¿PROBLEMAS FINANCIEROS? ¡RESUÉLVALOS!
Publicado en
agosto 31, 2014
El dinero mal manejado puede ocasionar muchos problemas y preocupaciones. Con organización, disciplina y objetivos claros esto nunca le sucederá.
Si usted está en el grupo de las que no pueden hacer un presupuesto, gastan mucho y ahorran poco y ni siquiera pueden pensar en una jubilación apropiada para su estilo de vida, es momento de que se detenga a analizar en qué está fallando. "Es importante fijarse objetivos porque eso ayuda a ordenar las finanzas personales. Uno importante es definir si quiere o no su libertad financiera", dice Pablo Arosemena, economista guayaquileño, quien se refiere a esta como la posibilidad de llegar a un momento en que ya no se está obligado a trabajar porque se tiene resuelta la vida en términos económicos, es decir que se ha logrado acumular lo que permite cubrir los gastos del futuro.
EL EFECTO "BOLÓN"
Pablo Arosemena, quien se desempeña como director ejecutivo de la Fundación Ecuador Libre (entidad privada independiente sin fines de lucro, para la investigación, análisis y difusión de políticas públicas basadas en principios de libertad), señala que para comprar nuestra libertad financiera necesitamos mirar las pequeñas cosas en que usamos nuestro dinero cada día, cada semana y cada mes porque eso puede marcar la diferencia "entre acumular riqueza y vivir pendiente del cheque de fin de mes". Y pone un ejemplo al que ha llamado "el efecto bolón": si se ahorran 5 dólares al día, en la semana se tendrán 35 dólares. Al final del mes serán 150, que invertidos por 40 años darán cerca de 1 millón de dólares. Si hay un gasto diario de 5 dólares en un café, revista, cigarrillos, "bolón" (de ahí su nombre) o cualquier cosa, luego de varios años se habrá desembolsado mucho dinero sin haberlo notado, pudiendo haberlo invertido. Si se empieza a los 20 años, a los 60 se estaría jubilando con una cifra que permite llevar un buen estilo de vida. "Esto se consigue controlando los gastos... Y eso significa tener una vida ordenada", indica a la vez que aconseja registrarlos disciplinadamente por una semana, revisarlos, anualizarlos y tomar acciones.
¿POR QUE NO PUEDO AHORRAR?
"Una de las probables explicaciones tiene que ver con la cantidad de tarjetas de crédito que tenemos", dice Rafael Coello, economista que también colabora con la Fundación Ecuador Libre. Un estudio de la empresa Mercaper sobre este tema señala que las mujeres de clase media alta de Quito tienen, en promedio, tres tarjetas de crédito, mientras que las de Guayaquil, cuatro o más. En cuanto al nivel de ahorro, el mismo estudio indica que en la capital se destina un 13% de los ingresos familiares para éste y el nivel de deudas se ubica en el 15%. En el Puerto Principal las deudas están en el 19% y el ahorro solo en el 2%.
"No es que no hay que tener tarjetas de crédito, sino saber manejarlas. Quien no tiene tarjeta, no gasta más de lo que tiene en el bolsillo", sostiene Rafael Coello, quien coincide con su colega al decir que lo mejor es tenerlas "en la medida en que uno pueda pagarla completamente a fin de mes. Es decir, que esta sea una extensión de la chequera. No caer en el juego de pagar los mínimos porque los intereses son demasiado altos y no es rentable. Si no le alcanza, no lo compre". Si no puede pagar la totalidad cada mes, por lo menos hay que tratar de pagar el doble del mínimo para salir más rápido de la deuda.
En el caso de tener varias tarjetas, los expertos aconsejan precancelar estos valores uno por uno, empezando por aquella cuyos intereses sean mayores. Y, además, recuerde nunca dejar pasar la fecha máximo de pago para evitar los intereses por mora.
¿COMO AHORRO?
Para ahorrar más hay que ganar más o tener menos gastos, pero cuando uno trabaja en relación de dependencia eso no lo maneja uno, a diferencia de los gastos que sí pueden ser controlados. Para llevar las finanzas personales hay herramientas en línea, sofisticados softwares o programas en la computadora (excell, por ejemplo) que sirven para ello, pero también se puede hacer en una hoja o libreta en la que se categorizan los desembolsos (alimentación, vivienda, seguro, entretenimiento, etc.), se establece cuánto se quiere gastar en el mes y se registra día a día cuánto se gasta a diario para ir sabiendo cuánto queda. Esta operación es más complicada cuando se habla de presupuestos familiares, pero lo más importante es "la voluntad de gastar menos y tener un orden", afirma Rafael Coello.
En el libro "El millonario de al lado", de Thomas Stanley y William Danko, sus autores hacen un análisis de los millonarios de Estados Unidos y dan particular atención a los que "no parecen" serlo. Son personas que viven por debajo de sus posibilidades, ahorradores por naturaleza. Esto no quiere decir que uno tenga que vivir mal, sino que en cualquiera de los estratos socio-económico en que se esté, no hay que gastar más de lo que se puede, solo lo que realmente se necesita. Es un sacrificio para un beneficio mayor a largo plazo: acumular riqueza a futuro para planear una jubilación.
No hay que gastar más de lo que se puede, solo lo que realmente se necesita.
ORGANIZAR EL FUTURO
Ambos especialistas en finanzas concuerdan en que hay varias alternativas de inversión para la jubilación, pero "lo primero es pagarse a uno mismo, abrir hoy una cuenta de ahorros y comenzar a acumular lo que uno pueda. Y no tocarlo. Tener esto separado de las demás cuentas del diario porque uno siempre va a ser tentado".
Entre las posibilidades de inversión están las pólizas de acumulación, que pagan entre un 7 y 8%; también las acciones de compañías locales, bancos, supermercados, etc. que las emiten con rentabilidades del 12 al 18% al año, y que son alternativas fáciles para la gente común porque se pueden comprar paquetes accionarios de bajo costo. Para esto es necesario acercarse a las casas de valores (cada banco tiene la suya). Además, están los proyectos forestales que actualmente se están cotizando en la Bolsa de Valores de Guayaquil, los bienes raíces, las inversiones a largo plazo y los fondos de jubilación privada con tasas de entre 10 y 12%. Un consejo: Cuando alguien le venda alguno de estos productos, pregúntele si lo ha comprado. La gente que vende algo bueno, compra para sí mismo. Lo importante es asesorarse bien con amigos conocedores del tema, asesores financieros en los bancos y gente que maneje inteligentemente sus finanzas.
¿CUANTO AHORRO?
El ahorro no debe ser menos del 10% de los ingresos. Más del 20% sería no vivir la vida. De lo que se ahorra, solo hay que destinar una parte para la inversión, pues hay que tener una reserva de emergencia. Como previsión, si se pierde el empleo, lo recomendable es tener ahorrado en reserva líquida lo que se gasta de 3 a 6 meses, que es lo que toma -en una economía estable- conseguir un nuevo trabajo. Por otro lado, no hay que dejarse llevar por lo que se llama "la carrera de la rata" que es cuando una persona gasta más cuando gana un poco más, ya que eso lleva a vivir al tope de las posibilidades.
Fuente:
Revista HOGAR, Julio 2008