Publicado en
febrero 02, 2021
Muchos problemas pueden provocar que no duermas lo suficiente... ¡Descúbrelos!
Por Patricia Bahamonde.
¿Te quedas dormido en todas partes? ¿Ronca tanto tu compañero(a) que a veces te da la impresión de que se está asfixiando? ¿Grita tu hijo de noche y "actúa" algún sueño que está teniendo? Todas estas parecen afecciones del sueño que desembocan en un mismo resultado: la persona no duerme lo suficiente, por ende está tratando de recuperarlo constantemente. Pero, ¿por qué es tan importante la cantidad y hasta la calidad del sueño?
"Durante muchos años se creyó que en el sueño no pasaba nada, que era un estado de reposo total. Ahora sabemos que no lo es, al menos no para el cerebro", dice el Dr. Carlos Ramírez Mejía, neurólogo especializado en el sueño y la epilepsia en el Baptist Hospital de Miami. "El cerebro es sumamente activo durante el sueño. Es entonces que lleva a cabo las actividades necesarias para procesar la información que adquirió mientras estaba despierto".
Según el Dr. Ramírez Mejía, no se trata solo del tiempo que se duerme, sino también de la calidad del sueño durante ese tiempo.
"Durante un buen sueño, una persona entra y sale varias veces en la fase del movimiento rápido de los ojos", dice. "Esa fase es la más importante, porque es en la que el cerebro recoge la información del día y la empieza a procesar. Es la parte reparadora del sueño y la que, si se repite como debe repetirse, es la que da la sensación de que realmente se descansó.
Si se priva a una persona del sueño y, sobre todo, de esas fases valiosas, todos los órganos se estresan; la persona se irrita, comienza a mostrar menos tolerancia, pierde la memoria, tiene dificultades de concentración, sus reacciones son lentas... efectos todos que tienen un impacto negativo sobre la capacidad del individuo de reaccionar adecuadamente a su entorno, trátese de su vida familiar, su trabajo o una situación en el tránsito.
Según el Dr. Ramírez-Mejía, muchos problemas pueden provocar la falta de sueño. Uno de ellos es la "apnea del sueño", un trastorno que hace que la persona deje de respirar a intervalos relativamente cortos durante el sueño. Esos intervalos a veces se repiten tanto, que la persona no puede entrar en la fase del movimiento rápido de ojos durante toda la noche, lo que la hace despertarse más cansado que cuando se acostó. "La apnea del sueño se produce porque la persona tiene una obstrucción mecánica de la vía aérea durante algunas etapas del sueño, lo que hace que se esté ahogando, porque no recibe suficiente oxígeno", dice el Dr. Ramírez Mejía. Esto aumenta el riesgo de problemas de corazón durante uno de esos intervalos sin oxígeno.
¿Cómo se diagnostica? Con un estudio en un buen laboratorio del sueño. El Dr. Ramírez Mejía, que es neurólogo y no pulmonólogo (que es el especialista que más comúnmente remite al laboratorio los casos de apnea), lo sabe porque suele remitir a sus pacientes al laboratorio del sueño del Baptist Hospital de Miami. Aunque los remite por causas de tipo neurológico, que son muchas. "Hay enfermedades asociadas con el sueño: 1. Movimientos periódicos, en que la persona mueve constantemente las extremidades durante la noche, alterando la estructura del sueño. 2. Estado de pánico, que hace que se despierte gritando. 3. Trastornos de la fase del movimiento rápido de los ojos, que consiste en que las personas actúan lo que están soñando, lo que puede llevarlas a que se lesionen, porque tienen los ojos cerrados".
El laboratorio, que acaba de ser renovado para parecer una habitación en un hogar común, cuenta con equipos que a través de 14 canales miden parámetros neurológicos, respiratorios, musculares y cardiacos.
"Mide las ondas cerebrales", dice el doctor, "los movimientos oculares, la proporción de oxígeno en la sangre; unos sensores detectan si los músculos se contraen, otros, observan el tipo de respiración de la persona, si lo hace más con el abdomen que con el pecho. Hay cámaras de vídeo y de audio para observar su comportamiento... En fin, es una instalación sofisticada, que nos permite conocer la.estructura del sueño. Y que ayuda a diagnosticar otros problemas más raros, como la narcolepsia, en que la persona sufre episodios de sueño prácticamente incontrolables, teniendo una gran dificultad para mantenerse despierta durante el día; el Síndrome de Ondine, en que pierde la capacidad de dormir. Sucede a veces despues de incidentes cerebrales, como una encefalitis".
Otro padecimiento que diagnostican en ese laboratorio es el bruxismo, en que la persona rechina sus dientes, lo que le devasta las piezas y le puede producir un dolor crónico en las quijadas. También un tipo de ataques epilépticos que ocurren solo durante la noche. Y ayuda al diagnóstico de la impotencia. "Durante la fase de movimiento rápido de ojos ocurren erecciones en los hombres", dice el Dr. Ramírez Mejía. "Cuando un hombre sufre de impotencia se le lleva al laboratorio del sueño y se le colocan sensores en el pene para observar si tiene erecciones. Si las tiene, su impotencia no es de origen anatómico, sino emocional o mental".
Fuente:
Revista Vanidades, Ecuador, mayo 05 del 2004