Publicado en
agosto 11, 2013
EN NOVIEMBRE y diciembre pasados, en los extremos occidental y oriental de la vasta extensión de tierras asiáticas, celebramos dos importantes acontecimientos editoriales: la iniciación de nuestras nuevas ediciones coreana y arábiga.
En noviembre, en los quioscos de revistas de toda Corea del Sur, apareció el primer número de:
Este es el equivalente fonético de las palabras READER'S DIGEST. El mes pasado los lectores de los países del Oriente Medio y de África en que se habla árabe vieron por primera vez el nuevo:
que dice Al Mukhtar en árabe. Esas palabras significan "Lo mejor" y son la abreviatura de un título más largo en árabe, que promete "Lo mejor del READER'S DIGEST".
Aunque ambas ediciones son revistas nuevas, el DIGEST había aparecido ya en los dos idiomas. Nuestra primera edición coreana se publicó en Seúl en 1950; Al Mukhtar, en 1943. Una y otra fueron abatidas por los vientos de la guerra: la edición coreana, por la de Corea, en 1953; Al Mukhtar, por la Guerra de los Seis Días, entre Egipto e Israel, en 1967.
Las dos ediciones son los miembros más recientes de la familia más grande y cosmopolita en la historia editorial. Hoy, en todo el mundo, DIGEST cuenta con 25 oficinas editoriales que publican 39 ediciones en 15 idiomas. El total de nuestra circulación mundial sobrepasa los 30 millones de ejemplares, que leen cada mes unos 100 millones de personas en más de 180 países y territorios.
Al felicitar al DIGEST por sus más recientes ediciones, el presidente norteamericano Jimmy Carter se expresó en cordiales términos de bienvenida: "El DIGEST representa un espíritu de cooperación y de intercambio cultural que beneficia a sus lectores en todas las naciones. Los coreanos y los pueblos que hablan árabe tienen ahora la fortuna de contar con ese recurso".
El extraordinario atractivo del DIGEST entre una asombrosa variedad de pueblos y culturas tal vez quede demostrado de mejor manera en Asia, región en la que, con el advenimiento de la revista coreana, tenemos cinco ediciones en cuatro idiomas, entre ellos el japonés, el chino y el inglés (se publica en inglés una edición asiática y una especial para la India).
Ha facilitado el reingreso del DIGEST en la actividad editorial coreana y arábiga la alianza mercantil con compañías locales. En Seúl, nuestra concesionaria es la Hapdong News Agency, el servicio cablegráfico de noticias más importante de Corea. La edición arábiga (que por ahora tendrá sus oficinas en París), será publicada, con autorización, por An Nahar International Publications, Ltd., filial de An Nahar, uno de los principales diarios de Beirut (Líbano). El director editorial del DIGEST de Corea es Manki Kim, de 47 años, hasta hace muy poco jefe de la oficina en Londres de Hapdong. El director editorial de Al Mukhtar es Edmond Saab, de 38, antes subdirector gerente de An Nahar.
Se calcula que la circulación inicial de la revista coreana será de sólo 60.000 ejemplares. Sin embargo, el exuberante crecimiento reciente de Corea del Sur indica que esa minúscula nación tal vez emule el éxito japonés de los últimos dos decenios y se transforme en una potencia económica. Con tales perspectivas de prosperidad y un índice de alfabetismo del 93 por ciento en una población de 35 millones, se tienen grandes esperanzas de que el READER'S DIGEST coreano reciba una acogida cada vez más entusiasta.
Igualmente optimista se muestra Edmond Saab, quien dice: "Lo extraordinario de esta edición es que llegará a lectores en 22 países árabes". Saab tiene la mira puesta en una circulación de 50.000 ejemplares el primer año y espera llegar a los 200.000 en cuatro años. (La edición anterior en idioma árabe tuvo una circulación máxima de 116.000.) Como única revista verdaderamente panarábiga Al Mukhtar tratará de fomentar los intercambios culturales entre el mundo árabe y Occidente.
Se espera que todas las ediciones del DIGEST —y, en consecuencia, sus lectores— se beneficiarán al estrechar sus lazos con oficinas bien enteradas de los sucesos en dos de las regiones del mundo en que ahora ocurren los mayores cambios. Nos complace mucho decir a nuestros nuevos colegas: "Bienvenidos (o, si lo prefieren, Hwan-yong y Ahlanwa-sahlan)", y a los nuevos lectores coreanos y árabes: "Nuestros mejores deseos (Kon-seung y Mabruk)".
—LA REDACCIÓN