Publicado en
octubre 02, 2009
Al día siguiente de que se anunció en Inglaterra que aumentaría el precio del fuel, una compañía recibió una llamada telefónica de un convento, uno de sus clientes regulares, en la que cierta religiosa preguntaba a cuánto ascendería el precio del combustible. El vendedor decidió darle la noticia con mucho tacto y preguntó:
—¿Está usted sentada, hermana?
—¡Estoy arrodillada!
—H.G.N.
CUMPLIDOS ORIGINALES
Cuando Walt Disney recibió un título honorario de la Universidad de Yale, el profesor William Lyon Phelps comentó: "Ha sobrepujado todos los esfuerzos y experimentos de los laboratorios de biología y zoología al dotar de alma a los animales".
—N.y.T
Franklin Roosevelt dijo una vez a Winston Churchill: "Es agradable estar con usted en la misma década".
—A.N.
CARICATURAS
La telefonista: "Lamento hacerla esperar tanto, señora. ¿No desea charlar mientras con alguno de los que esperan línea?"
—L.& W.
Cierta dama, a sus invitados: "Nosotros visitamos Roma, Florencia y París. Nuestras maletas, Milán, Turín y París".
—C.G.S.
El jefe de la empresa al inventor de un camión de juguete irrompible: "¿No ha pensado usted que no queremos juguetes irrompibles?"
—Busino
Que al navegar nos guíen las estrellas, y no la luz de cada buque.
—Omar Bradley
Una vez, mientras la princesa inglesa Ana presenciaba una revista hípica en Hickstead (Sussex), se le aproximó un espectador que, sin reconocerla, le comentó:
—¿No le han dicho que se parece mucho a la princesa Ana?
Sonriendo, la Princesa respondió:
—Creo que soy mejor parecida que ella.
—P.W.
¿QUÉ LE INTERESA A UN NIÑO?
Mi hijo recordaba ciertas vacaciones con su abuela. —Roberto —se interesó ella—, ¿qué te agradó más? Luego de pensarlo un momento, el chico respondió: —Bueno, abuela, si me hubieras llevado al partido de fútbol, ¡eso habría sido lo mejor!
—H.E.S.
VERDADES HOGAREÑAS
Un trozo de chocolate proporciona la energía suficiente para ir a buscar otro pedazo.
—The Irísh Digest
No existe detector de humo más eficaz que la madre de un muchacho de 14 años cuando este enciende su primer cigarrillo.
—J.H. McG.
El estudio completo de los registros policiales permite afirmar que nunca una mujer ha disparado a su marido mientras lavaba este los platos.
—E.W.
Si no fuera por la herencia, no sé qué otra cosa podríamos legar a nuestros hijos.
—Di
El Museo de la Humanidad, en Londres, tiene una trampa para sus visitantes. El plano del primer piso está en la pared opuesta a la indicada en el letrero de "Usted se halla aquí" y, por consiguiente, el turista se dirige en dirección contraria a la que desea.
Cierto día un visitante se quejó ante un guarda y este le explicó: "La razón es para asegurarnos de que usted vea primero las exhibiciones que no le interesaban".
—PHS
EN LA PLENITUD
¿Retiro obligatorio? Tenga en cuenta estos diez ejemplos:
A los 100 años Grandma Moses, artista norteamericana, todavía pintaba. A los 94, el matemático y filósofo británico Bertrand Russell participaba activamente en movimientos pacifistas. A los 92, el dramaturgo británico George Bernard Shaw escribió Farfetched Fables ("Fábulas improbables"). Eamon de Valera era presidente de Irlanda a los 91. Mary Baker Eddy, de 89, dirigía la iglesia de la Ciencia Cristiana. A los 89, el médico y filántropo Albert Schweitzer dirigía un hospital en África. Konrad Adenauer era canciller de Alemania Federal a los 87. A los 88, Coco Chanel dirigía su famosa firma de ropa femenina. Johann Wolfgang von Goethe terminó de escribir Fausto a los 83. Y a los 80, el actor norteamericano George Burns ganó el premio de la Academia de Hollywood por su actuación en la película The Sunshine Boys.
—David Wallechinsky, Irving Wallace y Amy Wallace en The Books of Lists
El castigo de la vanidad es la lisonja
—Withelm Raabe
LISONJA: Alabanza o atención que se dedica a una persona.
Mustafá Kemal, fundador de la moderna Turquía, determinó en 1933 que sus compatriotas debían adoptar sus apellidos. La mayoría tomó apelativos como "Fisek", que significa cartucho, y "Nalbantoglo", hijo-del-herrero; algunos "Zararsiz", inofensivo, o "Nazik", cortés. Otros escogieron nombres más enérgicos: "Deliduman, humo-loco", y "Canavar, monstruo".
La súbita oportunidad de escoger un apellido que se añadiría a los nombres de las próximas generaciones debió haber causado alguna demencia temporal en ciertos hombres. Gracias a esto, los directorios telefónicos turcos son gratos de leer. Ciertos hombres y mujeres fuertes, al oírse nombrar dan un respingo. Considere la difícil situación de la gente que responde a apellidos cómo "Pura-nuez, Pierna-hinchada, Mohoso, Cabeza-de-piedra" y "Enano-de-hierro".
Pero ninguno puede compararse a "Hijo-del-que-no-se-acuesta-ni duerme-bajo-los-altos-álamos". Era un ciudadano fornido y conservador que se oponía a esta ley de los apellidos, y tomó ese hombre a modo de protesta. Sus hijos, que debieron sufrir mucho en la escuela, se presentaron ante los tribunales tan pronto como fueron mayores de edad para cambiarse el apellido.
—M.O.
Rex Stout, escritor de novelas de misterio, decidió casarse el 21 de diciembre porque, explica, "es el día más corto del año y el que tiene la noche más larga".
—J.J. McA.
¡AFORTUNADA!
"Una de mis hijas va a tener un hijo", nos anunció contenta una compañera de trabajo. La felicitamos. "¿Saben ustedes lo mejor de todo? Que es la hiia casada".
—W.K.C.
Siembra un acto y cosecharás un hábito.
Siembra un hábito y cosecharás un carácter.
Siembra un carácter y cosecharás un destino.
—Charles Reade
CONSEJOS
¿Quiere ser feliz en su matrimonio? Nunca grite, a menos que su casa esté ardiendo.
—L.A.
¿Sufre de insomnio? Asista a la reunión de un comité.
—R.O'D
A los padres de adolescentes: "Nunca envíen a un muchacho a un encargo propio de adultos, sobre todo si el tanque de gasolina del coche está lleno".
—J.D.
POSDATAS
En un tablero de avisos: "Compro bicicleta vieja. El sexo no importa". Alguien añadió debajo: "Eso es lo que tú crees".
—P.P.
GARRAPATEADAS en la pared de una taberna londinense se leen estas palabras: "Los humildes heredarán la Tierra". Alguien añadió: "Siempre y cuando los demás estén de acuerdo".
—O.F.T.
Un muchacho colocó un anuncio en el que se ofrecía a lavar automóviles por 50 centavos de dólar. Yo lo empleé en seguida y, como sabía que era su primer cliente, le regalé 25 centavos de más por haber hecho bien el trabajo. Diez minutos más tarde, al pasar por delante, vi el cartel que anunciaba sus servicios; pero ahora decía: "Experto en lavar automóviles, 75 centavos".
—J.S.
Se puede ser amo de un perro, pero el gato es amo de las personas, porque para él somos útiles animales domésticos. El perro nos halaga, pero al gato hay que halagarlo. El can es nuestro empleado; el felino sabe que nos domina.
—G.M.
HUMORISMO MILITAR
Durante la Segunda Guerra Mundial, mi marido estuvo en el Centro de Adiestramiento de Oficiales de Brockville, en Ontario (Canadá). Era uno de los cadetes a quienes se permitía pernoctar fuera de la base por estar casados y porque la esposa se alojaba en la ciudad. Tales privilegios se les suspendían por alguna infracción del reglamento, pero a Bill, mi marido, sólo una vez le fueron retirados.
Aquella vez, el sargento, al practicar la inspección matutina, le reclamó que su cama "no estaba bien tendida".
—Es que tengo permiso de dormir fuera —protestó mi marido—. Nadie ha ocupado esa cama desde hace tres semanas, y en ese tiempo la han aprobado en la inspección todas las mañanas.
El sargento titubeó no más de un segundo. Luego, clavando su fría mirada en Bill, dijo:
—Queda usted confinado al cuartel. ¡La cama tiene polvo!
—D.K.
En el curso de varios años los ocupantes de un refectorio de oficiales en Ikoye (Nigeria), habían recogido numerosas pelotas de golf extraviadas de una cancha vecina. Hace poco apareció un gran letrero delante del comedor: "Mándenos ahora algunos palos, por favor".
—M.S.
El siguiente panegírico a la vida fue hallado entre los efectos de un sargento de infantería canadiense que pereció en las afueras de Ortona (Italia) cierto día de diciembre de 1943.
Hoy me cantó un pajarillo. Hoy me recosté contra el robusto tronco de un árbol viviente. Hoy una pequeña lagartija corrió sobre mi mano. Entonces, no estoy solo. Cuando regrese a Canadá recordaré todo esto. Amaré todas las vidas, porque todas las vidas son sólo una. Aunque el hombre es un destructor, yo jamás volveré a destruir. Este es mi sueño: que aprendamos a vivir en armonía no sólo entre los hombres, sino con todos los seres vivientes.
—C.L.B.
Cierto día, al pasar frente a una taberna vi salir tambaleándose a un individuo que me preguntó con voz pastosa:
—¿Qué hora es, amigo?
—Las 2:50
Me dio una palmada en la espalda y siguió su camino haciendo eses; pero poco después se devolvió para inquirir, algo perplejo:
—¿De hoy o de mañana?
—A.G.K.
En una junta del personal administrativo, que trataba sobre la participación del trabajador, el jefe de nuestro departamento expresó sus propias ideas al respecto: "Yo les diré a ustedes lo que deben hacer, y ustedes participarán haciéndolo".
—A.M.
TIGRES DE PAPEL
Cuando mi hijo se hizo cargo de la distribución del periódico, le dije que procurara no dejarlo en donde pudiera llevárselo el viento. Es una casa de una sola entrada, en la que el cliente vivía en el piso superior, mi hijo enrolló el diario y lo dejó con cuidado tras los picaportes de la puerta. La atrancó tan firmemente que el cliente luchó una hora y media para poder salir de la casa.
—D.E.O.
Existe en la actualidad un nuevo mal entendido entre padres e hijos, y es que nadie sabe a ciencia cierta cuál de las dos generaciones educa a cuál.
—A.B.
LA ESTATUA DE LA MUERTE
En Pickneyville (en el estado norteamericano de Illinois), una niña de once años logró cambiar una disposición del Gobierno estatal.
Seis años hacía que los funcionarios habían ordenado elevar 70 centímetros el busto de Abrahán Lincoln que está junto al sepulcro de este prócer en el cementerio de Oak Ridge, porque de tanto frotarle los niños la nariz en busca de buena suerte, la nariz había cobrado cierto brillo que desagradaba a la burocracia.
Beth Emling —nuestra protagonista— cayó en la cuenta de ello un día en que visitó la tumba, y se quejó por escrito al diputado de su distrito. Este envió a su vez la queja al director de conservación del estado, quien no encontró ninguna norma que se opusiera al frotamiento de la estatua.
Así fue como el aparato gubernamental rectificó y el busto de Lincoln recobró su altura original.
—L.W.
Quien pretenda ser juez de la naturaleza humana debe estudiar los pretextos que da la gente.
—Hebbel
ASTUCIA
Un guarda forestal hacía su ronda habitual cuando sorprendió a un pescador en un lago no autorizado.
—Lo siento, señor. Debe pagar una multa por pescar en zona prohibida.
—¡Pero si no estoy pescando! —protestó el hombre.
—¿No tiene usted una caña de pescar y un anzuelo? ¿Y no tiene el anzuelo un gusanito?
—Sí, es cierto.
—¿Entonces?
—¡Estoy enseñando a nadar al gusanito!
—De todas maneras, lo multo.
—Pero, ¿por qué? —se indignó el otro.
—Porque el gusanito está nadando desnudo.
—Osear Mayet Rivera
Es la vista de los demás lo que nos arruina. Si todos menos yo fueran ciegos, no desearía ni una casa hermosa ni unos muebles bellos.
—Benjamín Franklin
PROVERBIOS
Corresponde a los soldados pelear y a los reyes recibir los vítores.
—Judío
Los buenos propósitos son como los caballos viejos que a menudo se ensillan y pocas veces se montan.
—Mexicano