Publicado en
mayo 09, 2010
El Presidente va a una escuela primaria para inaugurar la apertura del año lectivo en la Costa.
Después de su discurso, ofrece a los alumnos un espacio para cualquier pregunta que los chicos le deseen formular.
Un pequeño levanta la mano y el Presidente le pregunta su nombre...
― Carlitos, responde el niño.
― ¿Y cuál es tu pregunta Carlitos? ―Responde el Presidente,
― Tengo 4 preguntas:
― Primera. ¿Por qué se expresa tan mal de los periodistas, en especial de aquellos que le hacen preguntas que a usted no le gusta?
― Segunda. Usted... ¿ganó las elecciones limpiamente?
― Tercera. ¿Qué pasará con el canal 5 de televisión?
― Cuarta. ¿Por qué se ha dedicado a hacer campaña política permanente en lugar de dedicarse a gobernar; es decir, para lo que fue electo?
Justo en ese momento que el niño termina sus preguntas, suena la campana del recreo. El Presidente informa a los niños que continuará después del recreo...
Cuando termina el recreo el Presidente dice:
― ¡OK! ¿En dónde nos quedamos?... ¡OH, ya se! Tiempo para las preguntas.
Se dirige a los niños y dice:
― ¿Quién tiene una pregunta que hacerme?
Otro niño levanta su mano y el Presidente le pregunta el nombre.
― Pepito, ―responde el niño.
― ¿Y cuál es tu pregunta, Pepito?
―Bueno, realmente tengo 6 preguntas
― Primera. ¿Por qué se expresa tan mal de los periodistas, en especial de aquellos que le hacen preguntas que a usted no le gusta?
― Segunda. Usted... ¿ganó las elecciones limpiamente?
― Tercera. ¿Qué pasará con el canal 5 de televisión?
― Cuarta. ¿Por qué se ha dedicado a hacer campaña política permanente en lugar de dedicarse a gobernar; es decir, para lo que fue electo?
― Quinta. ¿Por qué la campana del recreo tocó 20 minutos antes de lo acostumbrado?
― Y Sexta. ¿A dónde chuch$#%^ se llevaron a Carlitos?