Publicado en
marzo 09, 2014
AL LEER un diario, busco primero la sección de deportes, donde se registran los triunfos del hombre. La primera plana solo lleva cuenta de sus fracasos.
— William Lyon Phelps
DIME LO que sientes cuando, estando en tu aposento, lo ilumina la Luna llena mientras va muriendo la luz de tu lámpara, y te diré cuántos años tienes, y sabré también si eres feliz.
— Henri Fréderic Amiel
SI TUVIESE solo dos cualidades por las cuales juzgar si un muchacho promete, escogería la curiosidad y la resolución, pues solo los curiosos aprenden y únicamente los resueltos vencen los obstáculos del aprendizaje. Siempre me ha entusiasmado más el cociente inquisitivo que el cociente intelectual.
— Eugene Wilson, director de admisiones de la Universidad Amherst
EN CUESTIÓN de economía, parece haber tres clases de gente: las Hormigas, que se complacen en pensar en el dinero y en hacer con él cosas sensatas; y las Cigarras, a quienes no les gusta pensar en el dinero, que disfrutan mientras les dura.
Por último, hay un tercer grupo, el de las Cigarras de pies de plomo, al cual, por cierto, pertenezco yo. A nosotros también nos encanta saltar a la luz del sol todo eldía, escupiendo por el colmillo, pero no lo podemos hacer con verdadero gusto debido a cierta vena contumaz que nos hace lamentarnos de ello después. Aburridos del dinero, aparte los gustos que nos proporciona, pensamos en él con fanfarronería, y por eso nuestra economía es más presunción que realidad.
— Peg Bracken
LOS AMIGOS son generalmente del mismo sexo, porque cuando el hombre y la mujer están de acuerdo es solo en sus conclusiones; las razones de uno y otra son siempre diferentes.
— George Santayana, en The Life of Reason
UNA VEZ pregunté al campeón de ajedrez Boris Spassky :
—¿No cree usted que, como resultado de jugar ajedrez, se ha acostumbrado a planear por anticipado todos los pasos que da en la vida? ¿No entorpece ello la espontaneidad de la vida misma?
Spassky lo pensó un rato, y luego contestó:
—Sí, es verdad que a veces soy demasiado calculador en determinadas circunstancias. Pero la vida es un contrincante que de vez en cuando hace jugadas tan inesperadas, que no podemos anticipar la réplica apropiada, por mucho que lo deseemos.
— Evgueny Evtushenko