LA RISA, REMEDIO INFALIBLE
Publicado en
abril 27, 2020
EN CIERTA OCASIÓN, mientras ensayaba un nuevo truco, por error un mago convirtió a su esposa en sofá y a sus hijos en sillas.
Al ver que no podía revertir el proceso, clamó:
—Pero, ¿qué he hecho? ¿Ahora cómo voy a recuperar a mi familia? ¿Cómo voy a deshacer la magia?
Intentó varias cosas, pero todo fue en vano, así que decidió subirlos a su camioneta y llevarlos de inmediato al hospital. Ahí, una vez que el mago explicó lo ocurrido, su familia fue llevada al quirófano a toda prisa.
Varias horas más tarde salió un cirujano.
—¿Cómo se encuentran? —le preguntó el mago.
—La verdad, bastante cómodos —respondió el médico.
—Enviado por BOB MEYERSON
UN PAR DE AMIGOS TOMARON un avión hacia Reno para pasar un largo fin de semana. Más o menos una hora luego del despegue, una azafata tomó el micrófono y anunció a los pasajeros:
—Señores, el capitán me acaba de comunicar que hemos perdido un motor. Sin embargo, no hay motivo para alarmarse: tenemos otros tres motores, por lo que sólo llegaremos con una hora de retraso.
Aproximadamente dos horas después, la misma azafata volvió a dar un anuncio:
—Hemos perdido otro motor, pero no se preocupen: aún contamos con un par más. Llegaremos con otra hora de retraso.
Al oír esto, uno de los amigos se voltea y le dice al otro:
—Caray, si perdemos los otros dos motores estaremos en las alturas todo el día.
Enviado por CHRIS LOCHTE
ENTRA UN BORRACHO a un bar y grita a todo pulmón:
—¡Feliz Año Nuevo!
Alguien le aclara:
—¡Oiga!, ya estamos en pleno mes de mayo.
—¡Caramba! Nunca me había tardado tanto en llegar a casa. ¡Esta vez mi mujer me va a matar!
Enviado por DANIEL VERA
EN UN VELORIO, un orador espontáneo comienza a ensalzar las virtudes del difunto:
—Estamos todos reunidos aquí para despedir a un gran amigo. Él fue un hombre honesto y responsable, un marido abnegado, un padre modelo...
Al oír esto, la viuda toma de la mano a su hijo y le dice:
—Vámonos, hijo, nos equivocamos de velorio.
Enviado por BLANCA ESTELA GÓMEZ
CIERTO FIN DE SEMANA, un médico, un sacerdote y un abogado fueron a pescar en un bote.
De repente, el motor se detuvo y uno de los remos se fue a la deriva. Justo cuando el médico se disponía a arrojarse al agua para rescatar el remo, varios tiburones rodearon el bote.
—No puedo lanzarme —dijo el doctor—. Si estos animales muerden a alguien, necesitarán mis servicios.
—Yo tampoco puedo lanzarme —exclamó el sacerdote—. Si el médico falla, yo tengo que darles la extremaunción
—Está bien —dijo el abogado—. Yo voy por el remo.
Acto seguido se lanzó al agua, pasó nadando entre los tiburones, recuperó el remo y subió al bote. Ante la mirada atónita del médico yel sacerdote, el abogado simplemente sonrió y señaló:
—Cortesía profesional.
Enviado por MELODY LEE
DOS SUJETOS, uno pesimista y el otro un eterno optimista, llevaban años siendo amigos.
Un día, el optimista, quien constantemente hacía lo posible por que su amigo viera el lado positivo de las cosas, encontró un perro que podía caminar sobre el agua. Es perfecto, pensó. Nadie podría encontrarle un defecto. Y para mostrar las habilidades del animal, decidió llevar a su amigo a cazar patos. A media mañana lograron darle a uno, que cayó al otro lado del lago. Cuando el optimista envió al perro a recogerlo, éste trotó sobre el agua, cogió al ave con el hocico y regresó corriendo.
—¿No es maravilloso? —preguntó el optimista a su amigo.
—Mmm... —dijo el pesimista—. Ese perro no sabe nadar, ¿verdad?
UN NIÑO le pregunta a su madre:
—¿Cómo nació mi hermanito?
A lo que ella responde:
—Primero salió la cabecita, después las manitas y por último los piecitos.
El niño se queda pensativo, y agrega:
—¿Y cuándo lo armaron?
Enviado por NATALIA OLVERA