NOTICIAS DEL MUNDO DE LA MEDICINA
Publicado en
febrero 01, 2015
EL ESFUERZO CORPORAL MODERADO NO RESUELVE EL PROBLEMA
LOS HOMBRES que desarrollan con regularidad una intensa actividad física reducen en mucho el riesgo de muerte por ataque cardiaco, según un estudio practicado en 3686 estibadores de San Francisco (California) durante 22 años. Los resultados, publicados recientemente en la revista American Journal of Epidemiology por los doctores Ralph Paffenbarger, Wayne Hale, Richard Brand y Robert Hyde, refuerzan la hipótesis, sostenida desde hace mucho tiempo, de que el ejercicio cotporal beneficia al corazón.
Los investigadores clasificaron a los sujetos en tres grupos, según sus necesidades de energía: alto, intermedio y moderado. Los trabajos del primero exigían 1900 calorías por encima del mínimo para una jornada de ocho horas; el moderado (equiparable a las labores de oficina) requirió menos de la mitad. En el grupo superior, los obreros alzaron, llevaron a cuestas, empujaron y amontonaron carga, todas ellas operaciones que exigen un sobreesfuerzo sostenido.
De los estibadores observados, 395 (el 11 por ciento) murieron de ataque al corazón antes de cumplir los 75 años; 49 correspondieron a la categoría alta, 71 a la intermedia y 275 a la moderada. Los de este último grupo constituían el 47 por ciento de los trabajadores, pero sufrieron el 70 de las muertes. Los médicos concluyeron que "el riesgo de morir de un ataque cardiaco era diferente para los grupos alto y moderado principalmente por el nivel de actividad corporal".
—Lawrence Altman, en el Times de Nueva York
"OREJA DE TELEFONISTA"
HABLAR demasiado tiempo por teléfono no será la causa de que se caiga la oreja, pero puede producir una inflamación dolorosa. El padecimiento (que los médicos han denominado "oreja de telefonista") se origina por mantener el auricular ajustado sobre el oído durante períodos largos. Esta presión, al parecer, crea condiciones que favorecen la infección por estafilococos en la parte superior de la oreja. La dolencia parece mejorar con compresas y aplicación local de antibióticos durante tres o cuatro días.
—B.P.