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No podemos ayudar a otro a subir una montaña sin acercarnos a la cima nosotros mismos.
Todo tiro no hecho es tiro errado.
Las mujeres hacen la compra con una lista; los hombres la hacen así como conducen: sin pedir instrucciones.
A juicio de los gatos, las personas no somos más que muebles de sangre caliente.
Conocerse a sí mismo implica ser capaz de observarse en acción con otro.
Con la edad he aprendido a escuchar en vez de acusar.
Nuestra mayor fuente de conocimiento son nuestros clientes más insatisfechos.
El corazón nos enseña a hablar; la cabeza, a callar.
Una persona sin amigos es como un libro que nadie lee.
Nuestro trabajo más importante estará siempre en casa.
Florecer libremente: ésta es mi definición del éxito.
No hace falta conocer el peligro para tener miedo; de hecho, los peligros desconocidos son los que inspiran más temor.
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