  • T 1 (1.6 seg)


    T 2 (3.3 seg)


    T 3 (4.9 seg)


    T 4 (s) (6.6 seg)


    T 5 (8.3 seg)


    T 6 (9.9 seg)


    T 7 (11.4 seg)


    T 8 13.3 seg)


    T 9 (15.0 seg)


    T 10 (20 seg)


    T 11 (30 seg)


    T 12 (40 seg)


    T 13 (50 seg)


    T 14 (60 seg)


    T 15 (90 seg)


    ---------- C A T E G O R I A S ----------

    ----------------- GENERAL -------------------


    ------------- POR CATEGORÍA ---------------




















    --------REVISTAS DINERS--------






















    --------REVISTAS SELECCIONES--------














































    IMAGEN PERSONAL



    En el recuadro ingresa la url de la imagen:









    Elige la sección de la página a cambiar imagen del fondo:

    BODY MAIN POST INFO

    SIDEBAR
    Widget 1 Widget 2 Widget 3
    Widget 4 Widget 5 Widget 6
    Widget 7














































































































    EL BOSQUE ENCANTADO (Fritz Leiber)

    Publicado en octubre 28, 2016
    La oscuridad era rancia como las hojas de un arbusto formalhautiano, acre como un monte rigeliano en llamas, y sin embargo temblaba tenuemente, igual que una de las danzantes casas de los salvajes. Estaba llena de un quisquilloso y débil zumbido, en nada semejante al ronroneo de una herida avispa de la Tierra.

    La maquinaria zumbó floja y brevemente. Una ovalada puerta se abrió en la oscuridad. Se infiltró una suave luz verde, y el singular olor, aromático en este caso, pero de una herbosa acidez, de un planeta nuevo.

    El color verde era dado a la luz por las espinosas ramas o las enredaderas que se deslizaban en entrelazadas formas junto a la entrada. Para los ojos cansados del profundo subespacio, el óvalo de entrelazados y gruesos zarcillos era un asombroso cuadro.

    Una mano humana surgió delicadamente de la oscuridad, adelantándose hacia la verde barrera. Las translúcidas espinas largas como los dedos se estremecieron, se doblaron hacia atrás lentamente, luego batieron; a la distancia del ancho de un pelo, porque la mano se había parado.

    La mano no se apartó, pero se demoró justamente al alcance, acariciando el peligro. Una viva y alegre risa se grabó frente a la herida, gimiente oscuridad.

    «Tenemos que quitar esos endiablados pequeños puñales verdes para salir de los despojos», pensó Elven. «Fue una suerte que estuvieran ahí sin embargo. El efecto amortiguador del bosque de espinos quizás haya sido la fruslería que salvó el espinazo de la lancha espacial, o al menos el mío».

    Luego Elven se enderezó. El susurro detrás de él se plasmó en indistinta habla inglesa alterada por siglos de farfullo, pero todavía esencialmente la misma.

    —Vuelas de prisa, Elven.
    —Más de prisa que ninguno de tus perros de caza —convino tranquilamente Elven sin mirar alrededor, y añadió—: MRL —significando Más Rápido que la Luz.
    —Vuelas lejos, Elven. Decenas de años luz —continuó la voz quejumbrosa.
    —Veintenas —rectificó Elven.
    —Sin embargo te hablo, Elven.
    —Mas no sabes dónde estoy. He salido a una oscura extensión a través del profundo subespacio. Y vuestra radio MRL no puede tomar ninguna posición de la nave espacial. Estás voceando al infinito, Fedris.
    —Y siempre vuelas tan de prisa y tan lejos, Elven —insistió la voz quejumbrosa—, que finalmente has de dar en tierra, y entonces te buscaremos.

    De nuevo Elven rió alegremente. Sus ojos estaban todavía posados en la verde entrada.

    —¡Me buscaréis! ¿Dónde me buscaréis, Fedris? ¿En qué lado de los millones de planetas que alcanza el código de señales? ¿En cuál de los cientos de millones de planetas que están fuera del código?
    —Vuestro planeta nativo está marchito, Elven —la voz quejumbrosa se volvió más débil—. Entre todos los Salvajes, sólo tú atravesaste nuestro cordón.

    Esta vez Elven no hizo observaciones verbalmente. Palpó su cuello y cuidadosamente sacó de un brillante broche de allí una menuda y blanca esfera no mayor que un botón de señora. Manteniéndola como un pequeño tesoro en la ahuecada palma de la mano, la examinó con aire de cavilosa burla. Luego, todavía tocándola como si fuera un temible objeto, la repuso dentro del broche.

    La voz quejumbrosa se había debilitado hasta quedar reducida a un susurro de duendes.

    —Estás solo, Elven. Solo entre el misterio y el terror del universo. Lo desconocido dará contigo, aún antes que nosotros. El tiempo y el espacio y el sino, todos conspirarán contra ti. El azar mismo se…

    La espectral voz de la radio MRL se extinguió mientras la misma potencia restante de la destrozada maquinaria se agotaba del todo. El silencio llenó la rota tripa de la lancha espacial.

    Silencio que fue alegremente quebrado, cuando Elven rió una última vez. ¡Fedris el sicólogo! ¡Fedris el necio! ¿Pensaba Fedris minar mi fortaleza con amenazas de médico hechicero y el poder de la sugestión? ¡Como si un hombre —o una mujer— de los Salvajes pudiera ser inducido en modo alguno a creer en lo sobrenatural!

    No es que no hubiera una sobrenatural calidad suelta en el universo. Elven se recordó a sí mismo sombríamente; una especie de sobrenatural belleza nacida del peligro y la primaria propia expresión. Pero sólo los Salvajes percibían esa sobrenatural condición. No podía ser conocida de las humildes y sumisas hordas del código, las cuales siempre reverenciarían la seguridad y la timidez como la mayor parte de los miembros del código humano —o sociedad— lo han hecho, y aborrecerían a todos los amantes de la belleza y el peligro.

    Lo mismo que habían aborrecido a los Salvajes y de igual modo los habían destruido.

    A todos excepto uno.

    ¿Uno solo, había dicho Fedris? Elven sonrió ocultamente, tocó el broche de su cuello, y se levantó prontamente de un salto.

    Poco después tenía lo que necesitaba de los despojos.

    —Y ahora, Fedris —susurró—, he de efectuar un trabajo de creación —y sonrió—. ¿O quizás debiera decir de recreación?

    Apuntó a la verde entrada la embotada boca de una pistola de chorro. No hubo ningún ruido o fogonazo, pero las verdes ramas temblaron, se ennegrecieron —las espinas desaparecieron— y se transformaron en un flotante polvo fino y oscuro como las cenizas que alfombran la luna de la Tierra. Elven se precipitó a la entrada y, por un momento, estuvo suspendido allí, el pelo amarillo, los labios fríos, los ojos rientes, gallardo como un joven dios —o un adolescente demonio— con la negra túnica recamada de pía uno. Luego se inclinó hacia afuera y apuntó el ultrasónico de la pistola hacia abajo hasta que hubo clarificado un pedazo de terreno del bosque de espinos. Cuando este trabajo de un momento estuvo acabado, descendió ligeramente, el fino polvo subiendo hasta sus rodillas, al impacto.

    Elven soltó el artefacto, se quitó el sudor del rostro con ligereza, riéndose de su creciente exasperación, y miró alrededor al bosque de espinos. No se había alterado un ápice durante las millas que había recorrido. Nuevamente las vítreas espinas y las hojas en forma de lanza y las ramas surgiendo de la rasa y rojiza tierra. No era un distinto planeta lo que se veía. Tampoco había captado la más menuda vislumbre de vida moviente, grande o pequeña, excepto los espinos mismos, que lo «avisaban» cuando quiera que se acercaba demasiado. Como experimento había dejado que uno pequeñito lo pinchara y había escocido terriblemente.

    ¡Qué medio ambiente! ¿Qué sugería, de cualquier modo? ¿Cultivo? O una hierba que saturaba los alrededores de ponzoña, como el pino gigantesco de California, en la Tierra, su leñoso cuerpo. Hizo una mueca al sentir el escalofrío que pasó como un relámpago a lo largo de su espina dorsal.

    Y, si no hubiera vida animal, ¿para qué diablos estaban los abrojos?

    ¡Un bosque ridículo! En su simplicidad, sugiriendo los bosques encantados de los antiguos cuentos de hadas terrestres. ¡Esa idea debiera complacer al médico hechicero Fedris!

    Si siquiera tuviese alguna percepción de la general posición del planeta en que estaba, podría hacer mejores conjeturas acerca de sus otras formas de vida. Los gérmenes de vida ciertamente flotaban por el espacio, de modo que los sistemas solares y hasta regiones de estrellas propendían a tener semejanzas biológicas. Pero había venido demasiado aprisa y con demasiada curiosidad, demasiado aprisa hasta para ver las estrellas, en la más veloz y más extraña lancha de los Salvajes, para saber dónde estaba.

    O para que Fedris supiera dónde él estaba, se recordó a sí mismo.

    O para que algún sistema de aviso de aproximación penetrante en lo profundo del espacio, suponiendo que hubiera uno en este planeta, hubiese localizado su llegada. Por lo que concernía a eso él mismo no había previsto su llegada. Había habido sólo el brusco ascenso del subespacio, el siniestro y negro confeti del enjambre de aerolitos, el choque, la violenta caída de la destrozada lancha espacial, asiéndose al planeta más cercano.

    Debiera poder considerar su posición cuando llegara la noche y pudiera ver las estrellas.

    Es decir, si la noche llegaba en modo alguno a este planeta. O si esa alta niebla se disipaba alguna vez.

    Examinó la brújula. La aguja del primitivo, pero útil instrumento se mantenía fiel. Al menos este planeta tenía polos magnéticos.

    Y probablemente tenía noche y día, para sostener la vida vegetal y una temperatura tan suave.

    Una vez que saliera de este bosque, podría discurrir algo. ¡Que le dieran sólo ciudades! ¡Una ciudad!

    Metió la brújula en su ropón, acariciando el broche del cuello de un modo extrañamente afectuoso, casi reverente.

    Miró a las entrelazadas ramas al frente. Sí, era exactamente como esos bosques de hadas que cuestan a los caballeros de los libros de cuentos tanto trabajo de tajo con sus espadas de dos usos.

    Era más fácil con una pistola de chorro; y tenía material para despejar veintenas de millas de senda en el depósito de cargas ultrasónicas.

    Echó un vistazo atrás al ligeramente torcido túnel que había abierto.

    Por entre las pizarreñas cenizas de su suelo estaban ya brotando juguetones retoños verdes.

    Hizo funcionar la pistola.

    Las ramas eran tan gruesas en su extremidad que el claro cogió a Elven de sorpresa. En un momento estaba observando una enredada esterilla verde que se ennegrecía bajo el invisible rayo del arma. En el momento siguiente, había salido, no a la tierra de las hadas, sino a la clase de lugar donde primero fueron contados los cuentos de hadas.

    El claro tenía aproximadamente media milla de diámetro. Alrededor de él el bosque de espinos formaba un círculo. Un riachuelo salía murmurando del ponzoñoso verdor a un centenar de pasos a su derecha y atravesaba el claro por un bajo valle. Al otro lado del río se alzaba una pequeña colina.

    En la ladera había un desigual grupo de grises casas. De una de ellas subía un lápiz de humo. Afuera había un par de carros y unos primitivos aparatos agrícolas.

    Excepto por el espacio ocupado por las casas, el valle estaba bajo intenso cultivo. La colina estaba sembrada a regulares intervalos de arbolejos que llevaban racimos de fruta roja y amarilla. En otra parte había hileras de matosas plantas y campos de grano ondeantes con la brisa. Toda vegetación sin embargo, parecía terminar aproximadamente a una yarda del bosque de espinos.

    Hubo un lastimero mugido. Alrededor de la ladera aparecieron media docena de reses. Un hombre con una sencilla blusa las estaba arreando despacio hacia las casas. Un menudo animal, quizás un gato, salió de la casa del humo y anduvo con el ganado, rozando las patas de las reses. Una joven se paró a la puerta después de que saliera el gato y estuvo observando con los brazos cruzados.

    Elven embebía la atmósfera de paz y tierra fértil, sintiéndose como un hombre de un antiguo paraje. Paisajes tan idílicos como este debieron haber sido los de la Tierra en tiempos pasados. Sentía aflojarse sus tirantes músculos.

    Otra joven salió de un matorral de árboles justamente al frente y se paró, mirándole con asombro. Llevaba una verdosa blusa de reblandecidas, hiladas y tejidas fibras vegetales. Elven percibió en ella cierto atractivo, medio sofisticado, medio primitivo. Era como una de las muchachas de los Salvajes con un sencillo trate de deporte. Pero su rostro era el de una niña espantada.

    Elven se dirigió hacia ella a través del crujiente grano. La muchacha cayó de rodillas.

    —Usted… usted —susurró con dificultad. Luego, más ligeramente, en perfecto inglés—: No me dañe, señor, Acepte mis respetos.
    —No la dañaré, si responde a mis preguntas convenientemente —repuso Elven, aceptando la ventaja de posición que parecía haberle sido dada—. ¿Qué lugar es este?
    —Es el Lugar —respondió simplemente la joven.
    —Sí, pero ¿qué lugar?
    —Es el Lugar —repitió la muchacha con temblor—. No hay otros.
    —Después, ¿de dónde vengo? —preguntó Elven.
    —No sé —los ojos de la muchacha se dilataron un poquito, con expresión de terror. Era pelirroja y realmente muy bella.
    —¿Qué planeta es este? —dijo Elven, frunciendo el ceño.
    —¿Qué es un planeta? —inquirió la joven, mirándole perplejamente.

    «Quizás iba a haber dificultades de lenguaje al fin y al cabo», pensó Elven.

    —¿Qué sol? —preguntó.
    —¿Qué es un sol?
    —¿No se va nunca ese chisme? —dijo Elven, señalando hacia arriba impacientemente.
    —¿Quiere usted decir —balbuceó temerosamente la muchacha—, si el cielo se va alguna vez?
    —¿El cielo es siempre el mismo?
    —A veces se despeja. Ahora viene la noche.
    —¿A qué distancia está el extremo del bosque de espinos?
    —No comprendo —respondió la joven. Luego su fija mirada se deslizó más allá de Elven, hacia el desigual pasillo abierto por el artefacto. Su expresión de miedo se había hecho más intensa, había en ella una pincelada de horror—. Usted ha vencido a las agujas venenosas —susurró. En seguida se humilló hasta que su suelto cabello rojo tocó los bermejos retoños del grano—. No me haga daño, omnipotente —dijo, con sonidos entrecortados.
    —No puedo prometer eso —le dijo brevemente Elven—. ¿Cómo se llama usted?
    —Séfora —susurró la joven.
    —Muy bien, Séfora. Condúzcame hacia su gente.

    La joven se levantó de un salto y retrocedió, rápida como una liebre, hacia los edificios de la hacienda.

    Cuando Elven llegó a la casa de cuyo tejado ascendía el humo, con el pausado paso propio de su rango de dios o todopoderoso señor, o sea lo que fuere aquello por lo que la muchacha lo había tomado, la comisión de bienvenida se había ya formado. Dos mozos inclinaron las rodillas ante Elven, y la joven que había visto parada a la puerta le ofreció un platel de fruta anaranjada y morada. El Vencedor de las Agujas Venenosas cató este refrigerio, luego lo apartó con una rápida seña de aprobación con la cabeza, aun cuando lo encontró delicioso.

    Cuando entró en la tosca alquería fue recibido por la sonrojada Séfora, que llevaba manteles y un humeante cuenco. La joven, tímidamente, señaló a sus botas. Elven le enseñó el ardid de las ataduras y unos momentos después estaba tendido sobre un lecho de corambre relleno de hojas aromáticas, mientras que Séfora respetuosamente le lavaba los pies.

    La muchacha tenía unos veinte años, descubrió Elven hablándole ociosamente, no preocupándose de importante información por el momento. Su vida era de trabajo de hacienda y sencilla diversión. Uno de los jóvenes —Alfors— recientemente se había hecho su compañero.

    Afuera el grisáceo cielo se estaba oscureciendo rápidamente. El otro joven, al cual Elven había visto antes arrear el ganado y que respondía al nombre de Kors, ahora traía brazadas de nudosa leña, parte de la cual echó al flaco fuego, de suerte que crepitó con vivos matices amarillos y rojos. Mientras que Tulya —la compañera de Kors— se ocupaba cerca en trabajo que implicaba perfumes para lavados de la boca.

    La atmósfera era hogareña, aun cuando algo tensa. Al fin y al cabo, Elven se recordó a sí mismo, no se tiene a un dios para la cena todas las noches. Pero después de una comida de estofado de carne, pan recién cocido, conserva^ de fruta, y un vino claro, sonrió con aire de aprobación y la atmósfera pronto se hizo más festiva, en verdad bastante alegre, Alfors cogió un arpa encordada con cuerda de tripa y cantó sencillas alabanzas a la naturaleza, si bien después Séfora y Tulya danzaron. Kors mantenía el fuego vivo y el vaso de Elven lleno, aunque una vez desapareció por algún tiempo, evidentemente para cuidar de los animales.

    Elven se avivó. Esta rústica gente débilmente se asemejaba a su propia raza de Salvajes. Parecían tener una pizca de ese temerario y estático espíritu tan aborrecido por la sumisa gente del código. (Sin embargo poco después la semejanza se hizo tan fuerte que resultaba demasiado penosa, y con un imperioso gesto Elven moderó el alborozo de ellos).

    Mientras tanto, por observación y preguntas, estaba averiguando rápidamente, aun cuando lo que averiguaba era asombroso más bien que útil. Estas cuatro jóvenes personas eran los únicos vecinos de su comunidad. No conocían otra cultura que la suya propia.

    Nunca habían visto el sol o las estrellas. Evidentemente éste era un planeta cuyos centros de rotación y de revolución alrededor del sol eran los mismos, de modo que el clima era siempre uniforme en todas las latitudes, la presente localidad estando bajo una faja de nubes. Más tarde podría comprobar esto, se dijo a sí mismo, determinando si los días y las noches eran siempre de igual duración.

    Lo más extraño de todo, las dos parejas nunca habían estado al otro lado del claro. El bosque de espinos, que imaginaban como extendiéndose hasta el infinito, era una barrera que estaba fuera de su alcance quebrantar. Los incendios, le explicaron, eran fuertes obstáculos para ello. Sus hachas más cortantes se embotaban rápidamente. Y ellos tenían un terrible miedo a los espinos diabólicamente sensibles.

    Todo esto sugería un claro orden de preguntas.

    —¿Dónde están sus padres? —Elven preguntó a Kors.
    —¿Padres? —La frente de Kors se arrugó.
    —¿Quiere usted decir los relucientes? —interpuso Tulya. Parecía estar triste—. Se fueron.
    —¿Relucientes? —inquirió Elven—. ¿Personas como ustedes mismos?
    —Oh, no. Seres de metal con ruedas por pies y largos y expertos brazos que se doblaban en todas partes.
    —Siempre he deseado que yo estuviera hecha de lindo y brillante metal —comentó ansiosamente Séfora—, con ruedas en lugar de feos pies, y una dulce voz que nunca se alterara, y una mente que lo comprendiera todo y nunca perdiera los estribos.
    —Nos explicaron cuando se fueron por qué tenían que hacerlo —continuó Tulya—. Para que nosotros pudiéramos vivir por nuestras propias fuerzas tan sólo, como debieran todos los seres. Pero los queríamos y siempre lo hemos sentido.

    No se podía huir de ello, juzgó Elven después de hacer un accidental uso de sus facultades de exploración de la mente para comprobar la veracidad de las respuestas. Estas cuatro personas, en efecto, habían sido educadas por robots de alguna clase. Pero ¿por qué? Se le ocurrió una docena de fantásticas e indemostrables posibilidades. Recordó lo que Fedris había dicho sobre el misterio del universo, y sonrió torcidamente.

    Luego fue su vez contestar preguntas, vacilantes y despavoridas.

    —Soy un ángel negro de lo alto —respondió sencillamente—. Cuando Dios creó el universo juzgó que sería un lugar un poco aburrido si no hubiera unas cuantas almas en él dispuestas a correr todos los riesgos y arrostrar todos los peligros. Por tanto aquí y allá entre las infinitas multitudes de sumisos ángeles, parcamente, introdujo una clase salvaje, de suerte que siempre hubiera algunas almas que tascaran el freno y saltaran por encima de cualesquiera vallas. Sí, y abatieran esas vallas también, abandonando a los sumisos rebaños a las tinieblas con sus bellezas y peligros desconocidos —sonrió alrededor maliciosamente, la luz del fuego echando extraños reflejos sobre sus labios y mejillas—. Lo mismo que yo he abatido la valla de espinos.

    Afuera estaba ya muy oscuro. La jarra del vino estaba casi vacía. Elven bostezó. Inmediatamente se hicieron preparativos para su reposo. El gato surgió del hogar y vino a restregar las piernas de Elven.

    El primer pálido brillo del alba despertó a Elven y él se salió de la cama tan silenciosamente que no despertó a nadie, ni siquiera al gato. Por un momento vaciló en la grisácea habitación cargada del olor de ascuas y las heces del vino. Se le ocurrió que sería algo agradable pasar la vida aquí como un dios selvático adorado por ninfas y rústicos.

    Pero luego su mano tocó su cuello, y movió la cabeza. Este no era un lugar para efectuar él su misión; por un lado, no había bastante gente. Necesitaba ciudades. Con una última mirada a sus anfitriones arrebujados en las mantas —el cabello de Séfora en este mismo instante había empezado a volverse rojo con la creciente luz—, salió.

    Como había esperado, el bosque de espinos hacía mucho que había reparado la rotura que él hiciera cerca del río. Siguió la dirección contraria y ladeó la colina hasta que llegó a la verde pared al otro lado. Allí, examinando la brújula, desvió su dirección de la destrozada lancha espacial. Luego empezó a hacer funcionar la máquina fulminante.

    A primera hora de la tarde —discerniendo el tiempo transcurrido por la cambiante intensidad de la luz— había hecho una docena de millas y estaba pensando que quizás debiera hacer permanecido cerca de los despojos el tiempo suficiente para intentar apañar una palanca. ¡Si siquiera pudiese subir un centenar de pies para ver lo que le iba a acaecer —si es que algo iba a ocurrirle— a este ridículo bosque!

    Porque todavía le hacía frente de un modo inalterable, como alguna mágica vegetación de un libro de cuentos de hadas. Las vítreas espinas todavía se doblaban hacia atrás y batían todas las veces que él se acercaba demasiado.

    Y detrás de él los verdes retoños aún surgían vigorosamente a través del pizarreño polvo.

    «Qué transición», pensó, «del vuelo a una velocidad mayor que la de la luz en una lancha espacial, a este arrastramiento de gusano». Suficiente para aburrir a un Salvaje hasta la desesperación, para hacerle pensar dos veces respecto a los simples encantos de una vida pasada como un dios selvático.

    Pero luego se desató el broche del cuello y sacó la menuda esfera blanca. Su sonrisa se avivó con un destello de inspiración mientras contemplaba fijamente el brillante objeto que mantenía en la palma de la mano.

    Solo uno de los Salvajes había escapado de su sitiado planeta, había dicho Fedris.

    ¿Qué sabía Fedris?

    Sabía que antes que Elven llegara a la lancha espacial, habia atravesado con disfraz los formidables cordones del código. Que en el curso de esa huida había por dos veces sido registrado tan a fondo que habría sido un milagro si pudiera haber ocultado algo más que esta menuda plancha.

    Pero esta menuda plancha bastaba.

    Dentro de ella estaban todos los Salvajes.

    Los primitivos humanos con frecuencia habían sido fascinados por la idea de un hombre invisible. Sin embargo no se les habia ocurrido que el hombre invisible siempre ha existido, que cada uno de nosotros empieza como hombre invisible: la simple célula de la cual todo humano se desarrolla.

    Aquí en el interior de esta blanca plancha estaban los elementos genéticos de todos los Salvajes, los cromosomas y los genes de cada individuo. ¡Aquí estaban el feroz Vlana, el fanfarrón Nar, el riente Forten! ¡Ellos y un billón de otros! Los idénticos gemelos de toda postrera persona destruida con el planeta de los Salvajes, esperando sólo ser encerrados en adecuadas células de crecimiento desnucleadas y recibir nutrición de alguna apropiada madre. Todo girando lindamente en la palma de la mano de Elven.

    Suficiente por el lado de la herencia física.

    Y en cuanto a la herencia social, ahí estaba Elven.

    Luego todo ello podría volver a empezar. Otra vez los Salvajes podrían soñar sus formidables sueños de lanzarse a la conquista del Cosmos y arrostrar sus bellos peligros. Otra vez podrían intentar producir, si lo preferían, esos gigantescos átomos, semillas de nuevos universos, a causa de los cuales los del código los habían destruido. Muy atrás en la Edad de los Albores los físicos habían contemplado el único y gigante átomo del cual se había formado el entero universo, y ya era hora de ver si se podían crear más de tales átomos con energía sacada del subespacio. ¿Y quiénes eran Fedris y Elven y los del código para decir si los nuevos universos podían o no —o debieran o no— destruir al viejo? ¿Qué importaba hasta qué punto los sumisos rebaños temieran a esos preciosos huevos de creación submicroscópicos?

    Todo ello tenía que volver a empezar, resolvió Elven.

    Sin embargo, era tanto la percepción de los renuevos de espinos que surgían de debajo de sus pies, como su firme resolución, lo que le impulsaba.

    Una hora después su máquina disgregó una maraña de ramas que tenía sólo cielo detrás de ella. Elven entró en un claro de media milla de diámetro. Justamente al frente un murmurante riachuelo atravesaba un pequeño valle, donde ondeaba bermejo grano, Al otro lado del valle había una menuda colina cubierta de huerto. En la ladera de acá, bajas y grises casas se agrupaban desigualmente. De una ascendía un hilo de humo. Un hombre rodeó la colina, conduciendo ganado.

    La segunda reflexión de Elven fue que algo le debía haber ocurrido a la brújula, alguna fuerza la debió haber estado desviando invariablemente, para hacerlo retroceder en un círculo.

    Su primer pensamiento, que había reprimido prontamente, había sido que ahí estaba el misterio que Fedris le ofreciera, algo sobrenatural del mundo de los antiguos cuentos de hadas.

    Y como si también al tiempo se lo hubiera hecho retroceder en un círculo —Elven reprimió esta idea aún más prontamente— vio a Séfora parada en el familiar soto de árboles justamente al frente.

    Elven voceó su nombre y corrió hacia ella, un poco sorprendido de su alegría de volverla a ver.

    Séfora le vio afeó la mano y rápidamente le tiró algo. Elven hizo un movimiento para pararlo frente a su pecho, creyendo que era una brillante fruta.

    Se apartó de un brinco escasamente a tiempo.

    Era un reluciente cuchillo de hoja perversamente maciza.

    —¡Séfora! —gritó.
    —¡Alfors! ¡Kors! ¡Tulya! —vociferó la pelirroja ninfa, volviéndose y huyendo como una liebre.

    Elven corrió tras de ella.

    Fue justamente detrás de la primera dependencia accesoria que se metió en la emboscada, la cual parecía haber sido organizada de repente en una antigua carpintería. Alfors y Kors llegaron rugiendo hasta Elven desde el establo; el uno blandiendo un grueso mazo, el otro una larga sierra, Mientras que de la puerta de la cocina, más cerca, Tulya acometía con un hacha.

    Elven agarró su muñeca y los dos se bambolearon con la fuerza del impulso. De mala gana luego —aborreciendo su acción y sólo obedeciendo a la necesidad— sacó la fulminante pistola para un rápido disparo, sin apuntar, al más cercano de los otros.

    Kors se tambaleó, levantó la mano hasta sus ojos y se quitó el mortífero polvo. Ahora Alfors era el más inmediato. Elven podía ver los dientes de una pulgada de largo de la vibrante y cantante hoja de la sierra. En seguida la reluciente extensión inferior de ella se disolvió junto con la mano de Alfors, mientras que la mitad superior escapaba más allá de su cabeza chillando.

    Kors avanzó, gritando de dolor, blandiendo el mazo ciegamente. Elven lo lanzó abierto de brazos y piernas al suelo con un disparo de plena intensidad que hizo de su pecho un pequeño volcán de polvo, y batió y derribó a Alfors; se agachó justamente a tiempo en el momento en que el hacha, trasladada a la otra mano de Tulya, descendía sobre su cuello. Cayeron juntos en un montón, la fulminante pistola junto al cuello de Tulya.

    Quitándose frenéticamente la fina ceniza gris del rostro, Elven levantó la vista y vio a Séfora que corría hacia él de prisa. Su flameante cabello rojo y su lívido rostro estaban precedidos por las tres relucientes puntas de una horquilla.

    —¡Séfora! —gritó Elven, y trató de levantarse; pero Alfors había caído contra sus piernas—. ¡Séfora! —gritó otra vez de un modo suplicante, pero la joven no pareció oírle y su rostro mostraba sólo odio.

    Por tanto Elven hizo funcionar la pistola, y puntas de horquilla y rostro y cabello se disiparon en una nube gris. El descabezado cuerpo de la muchacha le acometió con un extraño saltito mientras la embotada horquilla enterraba su cabo en el suelo. La mucha pegó y se revolvió por dos veces. Luego todo quedó muy tranquilo, hasta que una vaca mugió inquietamente.

    Elven se arrastró de debajo de lo que quedaba de Alfors y se levantó temblorosamente. Tosió un poquito, después con una repugnancia un tanto horrorizada salió corriendo de la sedimentada nube gris. Tan pronto como estuvo fuera al aire puro vació los pulmones varias veces, tembló un poquito, y sonriendo tristemente a las cuatro inmóviles figuras sobre las cuales el polvo se estaba posando, se puso a resolver las cosas.

    Evidentemente alguna fuerza magnética había desviado la aguja de la brújula, haciéndolo andar a él en un círculo. Quizás uno de los polos magnéticos de este planeta estaba en la inmediata localidad. Por supuesto este no era un ordinario clima polar o un regular ciclo de día y noche; sin embargo, no había ninguna razón por la cual los centros de magnetismo y rotación de un planeta no pudieran estar muy alejados el uno del otro.

    El comportamiento de sus anfitriones de la noche era un problema más difícil. Parecía increíble que su simple desaparición, aun concediendo que lo juzgaran ser un dios, los hubiera ofendido tanto que se hubiesen vuelto asesinos. Los antiguos pueblos de la Tierra habían destruido los dioses y los símbolos de las deidades, por supuesto, pero eso había sido un asunto de cauto ritual, no un repentino frenesí de sangre.

    Por un momento se estuvo preguntando si Fedris había de algún modo envenenado sus mentes contra él, si Fedris poseía algún medio MRL que hubiera hecho al entero universo alérgico para Elven. Pero eso, lo reconocía, no era más que una morbosa fantasía, una especie de desabrido humor.

    Quizás los agradables rústicos habían estado sujetos a alguna clase de locura cíclica.

    Se encogió de hombros, luego entró resueltamente en la casa y se preparó una comida. Cuando estuvo lista el cielo se había oscurecido. Hizo un gran fuego y empleó algún tiempo construyendo con materiales de su burujo, una pequeña brújula giratoria. Trabajaba con una absorta destreza, como uno que talla un juguete para un niño. Advirtió que el gato le observaba desde la entrada, pero huyó cuando lo llamó y rechazó el señuelo de la comida que Elven había puesto sobre el hogar. Elven levantó la vista hacia las botijas de vino colgantes de las vigas, pero no las tocó.

    Poco después se colocó sobre el lecho que Kors y Tulya habían ocupado la noche anterior. La habitación se volvía oscura a medida que el fuego se extinguía. Logró mantener sus pensamientos alejados de lo que yacía afuera, excepto que una vez o dos su mente imaginó el extraño saltito que el cuerpo de Séfora había dado inclinándose sobre él. En la entrada, los ojos del gato centelleaban.

    Cuando se despertó era pleno día. Prontamente juntó sus cosas, agregando un poco de fruta a su burujo. El gato se apartó rápidamente mientras Elven trasponía la puerta. Elven no miró al escenario de la lucha de ayer. Podía oír zumbar las moscas allí. Atravesó la colina por donde había entrado en el bosque de espinos la mañana anterior. Los abrojos, con su ridícula insistencia de los cuentos de hadas, habían reparado la abertura que Elven había hecho No había señales de ella. Abrió la llave del menudo motor de la brújula giratoria, apuntó la fulminante pistola a la verde pared y empezó a polvorear.

    Era una tarea tan monótona como siempre, pero la emprendió con un nuevo y casi ceñudo vigor. A regulares intervalos examinaba la brújula giratoria y volvía a apuntar cuidadosamente a lo largo del pasillo verde de retoños y recto como una flecha que se estrechaba con más perspectiva. ¡Era extraña la rapidez con que crecían esos espinos!

    En su mente repasó su plan de acción de largo alcance. Podía contar, debía esperarlo, con la libertad de una generación fuera del dominio de Fedris y las fuerzas del código. Durante ese tiempo que tenía que encontrar una gran civilización, preferentemente urbana, o con un gran número de la conveniente especie de animales domésticos, y hacerse jefe absoluto de ella, probablemente estableciendo una nueva religión. Luego debían disponerse las adecuadas ayudas para la crianza. Después habían de separarse las simientes de los Salvajes encerradas en el broche de su cuello —tantas como lo permitieran las facilidades para ello— y colocarse dentro de las madres vivientes o no vivientes. Probablemente vivientes. Y probablemente no humanas; eso pudiera ofrecer demasiadas dificultades sociológicas.

    Le divertía pensar en los Salvajes renacidos de ovejas o cabras, o quizás de algunos animales rumiantes o herbívoros totalmente extraños, y su mente evocó un gracioso cuadro de sí mismo conduciendo sus raros rebaños por montañosos pastos, tocando el caramillo como el antiguo dios Pan, hasta que se dio cuenta de que su mente había representado a Séfora y Tulya danzando a lo largo cerca de él y quebró el cuadro mental con vivo desagrado.

    Luego vendría el asunto de la crianza y educación de los Salvajes. Su hipotética comunidad de subordinados cuidaría de aquéllos; estos últimos tenían todos que obrar de acuerdo con su propio cerebro, recibiendo suplementaria instrucción de la biblioteca de microcintas educacionales de la destrozada lancha espacial. Robots de alguna clase serían una absoluta necesidad. Recordó la conversación de anteanoche, la cual había indicado que había o había habido robots en este planeta, y se perdió su sutil especulación, aunque no olvidando la observación de la brújula giratoria.

    Así se pasó lentamente el día para Elven, caminando hora tras hora detrás de una máquina pulverizadora dentro de una nube de polvo, hasta que estuvo casi hipnotizado a pesar de la vigilancia de sí mismo y una multitud de inquietantes recuerdos caprichosamente atestaba su mente: la oscuridad del subespacio; los ojos del gato en la entrada, la percepción de la piel del animal contra el tobillo; el polvo alzándose en olas del cuello de Tulya; el saltito que el cuerpo de Séfora había dado inclinándose sobre él, casi como si hendiera una invisible ola en el aire; una imaginaria vista del destruido planeta de los Salvajes, su lado oscuro encendido con elementos radioactivos visibles hasta en el profundo espacio; el zumbido semejante al de una avispa en la destrozada lancha espacial; el misterioso susurro de Fedris: «Lo desconocido dará contigo, Elven…».

    La brecha del bosque lo cogió de sorpresa.

    Entró en un claro de media milla de diámetro. Justamente al frente un riachuelo atravesaba murmurando un pequeño valle ondeante de bermejo grano. Al otro lado habla una menuda colina cubierta de huerto frente a cuya ladera en la parte inferior, grises casas se agrupaban desigualmente. De una ascendía una cinta de humo.

    Apenas sintió que las espinas le pincharan mientras retrocedía hacia el interior de la maraña, si bien el estímulo que daban bastó para enviarlo hacia adelante otra vez unos cuantos pasos. Pero tales bagatelas no hacían ningún efecto en la furiosa actividad de su mente. Debía, se dijo a sí mismo, enfrentarse con una fuerza que falseaba una brújula giratoria tanto como un imán, que hasta falseaba las líneas visuales del espacio.

    O bien estaba realmente en un mundo de cuento de hadas donde por más que uno intentara escapar a través de un bosque encantado, era siempre llevado atrás a la noche hacia…

    Imaginó que podía ver una negra nube de moscas cerniéndose junto a las bajas y grises casas.

    Y entonces percibió un crujido en el soto de árboles en frente mismo y oyó una voz horriblemente familiar que gritaba con excitación:

    —¡Tulya! ¡Ven aprisa!

    Elven empezó a temblar. Luego sus fibrosos músculos, obedeciendo a algún fortuito estímulo, lo lanzaron hacia adelante sin propósito, y lo pararon de un modo igualmente repentino. Hundido hasta los muslos en la fronda de grano, miró alrededor ansiosamente. En seguida su mirada se fijó en un movimiento del grano iluminado por la luz del crepúsculo; dos cursos de movimiento, que agitaban el grano pero no mostrando nada más. Dos cursos de movimiento que se abrían camino desde el soto, hacia Elven.

    Y entonces de repente Séfora y Tulya aparecieron delante de él, saliendo de su escondrijo como niñas traviesas, los ojos fulgurando, las bocas sonriendo con un perverso gozo. El cuello de Tulya, que ayer había visto disolverse en ondas de polvo, se combaba de risa. El rojo cabello de Séfora, que había visto disiparse en una nube gris, se agitaba con la brisa.

    Elven trató de retroceder hacia el interior del bosque pero las dos jóvenes lo interceptaron y lo agarraron con risotadas. Al contacto de sus manos toda fuerza huyó de Elven, y le parecía que sus huesos se estaban transformando en una helada masa blanda mientras las muchachas lo arrastraban a través del grano con tropiezos.

    —No le haremos daño —le aseguró Tulya entre picarescas carcajadas.
    —Oh, Tulya, ¡pero tiene miedo!
    —Algo lo ha hecho desdichado, Séfora.
    —¡Necesita cariño, Tulya!

    Y Elven sintió que los fríos brazos de Séfora rodeaban su cuello y los húmedos labios apretaban los suyos. Sofocándose, trató de separarse, y los labios barbotaron más risa. Cerró los ojos estrechamente y empezó a sollozar.

    Cuando después los abrió, estaba parado cerca de las grises casas, y alguien le había puesto coronas de flores alrededor del cuello y tiznado la barbilla con fruta: Alfors y Kors habían venido, y la totalidad de los cuatro estaban danzando bulliciosamente en derredor de él entre dos luces, de la mano, riendo, riendo.

    Luego Elven rió también, más y más fuerte; los brillantes ojos de los otros lo animaron, y empezó a dar vueltas y más vueltas dentro del giratorio círculo, mientras que los otros expresaban con gestos su alegría por su compañerismo. Y entonces Elven levantó su máquina rociadora, la hizo funcionar, y siguió dando vueltas hasta que el círculo de los otros reidores fue sólo un creciente anillo de polvo. Después, todavía riendo, corrió por la colina, un gato pasando velozmente a su lado, hasta que llegó a una espinosa pared. Cuando sus manos y su rostro se estuvieron hinchando por las punzadas, se acordó de levantar algo que había estado sosteniendo con la mano y tocar un botón de su parte superior. Inmediatamente entró en una nube de polvo, cantando.

    Toda la noche caminó y cantó, parando sólo para cargar el arma de nuevo con un alegre automatismo, o para sacar de su burujo otra lámpara de luz fría, que revelaba el pequeño mundo de verdes espinos y motas de polvo alrededor de él. Mayormente cantó un viejo lied centauriano que decía:

    Descenderemos por entre las estrellas, Deborah mía.
    Descenderemos por entre las madejas de luz.
    Y te besaré otra vez de noche.


    Sólo que algunas veces cantaba Séfora en lugar de Deborah y mataré en lugar de besaré. A veces le parecía que era seguido por cabras y ovejas cabriolantes y monstruos extraños que eran realmente sus hermanos y hermanas. Y otras veces danzaban a lo largo cerca de él dos ninfas, una pelirroja. Cantaban con él en agudas y melodiosas voces y le sonreían picarescamente. Hacia la mañana se sintió fatigado; desató el lío de su espalda y lo tiró; y más tarde soltó algo de su cuello y tiró eso, también.

    A medida que el cielo palidecía por entre las ramas, las ninfas y las bestias desaparecían y Elven recordó que él era alguien peligroso e importante, y que verdaderamente le había ocurrido algo del todo imposible. Pero que si realmente podía arreglárselas para resolver las cosas…

    El bosque de espinos terminó. Elven entró en un claro de media milla de diámetro. En frente mismo un río atravesaba borboteando un pequeño valle. Al otro lado habia una colina cubierta de huerto. Bermejo grano ondeaba en el vane. En la parte inferior de la ladera bajas y grises casas se agrupaban desigualmente. De una ascendía una delgada cinta de humo.

    Y hacia él, atravesando flojamente el grano a zancadas, venía Séfora.

    Elven gritó de un modo horripilante y apunto la fulminante máquina Pero la distancia era demasiado grande. Solo una faja de grano que se extendía a medio camino de Séfora voló hecha polvo. La joven se volvió y corrió hacia las casas de prisa. Elven la siguió, el arma todavía apuntada y la hizo funcionar a plena potencia, corriendo furiosamente a lo largo de la senda de polvo, atravesando las grises nubes con impetuosos saltos.

    La senda de polvo se acercaba más y más a Séfora, hasta que casi le lamió los talones. La muchacha entró precipitadamente en un espacio entre dos casas.

    Luego algo se estrechó como una culebra alrededor de las rodillas de Elven, y mientras él se inclinaba hacia adelante otra cosa se estrechó alrededor de la parte superior de su cuerpo, arrojando sus codos contra sus costados. El arma fulminante se escapó de su mano mientras él se daba un tope contra el suelo.

    Después estaba yaciendo de espaldas, jadeante, y a través de la adelgazada nube de humo Alfors y Kors le estaban mirando mientras enrollaban los lazos más y más apretadamente alrededor de él, liándolo.

    —¿Estás bien, Séfora? —oyó decir a Alfors.
    —Sí. Déjame verle.

    Y entonces el rostro de Séfora apareció a través de la nube de polvo y miró al suyo con fría curiosidad, su rojo cabello rozándole la mejilla. Elven cerró los ojos y gritó.


    * * *

    —Todo ello fue muy sencillo y no hubo, por supuesto, absolutamente nada de sobrenatural —aseguró el director del Centro de Investigación Humana a Fedris, tomando un sorbo de suave vino magallánico del vaso cerca de su codo—. Elven simplemente marchó en línea recta.

    Fedris frunció el ceño. Era un hombre bajo de estatura, con un aire preocupado que el más eficaz psicoanálisis no había podido extirpar.

    —Por supuesto, la Galaxia le está sumamente agradecida por apresar a Elven. No imaginábamos que hubiera llegado tan lejos como las Magallánicas. No se puede decir qué horrores quizás hayamos esquivado…
    —No merezco buena fama —le dijo el director—. Todo ello fue pura casualidad, y también el asunto del colapso nervioso de Elven. Por supuesto, usted había preparado el terreno ahí insinuándole que lo sobrenatural pudiera tomar parte en ello.
    —Eso fue meramente una vacía amenaza, nacida de la desesperación —interrumpió Fedris, poniéndose un poquito colorado.
    —Sin embargo, ello preparó el terreno. Y entonces Elven tuvo la endiablada desdicha de aterrizar justamente en el centro de nuestro proyecto en la Magallánica 47. Y eso, reconozco, pudiera bastar para asustar a cualquiera.
    —Exactamente, ¿qué es su proyecto? —dijo Fedris, levantando la vista—. Todo lo que sé es que es más bien algo que ha de mantenerse especialmente secreto.
    —La comprensión científica del comportamiento humano siempre ha presentado extraordinarias dificultades —el director se reclinó en el sillón—. Desde la Edad de los Albores los hombres han querido analizar sus problemas sociales del mismo modo que analizan los problemas de física y química. Han querido saber exactamente cuáles causas producen exactamente cuáles efectos. Pero un gran obstáculo los ha vencido siempre.
    —La falta de controles —dijo Fedris, con una seña afirmativa.
    —Justamente —convino el director—. Con ratas, digamos, sería fácil. Se pueden tener dos familias de ratas, o un centenar; cada familia con idéntica herencia, cada una en un idéntico medio ambiente. Luego se puede variar un factor de una familia y observar los resultados. Y cuando se consiguen resultados se puede confiar en ellos, porque la otra familia es el control, mostrando lo que ocurre cuando no se varía el factor.
    —¿Quiere usted decir…? —inquirió Fedris, mirándole con asombro.

    El director asintió.

    —En la Magallánica 47 estamos fomentando esa misma clase de trabajo, no con ratas, sino con seres humanos. Las jaulas son claros de media milla con clima, terreno, plantas y animales idénticos; todo idéntico hasta el más menudo detalle. Las rejas de las jaulas son los espinos, los cuales nuestros botánicos desarrollaron especialmente al propósito. Los huéspedes de las jaulas —los animales experimentales humanos— son gemelos idénticos, aunque centillizos se acercaría más a la justa palabra. Idéntica educación está asegurada para cada grupo por el servicio de amas y mentores robots, destinados a efectuar siempre la misma uniforme rutina. Estos robots son sacados cuando los miembros del grupo están suficientemente maduros para nuestros fines. Todas nuestras experiencias son, por supuesto, completamente secretas; y también intermitentes, lo cual tuvo la infortunada consecuencia de permitir que Elven hiciera algún serio daño antes que fuese capturado.

    »¿Vislumbra usted la estructura, ahora? En el bosque de espinos en el cual Elven cayó había aproximadamente un centenar de idénticos claros establecidos en idénticos intervalos. Cada claro se parecía exactamente al otro, y cada uno contenía una Séfora, una Tulya, un Alfors y un Kors. Elven creía que estaba marchando en un círculo, pero realmente estuvo yendo en línea recta. Cada tarde era un claro diferente a que llegaba. Cada noche encontraba a una nueva Séfora.
    »Cada grupo con que daba era idéntico excepto por un factor —el factor que estábamos variando— y eso tenía por consecuencia hacerlo un poquito más espantoso para él. Usted sabe, con esos grupos estábamos haciendo por casualidad un experimento para determinar las causas de las normas de comportamiento humanas para con extraños. Habíamos hecho ligeras alteraciones en su medio ambiente y en la educación dada por los robots, con el resultado de que el primer grupo que Elven encontró era sumiso para con los extraños; el segundo era violentamente hostil; el tercero favorable con la misma intensión: el cuarto sumamente receloso, Es una pena que no encontrase al cuarto grupo primero; aun cuando, por supuesto, ellos no hubieran podido gobernarlo, excepto que estaba medio loco de terror de lo sobrenatural.
    »Por tanto usted ve que todo ello fue la más pura casualidad —el director terminó su vino y sonrió a Fedris—. Nadie se sorprendió más que yo cuando, haciendo un rutinario examen, encontré que mis “animales” tenían a este farfullante y liado intruso. Y me habrían podido derribar de un simple dedazo cuando descubrí que era Elven.

    —Puedo compadecerme del pobre diablo —dijo Fedris tras de manifestar su asombro con un ligero silbido—, y puedo comprender, igualmente, por qué su proyecto ha de mantenerse secreto.
    —Ciertamente —asintió el director—, experimentar con seres humanos es para la mayoría de la gente una idea algo difícil de aceptar. No obstante, vale más eso que manejar a toda la humanidad como un único y gran experimento sin controles. Y somos extremamente benévolos para con nuestros «animales». Tan pronto como nuestro experimento con cada uno ha terminado, es nuestra norma graduarlos, con adecuada instrucción suplementaria, en el código.
    —Sin embargo… —dijo Fedris.
    —¿Usted cree que es un poquito parecido a algunos de los planes de los Salvajes?
    —Un poquito —concedió Fedris.
    —A veces yo lo creo también —confesó el director con una sonrisa, y echó más vino para su invitado.

    Mientras, en lo profundo del bosque de espinos de la Magallánica 47, retoños y zarcillos verdes se cerraban alrededor de un broche que contenía una blanca cápsula, sepultando a todos los Salvajes excepto Elven en una verde y menuda tumba.


    Fin

    No grabar los cambios  
           Guardar 1 Guardar 2 Guardar 3
           Guardar 4 Guardar 5 Guardar 6
           Guardar 7 Guardar 8 Guardar 9
           Guardar en Básico
           --------------------------------------------
           Guardar por Categoría 1
           Guardar por Categoría 2
           Guardar por Categoría 3
           Guardar por Post
           --------------------------------------------
    Guardar en Lecturas, Leído y Personal 1 a 16
           LY LL P1 P2 P3 P4 P5
           P6 P7 P8 P9 P10 P11 P12
           P13 P14 P15 P16
           --------------------------------------------
           
     √

           
     √

           
     √

           
     √


            
     √

            
     √

            
     √

            
     √

            
     √

            
     √
         
  •          ---------------------------------------------
  •         
            
            
                    
  •          ---------------------------------------------
  •         

            

            

            
         
  •          ---------------------------------------------
  •         

            
         
  •          ---------------------------------------------
  •         

            
         
  •          ---------------------------------------------
  •         

            

            

            
         
  •          ---------------------------------------------
  •         

            
         
  •          ---------------------------------------------
  • Para cargar por Sub-Categoría, presiona
    "Guardar los Cambios" y luego en
    "Guardar y cargar x Sub-Categoría 1, 2 ó 3"
         
  •          ---------------------------------------------
  • ■ Marca Estilos para Carga Aleatoria-Ordenada

                     1 2 3 4 5 6 7
                     8 9 B O C1 C2 C3
    ■ Marca Estilos a Suprimir-Aleatoria-Ordenada

                     1 2 3 4 5 6 7
                     8 9 B O C1 C2 C3



                   
    Si deseas identificar el ESTILO a copiar y
    has seleccionado GUARDAR POR POST
    tipea un tema en el recuadro blanco; si no,
    selecciona a qué estilo quieres copiarlo
    (las opciones que se encuentran en GUARDAR
    LOS CAMBIOS) y presiona COPIAR.


                   
    El estilo se copiará al estilo 9
    del usuario ingresado.

         
  •          ---------------------------------------------
  •      
  •          ---------------------------------------------















  •          ● Aplicados:
    1 -
    2 -
    3 -
    4 -
    5 -
    6 -
    7 -
    8 -
    9 -
    Bás -

             ● Aplicados:

             ● Aplicados:

             ● Aplicados:
    LY -
    LL -
    P1 -
    P2 -
    P3 -
    P4 -
    P5 -
    P6

             ● Aplicados:
    P7 -
    P8 -
    P9 -
    P10 -
    P11 -
    P12 -
    P13

             ● Aplicados:
    P14 -
    P15 -
    P16






























              --ESTILOS A PROTEGER o DESPROTEGER--
           1 2 3 4 5 6 7 8 9
           Básico Categ 1 Categ 2 Categ 3
           Posts LY LL P1 P2
           P3 P4 P5 P6 P7
           P8 P9 P10 P11 P12
           P13 P14 P15 P16
           Proteger Todos        Desproteger Todos
           Proteger Notas



                           ---CAMBIO DE CLAVE---



                   
          Ingresa nombre del usuario a pasar
          los puntos, luego presiona COPIAR.

            
           ———

           ———
           ———
            - ESTILO 1
            - ESTILO 2
            - ESTILO 3
            - ESTILO 4
            - ESTILO 5
            - ESTILO 6
            - ESTILO 7
            - ESTILO 8
            - ESTILO 9
            - ESTILO BASICO
            - CATEGORIA 1
            - CATEGORIA 2
            - CATEGORIA 3
            - POR PUBLICACION

           ———



           ———



    --------------------MANUAL-------------------
    + -

    ----------------------------------------------------



  • PUNTO A GUARDAR




  • Tipea en el recuadro blanco alguna referencia, o, déjalo en blanco y da click en "Referencia"

      - ENTRE LINEAS - TODO EL TEXTO -
      1 - 2 - 3 - 4 - 5 - 6 - Normal
      - ENTRE ITEMS - ESTILO LISTA -
      1 - 2 - Normal
      - ENTRE CONVERSACIONES - CONVS.1 Y 2 -
      1 - 2 - Normal
      - ENTRE LINEAS - BLOCKQUOTE -
      1 - 2 - Normal


      - DERECHA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2 - 3
      - BLUR BLANCO - 1 - 2 - 3

      - BLUR INTERNO NEGRO - 1 - 2
      - BLUR INTERNO BLANCO - 1 - 2

      - Original - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      BLUR NEGRO - 1 - 2
      BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar



              TEXTO DEL BLOCKQUOTE
      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

              FORMA DEL BLOCKQUOTE

      Primero debes darle color al fondo
      1 - 2 - 3 - 4 - 5 - Normal
      - DERECHA NEGRA - 1 - 2
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2
      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      BLUR NEGRO - 1 - 2
      BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar
      - DERECHA - 1 - 2
      - IZQUIERDA - 1 - 2

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar -

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      BLUR NEGRO - 1 - 2
      BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar
      - DERECHA - 1 - 2
      - IZQUIERDA - 1 - 2

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar -



      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar
      - DERECHA NEGRA - 1 - 2
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 -
      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar
      - DERECHA - 1 - 2
      - IZQUIERDA - 1 - 2

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar
      - TITULO
      - DERECHA - 1 - 2
      - IZQUIERDA - 1 - 2

      - BLUR NEGRO - 1 - 2 - 3
      - BLUR BLANCO - 1 - 2 - 3
      - Quitar

      - TODO EL SIDEBAR
      - DERECHA - 1 - 2
      - IZQUIERDA - 1 - 2

      - BLUR NEGRO - 1 - 2 - 3
      - BLUR BLANCO - 1 - 2 - 3

      - BLUR INTERNO - NEGRO - 1 - 2
      - BLUR INTERNO - BLANCO - 1 - 2
      - Quitar

                 ● Cambiar en forma ordenada
     √

                 ● Cambiar en forma aleatoria
     √

     √

                 ● Eliminar Selección de imágenes

                 ● Desactivar Cambio automático
     √

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2

      - BLUR NEGRO - 1 - 2
      - BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar

      - DERECHA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - DERECHA BLANCA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA NEGRA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA BLANCA - 1 - 2 - 3

      BLUR NEGRO - 1 - 2
      BLUR BLANCO - 1 - 2

      - Quitar




      - DERECHA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2 - 3
      - BLUR BLANCO - 1 - 2 - 3

      - Quitar -





      - DERECHA - 1 - 2 - 3
      - IZQUIERDA - 1 - 2 - 3

      - BLUR NEGRO - 1 - 2 - 3
      - BLUR BLANCO - 1 - 2 - 3

      - BLUR INTERNO NEGRO - 1 - 2
      - BLUR INTERNO BLANCO - 1 - 2

      - Quitar - Original



                 - IMAGEN DEL POST


    Bloques a cambiar color
    Código Hex
    No copiar
    BODY MAIN MENU HEADER
    INFO
    PANEL y OTROS
    MINIATURAS
    SIDEBAR DOWNBAR SLIDE
    POST
    SIDEBAR
    POST
    BLOQUES
    X
    BODY
    Fondo
    MAIN
    Fondo
    HEADER
    Color con transparencia sobre el header
    MENU
    Fondo

    Texto indicador Sección

    Fondo indicador Sección
    INFO
    Fondo del texto

    Fondo del tema

    Texto

    Borde
    PANEL Y OTROS
    Fondo
    MINIATURAS
    Fondo general
    SIDEBAR
    Fondo Widget 1

    Fondo Widget 2

    Fondo Widget 3

    Fondo Widget 4

    Fondo Widget 5

    Fondo Widget 6

    Fondo Widget 7

    Fondo Widget 8

    Fondo Widget 9

    Fondo Widget 10

    Fondo los 10 Widgets
    DOWNBAR
    Fondo Widget 1

    Fondo Widget 2

    Fondo Widget 3

    Fondo los 3 Widgets
    SLIDE
    Fondo imagen 1

    Fondo imagen 2

    Fondo imagen 3

    Fondo imagen 4

    Fondo de las 4 imágenes
    POST
    Texto General

    Texto General Fondo

    Tema del post

    Tema del post fondo

    Tema del post Línea inferior

    Texto Categoría

    Texto Categoría Fondo

    Fecha de publicación

    Borde del post

    Punto Guardado
    SIDEBAR
    Fondo Widget 1

    Fondo Widget 2

    Fondo Widget 3

    Fondo Widget 4

    Fondo Widget 5

    Fondo Widget 6

    Fondo Widget 7

    Fondo los 7 Widgets
    POST
    Fondo

    Texto
    BLOQUES
    Libros

    Notas

    Imágenes

    Registro

    Los 4 Bloques
    BORRAR COLOR
    Restablecer o Borrar Color
    Dar color

    Banco de Colores
    Colores Guardados


    Opciones

    Carga Ordenada

    Carga Aleatoria

    Carga Ordenada Incluido Cabecera

    Carga Aleatoria Incluido Cabecera

    Cargar Estilo Slide

    No Cargar Estilo Slide

    Aplicar a todo el Blog
     √

    No Aplicar a todo el Blog
     √

    Tiempo a cambiar el color

    Desactivar Carga Ordenada o Aleatoria
    Eliminar Colores Guardados

    Sets predefinidos de Colores

    Set 1 - Tonos Grises, Oscuro
    Set 2 - Tonos Grises, Claro
    Set 3 - Colores Varios, Pasteles
    Set 4 - Colores Varios

    Sets personal de Colores

    Set personal 1:
    Guardar
    Usar
    Borrar

    Set personal 2:
    Guardar
    Usar
    Borrar

    Set personal 3:
    Guardar
    Usar
    Borrar

    Set personal 4:
    Guardar
    Usar
    Borrar
  • Tiempo (aprox.)

  • T 0 (1 seg)


    T 1 (2 seg)


    T 2 (3 seg)


    T 3 (s) (5 seg)


    T 4 (6 seg)


    T 5 (8 seg)


    T 6 (10 seg)


    T 7 (11 seg)


    T 8 13 seg)


    T 9 (15 seg)


    T 10 (20 seg)


    T 11 (30 seg)


    T 12 (40 seg)


    T 13 (50 seg)


    T 14 (60 seg)


    T 15 (90 seg)