GANAR DEFENSAS EN INVIERNO
Publicado en
enero 27, 2013
EN ÉPOCA DE FRÍO LAS LEGUMBRES, LOS FRUTOS SECOS Y LAS FRUTAS Y HORTALIZAS DE TEMPORADA AYUDAN A EQUIILIBRAR LA DIETA Y POTENCIAR LAS DEFENSAS.
LA NUTRITIVA JUDÍA MUNGO
Originaria de la India, esta legumbre de sabor ligeramente dulce, verde por fuera y amarilla por dentro, es la segunda más rica en proteínas después de la soja (un 25% sin pelar y un 30% una vez pelada). Tal vez por eso, aunque no esté emparentada con esta, se la conoce también como "soja verde". Posee abundante fibra (16%), por lo que ayuda a regular el tránsito intestinal y a mantener a raya el colesterol. Aun así resulta más digestiva y menos flatulenta que otras legumbres, pues posee una piel muy fina. Es rica en vitaminas del grupo B y minerales como fósforo, magnesio, hierro y manganeso. En España se suele comer germinada en ensaladas, pero resulta deliciosa en guisos con cereales o verduras y especias picantes.
CLEMENTINA VITAMINICA
Con su piel fácil de pelar y una pulpa que no suele presentar semillas, esta variedad de mandarina de color naranja intenso y sabor dulce es una de las más populares en la mesa. Considerada un cruce entre mandarina y una naranja silvestre de Argelia, comparte con otros cítricos su riqueza en vitamina C. Tres clementinas (unos 200 gramos) pueden llegar a cubrir el total de las necesidades diarias de esta vitamina antioxidante, un buen motivo para consumirlas en esta época del año en que son habituales los resfriados. También proporciona vitamina A (57 mcg/100 g), B1 (0,06 mg), potasio (210 mg) y algo de calcio (37 mg). Su fibra, la pectina, se concentra en la parte blanca. Sus gajos llenan de frescor las ensaladas de hoja.
LA PROTECTORA COLIFLOR
Su color blanco se debe a que los agricultores protegen el cogollo del sol envolviéndolo con las hojas, lo que inhibe la formación de la clorofila. Al igual que otros tipos de col, contiene compuestos anticancerígenos y resulta muy ligera (25 cal/100 g). Aporta potasio, fósforo y vitaminas del grupo B, en especial B5, B6 y ácido fólico. Y consumida cruda se convierte en una gran fuente de vitamina C (46 mg/100 g). Sin cocer o tan solo salteada al dente tiene aun otra ventaja: resulta menos flatulenta. Queda deliciosa en ensalada con vinagretas suaves y comino.
BONIATO, LA ENERGIA MAS DULCE Y SABROSA
Atrás quedó la noche de Todos los Santos pero el boniato sigue llegando al mercado y hay que aprovecharlo: no solo reconforta en los meses fríos con su pulpa humeante recién salida del horno sino que proporciona al organismo abundantes nutrientes. Su dulzor lo delata: sus nutrientes mayoritarios son los hidratos de carbono (24,3%), que se liberan progresivamente a la sangre sin producir altibajos de glucosa. Considerado el pariente pobre de la patata, no solo no está emparentado con esta sino que resulta mucho más completo. El boniato tiene casi tanto hetacaroteno como la zanahoria, la reina de este pigmento antioxidante que el organismo transforma en vitamina A: 100 gramos aportan todo el que se precisa al día. Además es rico en vitamina C, en varias vitaminas del grupo B (B1, B2, B5, B6 y ácido fólico) y en manganeso. Aunque suele comerse asado, da un sabroso toque dulce a revueltos, guisos, rellenos y postres.
CARAMBOLA, ACIDEZ EXÓTICA
Entera parece un farolillo chino, pero al cortarla las rodajas forman bonitas estrellas de cinco puntas. No es extraño, pues, que a esta exótica fruta asiática, originaria de Malasia e Indonesia, también se la conozca como fruta estrella. Para comerla no hace falta pelarla. Su pulpa, carnosa y translúcida, es ácida y jugosa, además de rica en vitamina C. Dos o tres carambolas (100 g) procuran más de la mitad de la que se precisa al dia. Aporta asimismo pequeñas dosis de vitamina B5 y ejerce un suave efecto laxante. Las grandes son las más dulces: cuando maduran, la piel cobra tonos dorados o anaranjados y las aristas se oscurecen. Luce muy decorativa en ensaladas de hoja y macedonias, tartas y batidos, aunque resulta deliciosa gratinada al horno, con crema de vainilla y azúcar por encima.
NUECES PACANAS, AMIGAS DEL CORAZON
Estas aromáticas nueces son originarias de Estados Unidos, donde siguen creciendo silvestres. Los indios americanos las llamaban pecan, que significa "fruto cuya cáscara debe partirse con una piedra", lo que da una idea de la dureza de su cáscara, más lisa que la de la nuez común. De hecho, están emparentadas con esta y en virtudes nutritivas se asemejan mucho. Aunque las pacanas tienen menos proteínas que la nuez común (9% frente al 15%) y el doble de fibra (9.6% y 4.6%, respectivamente), comparten su riqueza en grasas saludables y una óptima proporción de ácidos grasos omega-3 y omega-6. Esto las convierte en grandes aliadas del corazón y el cerebro. Una ración de 30 gramos cubre, además, el 10% de las necesidades diarias de la antioxidante vitamina E. Son muy apreciadas en repostería, pero también resultan exquisitas al natural.
En la página de CuerpoMente podrás conocer lo esencial de cada alimento y la época más natural para consumirlo.
Fuente:
CUERPO MENTE - ESPAÑA - DICIEMBRE 2008